Chimalhuacán, Estado de México.- Una llamada telefónica interrumpió anoche a la familia Rivero Jiménez, quien se preparaba para cenar luego de una larga jornada de trabajo en el municipio de Chimalhuacán.
Como si se tratara de un mal presagio, el teléfono retumbó en la vivienda justo antes de las nueve de la noche entre una fuerte tormenta en el barrio Ciudad Alegre; eran malas noticias.
Ángel Daniel Rojo Cervantes, estudiante del Tecnológico de Estudios Superiores de Chimalhuacán (TESCHI), y uno de los más jóvenes de la familia, había sufrido un accidente.
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“Nada más nos hablaron que había un accidente pero nos imaginamos que era dentro de la escuela”, explicó su abuela Gloria Jiménez, quien desde los dos años se convirtió, en realidad, en su madre.
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El joven de 20 años fue encontrado sin vida sobre la avenida Arca de Noe, víctima de la tromba que cayó en gran parte del Valle de México.
Estudiante de su segundo semestre de la licenciatura de Gastronomía, aparentemente regresaba a casa en un trayecto de unos dos kilómetros, sin embargo, a medio camino la lluvia le arrebató la vida.
“Ayer me dijo que iba a salir a las nueve de la noche, porque lunes y miércoles salía a las nueve de la noche”.
“Lo esperábamos para cenar pero de repente sonó el teléfono y me dijeron que Ángel Daniel había tenido un accidente pero nunca pensamos que ya estaba muerto”, explicó entre lágrimas.
Vecinos encontraron su cuerpo flotando en aguas negras que subieron hasta el medio metro de altura. Según las primeras versiones, el joven tenía una lesión en la cabeza.
“Ahorita no sabemos qué es lo que pasó solamente tenía una herida aquí en la sien y estaba todo bien mojado porque no había paso porque estaba inundado”
“Ya cuando nos hablaron vimos que estaban los policías ahí, llegó la ambulancia pero se fueron porque ya estaba muerto solo nos dijo un joven que nos sacó del agua”, recordó su abuela.
Este jueves afuera del ministerio público de Chimalhuacán sus familiares esperaron por horas la entrega del cuerpo y de sus pertenencias; su teléfono, su ropa y su mochila que lo acompañaban a clase.
“Era su camino del diario porque él estaba estudiando en el Teschi…primero iba en su carro, luego en su bici pero ya como entró el mexibus ya se iba en el Mexibus”, explicaron.
La obra entregada recientemente por autoridades del gobierno estatal y local pretendía mejorar los servicios de movilidad en esa región del Estado de México.
Para ello, habilitaron un carril para la circulación de las unidades articuladas a lo largo de la calle Venustiano Carranza y Arca de Noe, ambas inundadas por la fuerte lluvia que cayó entrada la noche.
“Hay accidentes y si van a haber más, pero imagínese ya vienen los tiempos de lluvia. Hasta para uno porque no podíamos ni pasar, tuvimos que pasar con una patrulla”.
“Aquí nunca había visto eso, por eso nunca me imaginé pero cuando vi que estaba todo horrible y eso que supuestamente arreglaron era para que ni si quiera se encharcara”, lamentó la abuela de Daniel.
Daniel no fue la única víctima. José Antonio Pérez García también fue víctima de las inundaciones en el municipio de Chimalhuacán.
Aunque sus familiares no aceptaron platicar de lo ocurrido, algunos amigos explicaron que el joven de 22 años viajaba en motocicleta, pero al enfrentarse a la inundación sobre la avenida, prefirió refugiarse en una estación del Mexibús.
“Iba en moto, pero como todo estaba inundado se bajó para irse caminado, pero cuando se iba a subir a una estación del Mexibus se empezó a electrocutar. Ya no pudieron ayudarlo”, contaron amigos.
Ambos fueron despedidos este jueves por sus compañeros de plantel, quienes realizaron manifestaciones en el municipio para exigir que sus muertes no queden impunes y se revise la infraestructura colocada a lo largo de la vía.
VGB