CRISIS DEL AGUA

“No tenemos ni gota”; acusan a piperos de “huachicolear” agua en Ecatepec

En Ecatepec la escasez de agua no sólo se agrava por la reducción en el abasto a cargo del gobierno municipal y estatal, sino que organizaciones de piperos revenden el líquido de pozos municipales a los habitantes

Piperos 'huachicolean' agua y la revenden en Ecatepec
Piperos "huachicolean" agua y la revenden en EcatepecCréditos: Cuartoscuro
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Los vecinos de Ecatepec viven azotados por dos frentes: acusan a piperos de revender el agua de los pozos municipales, bajo el cobijo de sindicatos como el 26 de Julio (antes Sindicato Libertad) y el 25 de marzo –a quienes acusan de “tomar” los pozos para huachicolear el agua y no como una exigencia por mejorar el abasto–. A eso se suman las deudas por agua que no dispensa la autoridad municipal y los obliga a pagar un servicio que no reciben.

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Vecinos de colonias como Ciudad Azteca, La Florida y Sagitario, que conforman la llamada Quinta Zona, consultados por La Silla Rota, acusan que el huachicoleo de agua se ha vuelto una práctica común entre operadores de pipas privadas que operan en la región.

Además de eso, aseguran que pagan dos veces el agua que consumen: pues pagan el servicio ante SAPASE, el organismo descentralizado para el abasto de agua en Ecatepec, y deben pagar pipas a empresas privadas donde sindicatos –como el 26 de Julio  y el 25 de marzo– tienen agremiados.

“No hay agua, no hay nada, ni una gota tenemos, y no de hoy, sino de varios meses ya”, señala Bertha, vecina desde hace más de 30 años de la colonia Ciudad Azteca, una zona con problemas de agua potable.

Desde hace tres años, sus hijos y su esposo se han acostumbrado a vivir sin agua. “Solo de pipas, porque de la red no cae”, dice. La zona se ha visto afectada por la falta de este suministro al menos desde hace 5 años.

Las “tomas” de los pozos 

El 5 de julio de 2021, piperos del entonces Sindicato Libertad realizaron la toma de 7 pozos de abasto de agua, en protesta porque el gobierno municipal encabezado, por Fernando Vilchis, les suspendió un contrato de más de 1 millón de pesos mensuales, para que los carros cisterna de esa organización abastecieran de agua a las colonias del municipio que lo requerían. 

Los vecinos de la Quinta Zona, consultados por La Silla Rota, acusan que, en realidad, la toma de los pozos significó un saqueo de agua que después vendieron en pipas particulares: un negocio millonario, donde se mantiene sin agua de abastecimiento directo a 500,000 personas de Ecatepec, a quienes les cobran 180 pesos por cada mil litros, como lo explicó el líder comunitario Rodolfo Ríos, en entrevista con este medio.

“Sabemos por los vecinos que llenan las pipas en los pozos del municipio, pero luego les venden esa agua a los vecinos; ganan mediante contrato con el Ayuntamiento y con la venta a la comunidad”. 

Informes del gobierno municipal de Ecatepec señalan que, hasta septiembre de 2022, había al menos 7 casos reportados de robo de agua de pozos o ductos de agua públicos y, hasta 2021, al menos a 4 pozos de SAPASE los han dejado de utilizar, debido a que fueron tomados por civiles “ajenos al organismo”, ubicados en las colonias del municipio y que son ocupados como centros de abasto para pipas particulares.

Hasta el año anterior, el organismo público descentralizado informó que tenía conocimiento de la existencia de 7 carpetas de investigación por huachicol de agua por parte de particulares.



Los nexos con el crimen 

Al entonces Sindicato Libertad, según datos en poder de la Secretaría de Gobierno del Estado de México, se le relacionaba con grupos delictivos como “Los Mojarras” y “Los Vázquez”, quienes se dedicaban al robo de combustible en ductos de Pemex –como la extracción de gas LP– que luego presuntamente distribuían en expendios del Valle de México. 

Estos grupos también estaban acusados de controlar zonas de distribución de agua, de gas, contratos de obras para uso de camiones en el traslado de materiales para obras. La Fiscalía General de Justicia del Estado de México comprobó la relación de esos grupos en homicidios, amenazas, lesiones de personas y de causar daños en pipas en Lomas de Chapultepec, Tecamachalco, Naucalpan y Huixquilucan. 


Lo anterior motivó que legisladores locales de Ecatepec propusieran, en la LXI Legislatura del Congreso del Estado de México, que se realizara la modificación al Código Penal para tipificar como delito la extracción de agua sin los debidos permisos, la instalación de tomas clandestinas y perforación de ductos estatales o municipales de distribución. Sólo en Ecatepec, los legisladores hablaron de pérdidas económicas por el huachicoleo de agua de hasta cerca de 1,000 millones de pesos anuales.

Vecinos de la Quinta Zona de Ecatepec refirieron que el Sindicato 26 de Julio (hoy Sindicato Libertad) cuenta con unas 600 pipas aue realizan la distribución vía terrestre del líquido que consiguen de la extracción ilegal de agua de los pozos municipales.

Los mismos vecinos consultados por La Silla Rota, quienes pidieron el anonimato, aseguraron que los pozos de agua de los pueblos de Chiconautla, San Pedro Xalostoc y Tulpetlac están “prácticamente secuestrados” por organizaciones sindicales. 

Recurrir al huachicol por necesidad

Con 800 pesos, la familia de Bertha apenas abastece una cisterna y algunos botes que guardan en el patio. Si la cuidan, les dura hasta dos meses, pero a veces la necesidad crece y tienen que solicitarla dos veces al mes.

“Apenas nos enfermamos de gripa. Tuvimos que tener más cuidados porque nos dijeron que teníamos que tener limpieza, pero cómo le hacíamos si no hay agua”.

En cambio, si prefieren economizar pueden acceder al servicio a la mitad de precio en puntos de huachicol ubicados en las zonas más profundas de la colonia.

“Allá te las venden a la mitad, pero hay que estar acarreando o rentando una camioneta para que te la vengan a dejar. Pero no nos gusta porque si ven que no tenemos agua más nos cierran la llave y nos obligan a comprar”.

Las mismas autoridades reconocen que el huachicoleo de agua es un tema pendiente de solucionar, pues la misma población recurre al agua que les vende el crimen por necesidad. 

“El agua en la quinta zona sigue siendo un tema que, primero, se ha politizado porque de repente había cortes arbitrarios de suministro y la misma gente empezó a buscar cómo solucionar sus problemas. Ahora ya se ponen bombas de extracción y nos pican tubos: igual que el huachicol de combustible, es huachicol, pero de agua”, asegura Eli Hernández, director del organismo local de agua.

Explica que al principio algunos vecinos solo extraían agua de las tomas para cubrir sus necesidades básicas, pero otros, como los piperos privados amparados por los sindicatos, comenzaron a lucrar. Conectaron bombas y tubos y realizan venta ilegal de agua.

“A veces ellos mismos pican o le dan golpes al tubo para que empiece a gotear y se haga una fuentecita de agua. No es lo mismo que en las noches una persona saca a una cubeta para su uso domiciliario, sanitario, que de repente estás instalaciones que se empiezan a hacer ya para el huachicol”, dijo en entrevista.

Los problemas se concentran en colonias colindantes con el Circuito Exterior Mexiquense (CEM), donde las autoridades locales han iniciado la perforaron de pozos y plantas de tratamiento de agua para aminorar la escasez, pero que han enfrentado retrasos por falta de recursos.

“Hay colonias todavía aquí en el centro que si les falta agua más de tres o cuatro horas quieren cerrar las avenidas porque dicen que tienen un desabasto general, cuando en realidad, en un tandeo regular, pueden pasar varias horas o incluso días, pero es un sentido de estrategia para hacer llegar agua a zonas donde todavía cuesta trabajo llegar”.

El gobierno municipal de Ecatepec reconoció que aún se encuentran pendientes la conclusión de siete pozos para la extracción de agua potable que mejorarían la distribución del líquido en zonas de la localidad que registran escasez.

El huachicoleo del agua también ha sido detectado en Cuautitlán Izcalli, donde se localizó una toma clandestina de una empresa dedicada a la venta de agua potable en colonias de este municipio, la que extraía sin autorización un promedio diario de 120 pipas de 20,000 litros cada una, las cuales comercializaba hasta en 400 a 600 pesos cada una, en agravio del organismo de agua de la localidad.