“Fueron como dos semanas las que fue la venta más baja, el tiempo que estuvieron taladrando fue cuando más bajó. Ya ahorita mínimo que se lleven esos tubos que dejaron tirados”, dice un vendedor dulces y botanas que trabaja en la esquina de las calles Durango y Córdoba, en la colonia Roma, luego de varios meses de trabajos para cambiar la tubería de agua potable en esa zona.
Cristian trabaja de lunes a viernes ofreciendo sus productos afuera de un banco en la calle Durango. El comerciante ha sido testigo de los trabajos en el sistema de agua potable que se llevan a cabo sobre esta vialidad, desde la Plaza Río de Janeiro hasta avenida Cuauhtémoc.
Los trabajos que comenzaron con perforación en el asfalto y banquetas de un lado de Durango, han afectado las ventas y limpieza de comerciantes ambulantes y establecidos en la zona.
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“Pues sí bajó la venta, ahorita se ve limpio a comparación de como estaba hace unas semanas, ya limpiaron un poco, porque había cascajo y basura y mucho polvo. Yo creo dejó de venir un 30 por ciento de la gente”, aseguró el trabajador de la cafetería ‘Aroma’, mientras limpia el polvo de bancos y mesas.
Sobre la calle Durango hay decenas de negocios y organizaciones: desde sedes de partidos políticos, hospitales privados, relojerías, cafeterías y sobre la banqueta varios puestos semifijos, en su mayoría de comida.
“Nosotros no hicimos un poco a un lado porque el polvo si nos ha ‘dado en la torre’, la gente no come donde está sucio, pues hemos aguantado, pero ya deberían terminar para poder trabajar como antes”, pide una de vendedora de tacos que pide no dar su nombre.
Además de las quejas por los trabajos que llevan más de tres meses, trabajadores de la zona denunciaron que personal de una obra en construcción ubicada sobre Durango, casi esquina con Córdoba tiraba cascajo de la obra en la calle, en donde se amontonaban los desechos por los trabajos de la tubería de agua.
“Cuando estaban perforando y dejando los montones de cascajo, los del edificio de allá adelante que están construyendo se vieron bien vivos y sacaban sus cascajo y basura y lo tiraban acá”, asegura Cristian.
En un recorrido por la calle se observa que, de la Plaza Río de Janeiro, donde comenzaron los trabajos, hay varias excavaciones sin tapar y tubos sobre vía, y conforme se avanza hacía avenida Cuauhtémoc, los montículos de tierra y asfalto aún están en el lugar.
“Tengo entendido que están conectando el agua potable y para maniobrar las llaves necesitan dejar abierto, pero ya son meses que no terminan, por favor que ya acaben de meter las tuberías, yo no podía estacionarme, que es mínimo, comparado con los de los negocios de comida”, dice Estefanía, trabajadora de la zona.
DJC