Durante 48 horas, peritos de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México han estado excavando en una bodega ubicada en el municipio de Tenango del Valle buscando restos humanos. Al corte de este sábado, han extraído 42 paquetes emplayados con restos humanos.
Se presume que este lugar fue empleado como fosa para enterrar a víctimas del Cártel Jalisco Nueva Generación, específicamente de la célula que opera en el Valle de Toluca y al sur de la entidad.
A las víctimas, se presume, se les secuestraba, torturaba y asesinaba. Todo indica que el lugar se convirtió en fosa desde hace dos años. La bodega que también servía como salón de fiestas y está ubicada en la calle Revolución, en las inmediaciones de la colonia La Joya.
Te podría interesar
“El Pozolero”, detrás de la narcofosa
La fosa clandestina fue localizada tras la captura de nueve presuntos integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación, de estos, cuatro fueron detenidos en el municipio de Tenancingo, donde operaban, y fueron identificados como Carlos Karim “N” de 22 años, Jessy Antony Salvador “N” de 19 años, Jorge Alfredo “N” de 40 años y Jaime Luis “N” de 29 año, a quienes se les investiga por diversos homicidios en el Valle de Toluca.
“La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), en conjunto con la Secretaría de Seguridad Estatal (SS), la Secretaría de Defensa Nacional (SEDENA) y la Comisión Nacional Antihomicidio (CONAHO) de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), realizaron acciones operativas coordinadas para la detención de cuatro presuntos criminales en el municipio de Tenancingo y cinco investigados más en el municipio de Ixtapaluca”, se detalló.
De acuerdo con información de la FGJEM, entre los capturados en Ixtapaluca destaca Jamie Luis "N" (alias "El Pozolero" y/o "666"), jefe de plaza del CJNG y otros cuatro sujetos más.
"El Pozolero", originario del estado de Oaxaca, habría secuestrado a una mujer en el municipio de Tenancingo a quien le amputó dos dedos con la intención de cobrar el rescate en agosto del año pasado.
Si bien el operativo de liberación de la víctima dejó un saldo de cuatro personas detenidas, este sujeto logró evadir la justicia durante cinco meses.
Los cateos
La captura de estos presuntos integrantes del crimen organizado llevó al cateo de tres inmuebles, el de Tenango del Valle donde se encontraron restos humanos; así como dos más en la calle Cerrada Aldama de la colonia San Isidro, en el municipio de Chapultepec; y en la calle Cerrada Antonio Caso, colonia Santa Ana Tlapaltitlán, en el municipio de Toluca.
En estos dos últimos, los elementos de la FGJEM encontraron envoltorios con hierba verde al parecer marihuana.
Respecto a los restos que presumen son humanos, se dio a conocer que no se han realizado las confrontas de ADN para la identificación de los restos localizados por lo que no se ha determinado cuántas víctimas fueron enterradas en el lugar.
Narcofosa y salón de fiestas
La bodega de la colonia La Joya era rentada e incluso estaba en venta, sin que los clientes supieran que bajo la superficie había restos humanos, informaron las fuentes cercanas a la investigación.
Fue el jueves cuando autoridades estatales y federales implementaron un operativo en la bodega, donde aparentemente no había nada extraño; sin embargo, con la información obtenida, rompieron el piso y excavaron, lo que dio como resultado el hallazgo de por lo menos 42 paquetes emplayados en la fosa clandestina. Las excavaciones continúan.
Las autoridades continúan realizando diligencias en el lugar, y los restos ya son analizados por la Coordinación General de Servicios Periciales a fin de determinar el número de víctimas y su identidad.
Fosas clandestinas en el Valle de Toluca
En septiembre del año pasado, un total de cinco cuerpos, cuatro de mujeres y uno de un hombre, fueron rescatados de las fosas clandestinas que la célula de secuestradores denominada como La Línea, utilizaba en la delegación de San Cristóbal Huichochitlán, al norte de Toluca.
(djh)