Miguel Ángel Mancera fue señalado como cabeza de una red de espionaje cuando se desempeñaba como jefe de Gobierno de la Ciudad de México, según una declaración de José Jaime Slomianski Aguilar, extitular de la Agencia de Gestión Urbana (AGU).
Slomianski Aguilar, quien ahora está prófugo de la justicia, detalló que la red de espionaje se montó en el número 15 de la calle Manuel Márquez Sterling. Ahí se generaban ganancias económicas que entregaba Raúl Peralta Alvarado, entonces jefe de la Policía Judicial.
En dicho domicilio, se presentaba Mancera para enterarse de información de sus oponentes políticos, se lee en el documento de la declaración que Slomianski Aguilar remitió a la fiscal Ernestina Godoy Ramos el pasado 29 de agosto, el cual cita el diario El Universal.
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“El entonces jefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera sabía de esta casa de espionaje y que incluso participaba en su funcionamiento aportando recursos económicos”, precisa Slomianski Aguilar.
¿QUÉ MÁS SABEMOS DEL PRESUNTO ESPIONAJE DE MANCERA?
De acuerdo al columnista Antonio Nieto, en un texto publicado en La Silla Rota en 2018, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, e influyentes políticos de Morena eran el objetivo del centro de espionaje montado presuntamente por el exjefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera.
Las pesquisas de la Procuraduría capitalina (PGJ-CDMX) y de la Procuraduría General de la República (PGR) han ido recabando indicios de que Ebrard, por su cercanía con el presidente Andrés Manuel López Obrador, era blanco de escuchas telefónicas.
En el centro operaban entre 30 y 40 trabajadores, algunos adscritos a Base Lince, del gobierno local, y otros a la Procuraduría.
De acuerdo con las pesquisas, la mayoría de ellos estaban dados de alta como personal de estructura y como jefes administrativos especializados.
Con base en las investigaciones de la PGJ, en el centro se hacían también geolocalizaciones de teléfonos celulares y clasificación de datos financieros.
El espionaje era apoyado por agentes de campo, los cuales utilizaban una camioneta Explorer gris y una Chevrolet Van blanca.
La entonces procuradora, Ernestina Godoy, afirmó que el inmueble de dos pisos estaba bajo resguardo y que fueron recuperadas algunas carpetas con papelería, computadoras desarmadas, esqueletos de aparatos electrónicos y otros objetos.
Sin embargo, aclaró, el sitio fue vaciado antes de que el nuevo gobierno interviniera.
La Visitaduría, personal de la Fiscalía de Servidores Públicos y el equipo de Godoy realizaron entrevistas a servidores públicos de la PGJ que pudieran estar relacionados o tener conocimiento de estos hechos.