A una semana del homicidio de Martín, un despachador de gasolina quien murió arrollado el sábado 5 de noviembre al intentar cobrar 480 pesos que le debía el conductor de un Versa en la gasolinera del kilómetro 48 de la México-Toluca, la justicia parece lejana para su familia luego de que se notificara que el presunto responsable puede seguir el proceso en libertad.
Sentada en el despacho de sus abogados, Ivonne, la pareja de Martín y madre de su hijo, relató para La Silla Rota que desde su muerte, la desesperanza ahoga a la familia.
Al ser cuestionada sobre si sabía qué había impulsado a su esposo a brincarle al cofre del sujeto que se negó a pagarle, reconoció que lo hizo porque ese dinero le iba a ser descontado de su pago y para su familia significaban la comida de tres días.
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“Acudí a la gasolinera después de que me dijeran que había tenido un accidente y, efectivamente, estaba ahí tirado su cuerpo, nos dijeron que había sido porque había llegado un carro a cargar gasolina y, al momento de intentar hacer el cobro, él reclamó al respecto y fue arrastrado por un carro varios metros hasta estrellarse por un tráiler”.
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Martín intentaba cobrar 480 pesos que le debía el conductor de un Versa color blanco, pues el dueño de la gasolinera Pemex, ubicada en la comunidad San Antonio El Llanito del municipio de Ocoyoacac, les descuenta lo que los automovilistas no les pagan.
Para mantener a su familia, Martín tenía tres trabajos, en el turno nocturno era despachador, cuando salía brindaba el servicio de transporte escolar, regresaba a su casa a dormir un poco para que en las tardes saliera a conseguir más ingresos y regresar a la gasolinera.
“Que se haga justicia porque él era un buen hombre con un niño de cuatro años, conmigo, con mi hija de 18 años, tenía tres trabajos para que pudiéramos tener una mejor calidad de vida, no lo merecía, no era un hombre que tomara, que fumara, que tuviera vicios, era un hombre totalmente de casa y me lo mataron de forma brutal y eso merece justicia”.
La muerte del despachador
El sábado por la madrugada, la víctima intentó detener a un sujeto identificado como Jesús “N” quien pretendía huir sin pagar por la gasolina que le acababan de cargar.
De acuerdo con los primeros reportes, Jesús “N” llegó a la estación que se encuentra en la entrada del municipio de Ocoyoacac, abordo de un Nissan Versa con placas de circulación NFX6955, pidió que 20 litros de combustible e intentó huir alrededor de las 02:38 horas.
Para tratar de impedir que se fuera sin pagar el total de 480 pesos, el despachador brincó encima del cofre del auto y lo arrastró alrededor de 50 metros hasta que el vehículo impactó contra un tracto camión con rótulos de la empresa Harinas Elizondo.
En el lugar fue detenido Jesus “N” por elementos de la policía municipal de Ocoyoacac; sin embargo, debido a que también resultó herido por el choque, fue trasladado a un hospital de Toluca en calidad de detenido.
Jesús, en libertad
Debido a que el plazo de 48 horas para la determinación de la situación jurídica del detenido por parte del Ministerio Público feneció y Jesús N no fue presentado, debido a que continúa hospitalizado, podrá enfrentar el cargo de homicidio culposo en libertad.
Aunque cuenta con seguro de autos, este no se hará responsable debido a que el sujeto iba en estado de ebriedad.
Se dio a conocer, además, que no se presentaron cargos por el robo de la gasolina.
No era un despachador, era mi familia: Ivonne
Ivonne aún no cree que no verá más a su compañero de vida; sin embargo, está segura de que quiere justicia, que el responsable pague por lo que sucedió.
“No solo era un empleado de un empleado de una gasolinera, era un padre de familia, era un buen hombre para la comunidad que siempre ayudó a sus compañeros de trabajo cuando lo necesitaron, no hay palabras de nadie más que pueda decir lo contrario y la justicia tiene que venir de algún modo y no dejar que esto pase como una carpeta y ya”.
Además, la familia de Martín busca que las condiciones laborales de los despachadores de de gasolina se dignifiquen porque ésta es la segunda vez que uno de ellos muere por intentar cobrar la gasolina que vendieron en los últimos 18 meses en el Valle de Toluca.
VGB