Pachuca.— Un grupo de trabajadores del restaurante El Molino, que exige mejores condiciones laborales a su empleador Álvaro Gutiérrez Barranco, acudió al Poder Judicial de la Federación (PJF) a interponer una demanda de amparo.
“Exigimos rápida respuesta de las autoridades estatales y federales”, fue la principal consigna que los empleados escribieron en pancartas que exhibieron al exterior del inmueble, situado sobre el bulevar Luis Donaldo Colosio.
De acuerdo con Eduardo González Santos, quien se identificó como velador de dicho restaurante de Pachuca, los inconformes asistieron al PJF a solicitar la protección de la justicia federal contra una resolución que hace dos días emitió el Tribunal Laboral del Estado de Hidalgo.
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Dicha autoridad estatal se encargó de realizar un conteo de votos respecto al personal del restaurante que está en contra y a favor de una huelga que el 16 de mayo comenzaron agremiados al Sindicato de Trabajadores del Comercio en General de Hidalgo Nueva Era.
Los resultados arrojaron que 24 empleados de El Molino estaban en contra y únicamente 13 a favor, situación que implicaría la conclusión de la huelga; sin embargo, los colaboradores inconformes acusaron que presuntamente familiares del dueño también participaron en el conteo y por ello, fueron rebasados.
“Hubo familiares del patrón dentro de las votaciones. Los que estamos a favor de la huelga éramos 16 pero no dejaron votar a tres. Pero del patrón había familiares que no pertenecían al Molino y por eso se vio reflejada la diferencia”, dijo.
Indicaron que ese fue el motivo de su asistencia al Poder Judicial Federal y agregaron que, hasta la tarde de este 1 de junio, las instalaciones del restaurante situado sobre la avenida Benito Juárez de Pachuca, permanecían cerradas con las banderas rojinegras.
Regina Ortega Copca mencionó que laboró en El Molino en diversos puestos como: cajera y galopina. Sin embargo, consideró que, en caso de reanudarse las actividades, podrían existir represalias contra los empleados que al igual que ella, están a favor de la huelga.
“Me gustaría que entonces me liquiden, si el patrón no nos quiere como trabajadores, entonces que nos corra, que nos liquide, ya no queremos trabajar en las mismas condiciones”, dijo.
Los colaboradores que comenzaron la huelga desde hace tres semanas, denunciaron irregularidades como cobro de uniformes y falta de pago de horas extras, lo cual fue aceptado por el dueño del establecimiento Álvaro Gutiérrez en una conferencia de prensa que ofreció el pasado 26 de mayo.
Sin embargo, en aquella ocasión también indicó que era falso que se les proporcionara comida en mal estado y agregó, que subsanaría las deficiencias una vez que se restablecieran las actividades laborales. Cabe recordar que hay otro grupo de trabajadores que se pronunciaron en contra de la huelga, tras señalar que el paro de labores afectaba sus ingresos económicos.
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