Ciudad de México.— Hace 10 años, un grupo de adultos mayores se organizó para crear el grupo de danza Rayito de Luna, uno de los artistas hidalguenses que se presentó en el evento Hidalgo en Los Pinos; donde artesanos, cocineros tradicionales, músicos y bailarines presentaron una muestra de la diversidad de Hidalgo en la capital mexicana.
Doña Tomasa Sánchez y otras adultas mayores se reunían para hacer ejercicio en el centro de Metztitlán, esto para mantenerse activas; a veces caminaban, otras realizaban rutinas creadas por los jóvenes de preparatoria.
La adulta mayor de 74 años contó que poco a poco descubrió que le gustaba el baile y le platicó a las demás del grupo. Buscó un profesor de baile porque también quería “ejercicio más fuerte”, le recomendaron a Armando Juárez, su actual profesor de danza, y comenzó la historia de la señora Tomy -como le gusta que la llamen- y el grupo de danza Rayito de Luna.
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“Con la danza mi salud mejoró mucho porque sí sufría, yo, mucho dolor de articulación. Y gracias a Dios allí, pues me compuse. Sigo caminando y camino muy fuerte”, dijo con orgullo doña Tomy.
Agradeció que tomaran en cuenta a su agrupación para el desfile y la cartelera cultural en Los Pinos; agregó que su próximo sueño es representar a México en Estados Unidos, a través del folclor.
“Quiero ir a bailar a Estados Unidos, ojalá y Dios quiera que sí me conceda irme a conocer allá y a participar en mi danza”, mencionó mientras sus compañeras la miraban con cariño y la describieron como una mujer con mucha energía.
“Poniendo en alto nuestras raíces”
Hace cuatro años, Ignacia Badilla, una de las bailarinas más jóvenes, se integró al grupo Rayito de Luna, por la invitación de su amiga Came -una de las adultas mayores fundadoras- y el profesor. Ella tiene 35 años.
“Empecé como yendo, como que a un poquito de baile, un poquito de zumba y pues me integraron y poco a poco fui construyendo mis trajes, mis vestuarios y amo la danza, lo disfruto al máximo”.
Nancy -como le llaman de cariño- refirió que la danza folklórica es un compromiso con la sociedad por la disciplina con los ensayos, la convivencia con las compañeras y las participaciones en las que representan las danzas de su región para contar las historias de sus ancestros.
“... las adultas tienen una energía que nosotros no podemos cansarnos. Ellas cada vez quieren otro ensayo, quieren otro ensayo, siempre dan lo mejor de ellas pues no es la edad, sino es el mantenerse siempre activa, siempre alegre, siempre viva”, explicó.
Asimismo, se dijo contenta por representar a Metztitlán como “mujeres mexicanas, mujeres adultas, siempre poniendo en alto nuestras raíces”, los símbolos, las creencias y las experiencias de los pobladores de la sierra en el Complejo Cultural Los Pinos.
Rayito de Luna
El grupo de 10 años de antigüedad integró a 30 personas originarias de Metztitlán, la mayoría de ellas tienen arriba de 70 años de edad, refirió Armando Juárez Rodríguez, quien enseña a las adultas mayores.
Recordó que cuando lo invitaron se emocionó, pero tuvo miedo por lo que tomó cursos de primeros auxilios para atender cualquier emergencia. Las bailarinas aprendieron bailes folclóricos, danzas rituales y bailes populares, en su mayoría de México.
En el Complejo Cultural Los Pino bailaron la danza del Maíz, del Arco, de la Olla y otras piezas inspiradas y para rendir homenaje a la virgen del Refugio, la más representativa de Metztitlán, ya que el pueblo le atribuyó la protección ante una peste en la región.
“Una de las historias más padres que tenemos en el municipio es de una famosísima peste que hubo tiempo atrás. Y se dice que gente de muy bajos recursos se refugiaba en el cuadro de la Virgen del Refugio, la cual fue encontrada en el convento, se llama convento de los Santos Reyes. La gente le tiene una fe enorme”, relató.
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