Pachuca.— El secretario de Educación Pública de Hidalgo, Natividad Castrejón Valdez, aclaró que el fallecimiento del profesor Valter Oswaldo Hernández Vergara no derivó de la riña registrada en días pasados en el municipio de Huejutla, como se difundió en medios locales, sino por una fuerte caída.
En contexto, durante la celebración del Xantolo, en Huejutla, se registró una riña entre profesores que se encontraban en estado de ebriedad y en la que, se dijo, había participado el profesor de la escuela Primaria General Justo Sierra, ubicada en Atlapexco; no obstante, el secretario de Educación desmintió tal versión y puntualizó que la pérdida se dio en un contexto diferente.
“Estuve presente en el evento, terminamos aproximadamente a las 9:00 de la noche. Tengo entendido que a eso de las 2:00 de la mañana hubo un pequeño zafarrancho donde algunos docentes participaron, pero además había gente de la comunidad; sin embargo, no pasó a mayores, tenemos otro caso en diferente momento, tiempo y lugar en donde, por la información que tenemos de la familia, el compañero sufrió una caída y se golpeó en el cráneo, algunos maestros llamaron a su casa y su familia tomó el caso para internarlo inmediatamente”.
Detalló que el docente fue trasladado a un nosocomio ubicado en Tampico, donde le diagnosticaron fractura de cráneo, perdió la vida este lunes 4 de noviembre. El caso, dijo, fue atendido por la Secretaría de Educación y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación.
“Hay que dejarlo bien claro para evitar revictimización del compañero que era personal de apoyo, no pasó en una gresca, ni en el lugar donde hubo un ligero enfrentamiento, fue un accidente en otro contexto y lamentablemente falleció”.
Castrejón Valdez indicó que se tiene diálogo permanentemente con Said Vargas, representante del SNTE en Hidalgo y que los eventos seguirán no sin antes invitar al magisterio a la cordura, ya que afirmó, los maestros son educadores de tiempo completo y su participación en los eventos deben ser con moderación y cuidando la salud personal y la de todos.
“Lo que hacemos en el aula y en la vida privada siempre tiene un efecto, debo insistir que la alegría siga, que la euforia por ver a los compañeros y las celebraciones artístico y culturales continúen, pero debemos hacerlos con moderación, privilegiando la seguridad de todos”.
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