Para tener una mesa de diálogo con el nuevo gobernador de Chiapas, Eduardo Ramírez Aguilar y buscar justicia por sus seres queridos desaparecidos o asesinados, una decena de mujeres, integrantes de la agrupación “Madres en Resistencia”, inició este miércoles un ayuno total en la entrada de Palacio de Gobierno.
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Adriana Gómez Martínez, madre de Jade Guadalupe Yuing Gómez, asesinada dentro del Instituto del Deporte en enero del año 2020, dejó en claro que “somos madres, hermanas e hijas las que estamos aquí, y sólo pedimos que nos reciban, desde el gobernador hasta el fiscal Jorge Luis Llaven Abarca, porque tenemos derecho a saber qué ocurre con nuestros casos”.
Lamentó que la administración de Rutilio Escandón Cadenas haya concluido y con él, una serie de deudas en materia de justicia, por lo que se quedarán plantadas hasta que sean recibidas.
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Jade Guadalupe, en ese entonces de 14 años de edad, fue hallada suspendida en una de las tribunas de ese espacio deportivo; en principio, la Fiscalía de Chiapas advirtió que se trataba de un suicidio, pero con las investigaciones se determinó que la muchacha fue asesinada.
“Tengo la esperanza de que el maldito feminicida esté tras las rejas, porque ahorita goza de impunidad; no hay reparación del daño, nada, y nosotras seguiremos en nuestra lucha”, manifestó.
Por su parte, Majarani Chavarría afirmó que le darán el beneficio de la duda al nuevo Ejecutivo estatal, quien tomó el cargo el pasado 8 de diciembre, para que les ayude a encontrar a sus desaparecidos, como en su caso, a su papá Víctor Manuel Chavarría González, quien fue sacado de su casa por hombres armados el 8 de mayo de 2023.
Hasta hoy, lamentó, el caso de su padre no presenta un avance significativo, por lo que no le quedó otra alternativa que manifestarse de forma pacífica, hasta ser atendida.
Silencio sobre los desaparecidos
Isabel Torres, madre de Cassandra Isabel Arias Torres, lamentó que, a dos años de la desaparición forzada de su hija en el municipio de Berriozábal, aún no haya ningún avance y, lo peor de todo, agregó, que la actual administración no toque el tema de los desaparecidos en Chiapas.
Tras recordar que el gobierno de Escandón Cadenas fue el más sangriento que ha tenido el estado, advirtió que ella, al menos, no confía en las autoridades, pero le llama la atención que, por el momento, las autoridades sólo se enfoquen en tres delitos: extorsión (cobro de piso), robo de vehículos y homicidios.
“He estado al pendiente de lo que dice (tanto el actual gobernador como el fiscal general) y no han tocado lo de los desaparecidos, ¿Por qué? ¿Cuál es el miedo?”, cuestionó Isabel, quien les pidió un poco de humanidad y que se pongan en su lugar para que sientan el dolor que ellas viven a diario.
Para ella, menciona, las mismas autoridades, al menos del sexenio que acaba de culminar, fueron un “lastre” porque sus carpetas de investigación no avanzaron como querían.
Consuelo Moreno Hilerio contó que ha vivido un “infierno” desde hace año y medio, cuando su esposo Ángel Méndez Bolaños e hijo Alan David Méndez Moreno desaparecieron en la zona de Puerto Madero, municipio de Tapachula.
Desde el 5 de julio de 2023, ella mencionó que ha tenido poca información de sus seres queridos, como las credenciales de elector de ambos, mismas que se las entregó una persona que las halló cerca de una bodega en el sector donde fueron vistos por última vez.
“Al principio sí nos extorsionaron, pagamos 300 mil pesos, porque hasta nos mandaron una fotografía de mi esposo, aparecía golpeado, pero cuando solicité un audio, escucharlo, ahí nos dimos cuenta que todo era falso, pero ya habíamos pagado”, recordó.
De acuerdo con ella, sus seres queridos viajaron a Puerto Madero porque venderían un automóvil, sin embargo, ya no supieron nada de ellos. “A eso se dedicaba mi marido, a vender carros de la marca Chevrolet”.
Consuelo, quien aceptó que desde que ellos desaparecieron la vida ya no es la misma y que en fechas como éstas la tristeza los “ahoga”, confió en que el gobierno de Eduardo Ramírez será diferente y escuchará la voz de las madres que están desesperadas por obtener justicia.
Afirmó que, últimamente, se han efectuado cateos en la colonia El Encanto, en Puerto Madero, e incluso hay personas detenidas, por lo que ahí, auguró, podrían estar los plagiarios de su esposo e hijo, “siento que están vivos, sólo quiero que me los regresen”.
Las “Madres en Resistencia” permanecerán en el centro de Tuxtla hasta que obtengan respuestas positivas a sus demandas.
Dentro del grupo, hay otras madres y hermanas que buscan que las ley les dé la razón, como Hilda Moreno, cuyo hijo Jesús Esteban Mazariegos Moreno fue “levantado” por sujetos armados en la capital de Chiapas el 6 de diciembre del año pasado.
Asimismo está Leyvi Arreola, hermana de Victoria, víctima de feminicidio el pasado 21 de septiembre de 2022, por parte de su propio esposo Javier Antonio “N”; el hecho ocurrió en la carretera, en el municipio de Tonalá, y uno de los testigos fue el hijo de ambos, en ese entonces de 4 años de edad.
VGB