Paula, de dos años de edad, grita “juticia” y “pesente” en el pase de lista de las 41 víctimas que murieron por meningitis causada por un hongo en Durango, que dejó a más de 80 niñas y niños huérfanos de madre y decenas de familias con problemas psicológicos y económicos.
Con su playera blanca y la leyenda Justicia para mi mamá, ella como otros niños y niñas tomados de la mano de familiares caminaron en la marcha con la que se recordó a las víctimas fallecidas por meningitis, la crisis sanitaria registrada en Durango en 2022.
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Han pasado dos años, este 2 de noviembre Día de Muertos, se conmemoraron sin tener respuestas sobre cómo un hongo, encontrado comúnmente en campos agrícolas, llegó a los cerebros de 40 madres de familia que dieron a luz y un hombre que fue operado por una fractura de tibia y peroné.
Camina de la mano de una de sus tías, repite las consignas y come su paleta, porque al final Paula vive su primera infancia. Las familias caminan hacia la Catedral de Durango, que en 2022 vio como las víctimas de meningitis morían casi una tras otra. Era común escuchar “salió en las noticias que falleció otra muchacha, pobre de su bebé”.
Dana, de nueve años de edad, es otra de las integrantes de la protesta, cuyo tamaño contrasta con la cantidad de personas que se aglomeraron dos días antes en el centro de Durango para pedir halloween. A ella, su papá Julián Corrales, le dio la noticia en 2022, de que su mamá Carmen González había fallecido, por lo que junto a sus hermanos Mateo y Julián, quedó huérfana de mamá.
Hay decenas de niñas y niños en la caminata
Kaiden, de dos años, también participó aunque todavía no habla mucho, acompañó a su papá y abuelitos, los papás de Aniri, también fallecida por meningitis.
“Todos los días lloró por mi hija, es un dolor que no se supera, estoy aprendiendo a vivir con ese dolor pero no he superado”, dice su madre Ana María del Carmen Macías Castañeda, quien además denuncia la revictimización de instituciones, como la Secretaría de Educación.
“No ha liberado un pago que por derecho que tenía mi hija que se llama pago de marchas tiene un año y medio que falleció y todavía es tiempo que no hacen ese pago”, explica.
Justicia a medias no es justicia, señala, porque a algunas personas se les ha pagado a una indemnización, pero claro que ningún dinero puede pagar una vida y tampoco justicia la revictimización o la falta de respuestas.
La falta de solución, de información concisa es una demanda de los dolientes, es su derecho saber cómo llegó el hongo fusarium solani al cerebro de sus seres amados.
José de la Cruz Díaz Ledezma, papá de Nayeli, cuya muerte se conmemoró este 2 de noviembre, reclama que no hay resignación, pues “la justicia en el estado va para atrás o viene en tortuga”.
“El estado sabe de donde salió la medicina, saben perfectamente quien la traficó”, reprocha el abuelito de un niño que dice “es muy acelerado pero muy buen niño”. Él, es uno de los más de 80 niñas y niños huérfanos de mamá, que conocen a quien los parió a través de fotografías y relatos de sus familiares.
Nallely significa “te quiero” en Zapoteco, por eso José de la Cruz, nombró así a su hija, y lo gritó con fuerza en la marcha que terminó en la entrada de la Catedral de Durango, donde se ofició una misa en su memoria.
Por cierto, en la celebración un grupo de japoneses turistas, tomaban algunas fotografías parece que pensaban que se trataba de un acto relacionado con el colorido y azucarado día de muertos, no un trago amargo de realidad local.
Lo que sabemos del caso de meningitis en Durango
Los hospitales del Parque, Dickava, San Carlos y Santé, en Durango, fueron los lugares donde se aplicó el medicamento contaminado que generó la meningitis y con ello las muertes, la orfandad, la crisis económica y las secuelas físicas y psicológicas en las 39 sobrevivientes.
Velas encendidas, cartulinas, pasos lentos pero fuertes, niñas en carriolas acompañadas de su papás viudos, el grito de “ellas no murieron a ellas las mataron”, y un pase de lista de las fallecidas que duró tres minutos, dejaron claro que Durango no olvida a las víctimas de meningitis.
Armida, Janeth Valadez, María Isabel Lainez, Magdalena Leticia, Gloria Isabel, Betsabé Martínez, Cinthya Reyes, Adriana Quiñones, Gabriela Lizeth, Arturo Limones, Nallely, Alma Larreta, Lupita Esmeralda, Nicolasa, Nora Adriana, Margarita del Socorro, Noemi Magali, Casandra Gracia, Daniela, Brenda Cortez, Vanessa lascano, Eva Bernal, Diana Pamela, Virginia Reyes, Rubí Arrieta, Laura Verónica, María del Carmen, Dulce María, María de Jesús, Nancy Guadalupe, Mónica Berenice, Ana Isabel, Lizbeth, Martha, Ana Laura Delgado, María Alexandra, Karen Azucena, Cristian Aniri, Estela y Carmen Carrera, fueron recordadas por sus hijas, hijos, esposos, mamás y papás que siguen en espera de justicia.