MONTERREY. - La contaminación emitida por la refinería de Pemex Cadereyta, industrias en general y vehículos automotores, pueden llegar a producir cáncer entre la población, al grado de que se ha encontrado partículas de 2.5 micras de contaminantes en el cerebro de cadáveres a los que se ha realizado la autopsia.
Además, los efectos de la contaminación en la zona metropolitana aumentan la afección a las enfermedades respiratorias, el agravamiento entre quienes tienen alguna comorbilidad, en tanto el cáncer también tiene su origen en parte a contaminantes como el dióxido de azufre de la refinería de Cadereyta, comenta el doctor Uriel Chavarría Martínez, especialista en neumología y medicina crítica, profesor de la Facultad de Medicina y el Hospital Universitario, de la Universidad Autónoma de Nuevo León y Coordinador médico del programa de trasplante pulmonar del hospital Christus Muguerza.
El especialista consejero del Observatorio Ciudadano de la Calidad del Aire, define seis grandes grupos que tienen efectos contaminantes y alto impacto en la salud de las personas, principalmente las partículas que se encuentran suspendidas en el aire como son las PM10, las más grandes, y las de 2.5 micras que son las responsables de la bruma que se observa en una ciudad como el Monterrey metropolitano.
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“Estas son más pequeñas tienen posibilidad de pasar a la sangre, recordemos que los pulmones oxigenan la sangre a través del paso del oxígeno, de los alveolos, que son los sacos finales a donde llega el aire hacia los capilares pulmonares que es hacia la sangre”, explica.
“Al legar a la sangre se van a todo el cuerpo y al paso de los años ocasionan problemas en el cerebro, riesgo de enfermedad cerebral vascular embolica, o Alzheimer y Parkinson, aunque estos últimos en una exposición de muchos años, además de cáncer en todas las partes del cuerpo, enfermedad cardiovascular aguda, y enfermedad materno infantil, pues pasan al feto cuando está en útero”, agrega.
Define el grupo de estas partículas de 2.5 micras como las mucho más agresivas, que aumentan la posibilidad de cáncer.
El médico especialista cita otros grupos como es el monóxido de carbono, un gas producto de la combustión de vehículos automotores, que causa daño vascular, cierra vasos sanguíneos y aumenta riesgo de enfermedad coronaria y presenta problemas de oxigenación.
También figura el ozono, que tiene mucho que ver con el cambio climático, la perdida de la capa de ozono externa a nivel superficial o terrenal también es dañina al inhalarse y con ello llegar a los pulmones y ocasionar muerte celular de los tejidos.
El plomo es otro contaminante, pero los óxidos de nitrógeno y de azufre, son un potencial de cáncer, principalmente este último, es que es el que emite la refinería de Cadereyta, dice el doctor Uriel Chavarría.
“Es el azufre producto de la refinación de productos de hidrocarburos, el olor característico de la refinería, el olor que se vino a Monterrey, pues aumentó la producción por designio presidencial y con ello hay más emisiones. Es un Azufre que huele como a huevo podrido y que huele cualquier habitante de Cadereyta, pero los vientos reinantes llevaron al área metropolitana el aroma”, manifiesta el especialista.
Reitera que el proceso de refinación de hidrocarburos es altamente cancerígeno y explica que los médicos y especialistas observan que cuando hay niveles de contaminación más altos, se incrementan las consultas en enfermedades respiratorias.
El también consejero del Observatorio Ciudadano de la Calidad del Aire, destaca que, al parecer, se necesita que haya una respuesta fuerte de la ciudadanía, como salir a manifestar, para que esto cambie. Las fábricas, pedreras y fuentes móviles de contaminación, están bien identificadas. Hay que atacar todas, no sacar la vuelta al bulto, sostiene.
El colapso al sistema de salud es aparente pero no es fácil de mostrarlo directa y contundente, porque este daño a la salud es el de un asesino silencioso, es como un caballo de Troya que se mete al cuerpo y no es fácil establecer una causalidad.
Hay estudios, añade, que centran la asociación a la causalidad demostrada en particulares de 2.5 micras porque se han encontrado en autopsias de personas hasta en cerebro, finaliza.
YA VAN 6 ALERTAS AMBIENTALES
La mala calidad del aire prevalece en la zona metropolitana de Monterrey, por lo que las autoridades de la Secretaría de Medio Ambiente en la entidad emitieron la sexta alerta ambiental del año.
En esta ocasión, la principal fuente de contaminación fue la refinería de Pemex en Cadereyta, a unos 30 kilómetros al oriente de Monterrey, pero cuyos contaminantes llegaron hasta el área conurbada regia.
"Emisiones ostensibles durante la madrugada en la Refinería generan alerta por mala calidad del aire en el área Metropolitana", señala el reporte de la autoridad.
Asimismo, se declaró la calidad del aire extremadamente mala en la estación del municipio de Juárez, colindante con Cadereyta y en la municipalidad de Apodaca, además de Escobedo.
En esta fase del programa de respuesta a contingencias meteorológicas se recomendó a la población evitar quemas de cualquier material o residuo, y abstenerse de realizar actividades al aire libre, aún en patios o jardines, y especialmente a personas vulnerables
En lo que va del año, el 85 por ciento de los días han sido de mala calidad del aire, según el informe de la propia dependencia.
En 2022 se emitieron unas 13 alertas ambientales y la mala calidad del aire también se presentó en alrededor del 85 por ciento de los días.
Otra de las fuentes contaminantes son más de 2 millones 800 mil vehículos de automotor, las empresas pedreras que extraen piedra caliza de los cerros, algunas industrias y la refinería.