TUXTLA GUTIÉRREZ.- “Aún no hay avances en las investigaciones de la muerte de mi hija, y la escuela en donde la hallaron muerta, ¡ya reinició clases!, ¿Cómo es posible eso?”, se cuestionó Flor Emilia Alcázar.
Frente a la entrada de la Fiscalía General del Estado, la madre de Paola Ocampo Alcázar, hallada sin vida el pasado 8 de diciembre dentro de una de las cisternas de la primaria para la que laboró por casi siete años, la “David Gómez” de esta ciudad capital, lamentó que, hasta la fecha, no tenga nada.
Lo que le molesta, cuestionó, es por qué a pocos días de que inicien las vacaciones de Semana Santa, reabran la escuela, “no sé nada, pero si hablamos de sospechosos, empecemos por el director y terminamos con el último (en referencia a trabajadores)”.
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Además, evidenció que, sin duda, el presunto feminicida tiene que estar dentro de ese centro educativo, “que no digan ahora que es de fuera; no sé por qué la mataron, eso le corresponde a la Fiscalía”.
Paola desapareció el 7 de diciembre
La mujer, de 36 años de edad, vivía con su pareja en esta ciudad capital, con quien tenía planes de casarse; sin embargo, la mañana del pasado 7 de diciembre, ya nadie volvió a saber de ella.
De acuerdo con Flor, el primero que llegó a la primaria, el mismo día de la desaparición, fue la pareja de su hija; “y llegó porque le avisaron mis otras hijas; cuando él ya estaba ahí, el que le abrió la tapa de la cisterna fue un intendente”, pero no hallaron nada. Para ese rastreo, el pretendiente de la occisa utilizó una vara.
Para el 8 de diciembre, la búsqueda continuó, y al inspeccionar en la misma cisterna, el cuerpo de Paola flotaba. “Creemos que el cuerpo de mi hija fue ‘sembrado’”.
La situación se enrareció porque, incluso, se efectuaron algunas movilizaciones para exigir justicia, incluida una de la Sección VII de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), de la que la víctima era parte.
Ante el cierre de la institución educativa, los alumnos comenzaron a recibir clases, de 2 a 5 de la tarde, en otra primaria cercana, sin embargo, empezó a bajar la matrícula de la misma, al grado de que los salones que albergaban hasta 30 o 35 alumnos, se quedaron con menos de la mitad.
Maricruz Velasco Nájera, madre de Karla Gómez Velasco, asesinada el 4 de julio de 2018 en esta misma ciudad capital, criticó que la Fiscalía siempre haga “sus cochinadas de carpetas de investigación (sic)”.
De hecho, puntualizó que, junto a Flor Alcázar y otras madres que buscan justicia por los feminicidios de sus hijas, se apostarán en la Escuela Primaria “David Gómez” para que no continúen las clases y se agilicen las pesquisas en torno al caso de Paola.
Por su parte, Adriana Gómez evidenció que el caso de Paola es similar al de su hija Jade Yuing Gómez, asesinada el 14 de enero de 2020 dentro del Instituto del Deporte, “se cometieron muchas omisiones y negligencias, y ya pudimos comprobar todo eso, porque mi hija no se suicidó, la mataron”.