YUCATÁN

Denuncian bullying y abuso sexual en secundaria de Yucatán

S. Pech Muñoz sufrió bullying por parte de 5 compañeros y abuso sexual, la adolescente y su familia han buscado la ayuda de la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado de Yucatán

Créditos: Especial
Escrito en ESTADOS el

MÉRIDA. - Cinco adolescentes de la secundaria del municipio de Mocochá, Yucatán agredieron física y sexualmente a S. Pech Muñoz, una adolescente de 12 años y compañera de salón. El personal de la escuela y algunos tutores de los menores responsabilizan a la menor, ya que como ella “juega béisbol” disfruta estar con hombres.

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Los menores responden a los nombres de Emiliano, Axel, Ángel, José Antonio y Agustín y al igual que la prefecta Fátima V. y la directora Janet S., ya fueron denunciados en la Fiscalía General del Estado (FGE). La familia también buscó ayuda en la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado de Yucatán (SEGEY).

La madre de la menor, Suleymi Muñoz, narró que fue en horario escolar que ocurrieron los hechos.

“Los habían enviado por mesas a la biblioteca y uno la agarró por el cuello, forcejeo con ella para obligarla a hincarse, se resistió y él aprovechó para tocarla” la mamá de la menor agregó que fue en ese momento cuando abusaron de su hija y además la insultaron verbalmente.

Escuela donde sucedió el abuso 

Docentes justificaron con comentarios machistas   

S. Pech Muñoz no pidió ayuda en la escuela. No tenía confianza en la prefecta Fátima y la directora Janet. En ocasiones anteriores lo intentó y la señalaban de pleitista. Siempre le repetían que era responsable por jugar béisbol con varones.

La adolescente vivió bullying (acoso escolar) desde el inicio del ciclo escolar. Se recrudeció después de que sufrió un esguince en octubre, que la incapacitó para caminar por al menos un mes. Regresó a la escuela porque la prefecta Fátima V. se negó a entregar su justificación médica y los maestros iban a reprobarla. Por órdenes médicas tenía que ir con pantalón deportivo y chanclas.

“La directora le comentó frente al grupo ¿qué por qué entró con esa forma de vestir?, que sí no quiere usar falda que se haga un uniforme igual al de los varones”, apuntó Suleymi.

Los cinco adolescentes le pateaban su pie y eso demoró la recuperación de la menor. Pasó de un mes a mes y medio. Las agresiones empeoraban cada vez más. Los maestros también las observaban y no hacían nada.

“Un día fue con peinado de trencitas y me pidió que se lo quite, que no lo soportaba. Le dije que no que se veía bonita y me contó que se burlaron de ella, porque parecía más machito”, recordó la madre de la menor.

En un primer momento, Suleymi intentó solucionar el tema del uniforme y las faltas con la directora y prefecta. Sin embargo, el abuso sexual que vivió su hija cambió las cosas. Se acercó a comentar los hechos y la respuesta que recibió del personal de la escuela fue darle de baja a la menor.

“Les pregunté a ambas que solución habría para mi hija en la parte emocional y psicológica y dijeron que ninguna, que eso es por nuestra parte. Le pedí que lleve a los cinco menores y sus tutores, pero no quería que fueran porque son menores de edad. Le expliqué que lo que ellos hacían no era de menores de edad”, manifestó.

Pese a la situación, la mamá de uno de los adolescentes responsables, le dijo a la menor que era su culpa por jugar béisbol, un deporte que según ella es de hombres. La dieron de baja.

Suleymi fue a buscar ayuda a la Secretaría de las Mujeres (Semujeres) y le brindaron asesoría legal y psicológica para su hija. En la Segey le dijeron que la persona que está encargada de ese tema no se encontraba. Días después la contactó por teléfono y no le resolvió nada.