Conforme pasan las horas, la angustia e incertidumbre invaden a Lluvia Chávez, quien no sabe nada de sus familiares desde el pasado 24 de octubre, cuando el huracán Otis impactó en Guerrero.
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Lluvia, originaria de la región de Costa Grande, espera una señal de esperanza para poder comunicarse con su tía Xóchitl Luciano Hernández, quien vive en la colonia La Antorcha, ubicada cerca de la zona de Mozimba, en Acapulco.
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“Nosotros no sabemos nada de mi tía desde el día martes. Ella se encuentra con su hermana, su hermano y su mamá. Lo único que nos dijeron las autoridades es que allá hubo un deslave grande. Estamos muy angustiados”, refiere en entrevista con La Silla Rota.
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La tristeza se acrecentó en Lluvia cuando le hicieron llegar imágenes de cuerpos atrapados en un lodazal, tras el desgajamiento del cerro.
“Un familiar nos dijo que Acapulco parece una película de terror, que está de lo peor, que hay muertos que no han levantado, que ya empezó a oler a muerto. Ya comenzó a oler muy fuerte, realmente la cantidad de muertos que dijo la presidenta no es tal cual, no se ponen ni de acuerdo, ella dijo que había 14 fallecidos y las autoridades dijeron que son 27 fallecidos”.
Y, como una maldición, señala que a Guerrero le llueve sobre mojado, pues, además del caos que se ha desatado tras el paso del huracán, la situación de violencia es imparable, razón por la cual no ha podido trasladarse a donde viven sus familiares desaparecidos.
“Hay mucha distorsión, no sabemos qué es lo que realmente pasa, no hemos podido ir porque dijeron que están robando, asaltando, quitando las cosas. Ayer hubo una balacera en Coyuca, no hay paso, se está agotando todo”.
Para Lluvia las horas avanzan sin mayor novedad, pues aunque las autoridades reportan que la comunicación se va restableciendo poco a poco, Lluvia no ha tenido la suerte de contactar a su familia. Aun así, no pierde la esperanza.
“La gran mayoría de las personas ya se han podido comunicar, pero nosotros no. Yo tengo la esperanza de que como viven en el cerro, no puedan bajar debido a todos los escombros. Es una esperanza, porque realmente ya estuvieron los helicópteros y lo que vimos en las noticias es que no hay casas ahí. Imagínese cuántos días son, son cuatro días, sin agua, alimento, es algo muy preocupante”.
Señala que ni la alcaldesa de Acapulco, Abelina López Rodríguez, ni la gobernadora estatal Evelyn Salgado, han podido mantener el orden en la zona.
“No se ponen de acuerdo con las cifras de muertos, no hay organización, sólo se están enfocando en la parte del centro, las demás colonias que están más arriba no han dado ningún tipo de apoyo. No han podido llegar a donde están las familias más vulnerables porque son las que están en el cerro”.
VGB