El dólar podría romper la barrera de los 17 pesos en los próximos días y cotizar por abajo de ese piso, de acuerdo con un análisis semanal de Grupo Financiero Banorte, con lo que calcula la moneda estadounidense podría cotizarse en un rango de 16.80 pesos.
La última ocasión que el tipo de cambio del peso frente al dólar estuvo por debajo de los 17 pesos fue el 17 de diciembre del 2015, hace casi seis años y medio, de acuerdo con Enrique Quintana, experto en temas económicos. En su columna en El Financiero, Quintana dio como referencia que entre el 31 de diciembre del año pasado y el viernes 9 de junio, el dólar se abarató en 11.2 por ciento.
"A tasa anual, es decir, comparando con el mismo día del año pasado, la apreciación de nuestra moneda es de 11.9 por ciento", escribió Enrique Quintana.
Entre las 32 divisas más negociadas del planeta, el peso mexicano es la segunda más ganadora de 2023, sólo detrás del peso colombiano.
A pesar de un posible desacople adicional entre las tasas de interés del Banco de México (Banxico) y la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, la moneda nacional se ha mantenido fuerte apoyada por un carry atractivo, “incluso se comporta como un proxy del dólar con beta alta ante las variaciones de otras divisas”, destacaron analistas de Banorte.
“Este dinamismo es estructuralmente diferente a otros periodos donde se comporta como hedge (activo de cobertura) de la exposición de inversionistas a otros mercados emergentes. Además, el peso ha sido más resistente que en ocasiones anteriores a la volatilidad global”, agregaron en su boletín semanal.
Lo bueno y lo malo del dólar por debajo de los 17 pesos
Jorge Sánchez Tello, consultor independiente dijo a La Silla Rota que si el dólar llega a los 16 pesos, "puede beneficiar a quienes compran productos de importación, pero perjudica a las exportaciones y remesas porque reciben menos".
Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Grupo Base dijo que las variaciones del tipo de cambio juegan a favor porque no presiona los precios de los artículos importados y por lo tanto se quitan presiones sobre la inflación y en la medida que el tipo de cambio esté más abajo es más estable y baja la incertidumbre y puede mejorar la economía, pero para los receptores de es malo porque pierden poder adquisitivo y los exportadores porque los productos mexicanos se vuelven más caros en relación con los productos que se venden en el exterior.