Tras su aprobación en comisiones del Senado el pasado domingo, la Reforma Judicial del presidente López Obrador será discutida hoy miércoles en el pleno, lo que podría derivar en su eventual aprobación. Para su puesta en marcha tendría que supuestamente ser votada a favor por 86 senadores, y después ser aprobada en 17 congresos locales para su declararla como constitucional, sin embargo; tal parece, que para lograr este objetivo, en el ajedrez legislativo muchas cosas se mueven de maneras distintas.
Por un lado, la reforma representa la última gran apuesta del presidente López Obrador, por otro, sus detractores ven en ella una amenaza a la democracia y a las instituciones judiciales. ¿Qué está en juego? Tanto para el poder, como para sus detractores. Por el lado del oficialismo sería la última gran reforma de AMLO, su legado y su herencia para la nueva Presidenta de la República Dra. Claudia Sheinbaum Pardo un Poder Judicial que sin entrar en estridencias y sesgos podría irse convirtiendo en uno más apacible para los intereses del gobierno. Pero hay herencias buenas y malas, que pone en una encrucijada al Poder Ejecutivo dependiendo del resultado de la aprobación o no de la misma.
Si la reforma llegará a aprobarse en los términos dispuestos por el oficialismo, y logra hacerse de un senador traidor para llegar a sus 86 votos necesarios para su aprobación entonces podría consolidar la posición del Ejecutivo para el nuevo sexenio, sería la puerta para garantizarle que hagan los que hagan los opositores no habría manera de arrebatarle, o siquiera disputarle ninguno de sus intereses, seis años correrían así, esto es las 12 reformas constitucionales heredadas del obradorato, más lo que la administración de la Dra. Sheinbaum disponga, además con un Poder Judicial digamos más dispuesto.
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Aquí la encrucijada, existe la lógica que solamente necesitan un voto para pasar la reforma, pero la trampa estaría en el argumento del Senador Fernández Noroña aludiendo que la mayoría de 85 y fracción de senadores que con una regla aritmética significaría que ya habrían alcanzado lo necesario para su aprobación, de no evangelizar a otro más. Sin embargo; la Corte ha advertido en diversos criterios, incluso del Ministro Saldivar que advierte que “los votos de los legisladores son indivisibles” no hay fracciones de personas, no hay la mitad ni la tercera parte de un legislador, por lo tanto, no cabria entonces la regla aritmética señalada por Noroña. Pero claro y que nadie se asombre cuando se vote el miércoles y el oficialismo la declare válida con los criterios antes emitidos
Si esto sucede, la crispación explotaría, más movilizaciones, más presiones extranjeras, mayor volatilidad en materia económica como los 34 mil millones de dólares de inversión americana que se encuentran en vilo, ante el resultado de su discusión y algunos etcéteras más. Por otro lado, la Corte ya ha asomado la posibilidad de tomarla para su análisis, al final de cuentas sería la Corte misma quien decidiría su futuro ante la solicitud de la oposición porque sea revisada su constitucionalidad.
Pero de no socavar la diatriba numérica y no lograr la mayoría se le habría asestado el primer gran golpe al liderazgo de la Presidencia de Sheinbaum, sin siquiera haberse sentado a la silla presidencial, en una pelea que no era de ella, erosionando su capital político que no tenía necesidad de dilapidar. El gobierno entrante compró un proyecto ambicioso, pero también muy riesgoso para su presidenta y su futuro, pero de ganar la votación las cosas serían muy distintas.
Sin embargo, para que todo esto suceda los 43 senadores de la oposición deberán resistir a los embates del oficialismo, deberán propiciar una cohesión que no admita traiciones, todos los Senadores opositores se han pronunciado en contra de la Reforma bastará una sola persona para terminar con los intereses oficiales, pero también para ratificarlos, es un voto de oro ¿De dónde vendrá el traidor? O se irán por la libre con el argumento del punto tanto por ciento, lo cierto es que parte del futuro que se escribe está hoy en manos tanto de Alito, como de Dante Delgado, casi Kafkiano, de ese tamaño la encrucijada y la herencia
La otra cara de la moneda: En muchos medios de comunicación se ha trascendido la posibilidad que el Senador Panista Miguel Ángel Yunez Márquez, podría ser quien le dé el voto a Morena para su ansiada reforma, recordemos que su padre, Miguel Ángel Yunez Linares, juro tomar revancha por las acciones en penales emprendidas por el gobernador Cuitlahuac García en su contra, eso y la posibilidad de abanderar la próxima gobernatura de Veracruz con Morena serían sus primicias para cambiar de bando, mientras tanto el partido que lo defendió, lo postuló y lo vio crecer hoy lo único, hizo gobernador a su padre es al que podría darle la espalda.
Mientras tanto, en otro frente políticos algunos columnistas han señalado la salida del país de un par de exsenadores Miguel Osorio Chong y Miguel Ángel Mancera para “estudiar en Alemania” sobre ambos pesa muchos casos de corrupción y de enriquecimiento en el sexenio anterior y que tuvieron el beneplácito de no ser llevados a cuentas por la actual administración, ¿no será que su salida se deba a que la suerte se ha agotado y por ello su autoexilio?
En días pasados trascendió la detención de Marco Antonio Rios Berber y de Gildardo López Astudillo alias “El Gil” el flamante testigo colaborador del GIEI en el caso Ayotzinapa, hoy por hoy nadie puede confiar en la veracidad de sus dichos, ni en sus declaraciones, lo único que hizo además de ser parte en el homicidio de los normalistas, es revictimizarlos, usarlos, e incriminar a quien lo llevó a la justicia, ojalá su estancia esta vez, sea duradera y comience a pesar la ley en contra de quienes realmente hicieron este atroz daño a los normalistas.