A unas horas de que inicie la celebración de Año Nuevo en el continente americano, donde Puerto Rico y las Islas Vírgenes de los Estados Unidos serán los primeros lugares donde se recibirá al 2025, México no se queda atrás con los preparativos.
Por su amplia extensión territorial y su posición geográfica, el país azteca cuenta con cuatro husos horarios, lo que impide que los mexicanos recibamos al mismo tiempo la llegada del nuevo año.
Zona horaria del Sureste
En primer lugar, encontramos al estado de Quintana Roo, que se rige por la zona horaria del Sureste, donde la localidad de Isla Mujeres será la primera en llegar al 1 de enero.
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Zona horaria del Centro
Una hora más tarde, celebrarán los habitantes que se rigen por la zona horaria del Centro, la cual es la más extensa y comprende los estados de Aguascalientes, Campeche, Ciudad de México, Colima, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Estado de México, Michoacán, Morelos, Oaxaca, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí, Tabasco, Tlaxcala, Veracruz, Yucatán y Zacatecas.
Asimismo, encontramos el caso de algunos estados que presentan una condición singular, al dividirse en dos husos horarios ante su extensión, por lo que depende de la localidad será la hora que sus habitantes celebrarán el 2025.
Estos son: Coahuila, Durango, Nuevo León y Tamaulipas exceptuando sus localidades fronterizas con Estados Unidos, al igual que Nayarit que se divide por las comunidades en la zona costera de Bahía de Banderas, que siguen la zona horaria del Pacífico.
Zona horaria del Pacífico
A estas excepciones se unen los estados de Baja California Sur, Sonora y Sinaloa, quienes en su totalidad están regidos por este tercer huso horario.
Zona horaria del Noroeste
Finalmente, y con una diferencia de dos horas con la Ciudad de México, se encuentra el estado de Baja California cuya capital es la ciudad de Mexicali y se rigen por la zona horaria del Noroeste, convirtiéndose en la ultima entidad de la República en darle la bienvenida a este nuevo periodo que deseamos esté lleno de felicidad y prosperidad.