Durante muchos años, las peleterías han jugado un papel importante en la vida social y cultural del país. Estos negocios dedicados a la elaboración de ropa, carteras, zapatos, botas y sombreros de cuero han existido desde la época prehispánica, cuando nuestros ancestros usaban la piel de algunos animales para confeccionar una gran diversidad de productos.
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Posteriormente y tras la llegada de los españoles, la peletería de la Nueva España experimentó un cambio importantísimo al incorporar dentro de su proceso varias técnicas europeas, permitiendo que artículos como botas, sombreros y monturas fueran diseñados. Esto sumado con la ganadería ha hecho que este oficio se convierta en uno de los más antiguos no solamente en México, sino también en el mundo.
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Ahora, como es costumbre, te contaremos de un local ubicado en el Centro Histórico de la Ciudad de México que, gracias a su popularidad y reconocimiento, es nombrado como la peletería más vieja de la capital, siendo una parada obligatoria si eres amante del cuero o buscas adquirir un producto de piel.
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¿Cuál es la historia detrás de la peletería más vieja de la Ciudad de México?
Se trata de la Peletería Migliano, establecimiento fundado por el inmigrante italiano Juan Migliano en 1889, que no solamente es la peletería más antigua de la Ciudad de México, sino también uno de los primeros negocios establecidos en la capital. Originalmente ubicada en Iztapalapa, la empresa se dedicaba al procesamiento de pieles de ganado de su propia hacienda.
Gracias a la popularidad y el reconocimiento que le dio el público, la Peletería Migliano se trasladó al número 116 de la calle República de Uruguay en el Centro Histórico, donde aún opera y recibe a sus clientes con una gran cantidad de artículos de piel. De hecho, el edificio que alberga la tienda es considerado un monumento histórico por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Poco a poco este local se fue haciendo de un nombre tanto dentro como fuera de la ciudad. De hecho, durante la Revolución Mexicana, la hacienda de la familia Migliano en Iztapalapa fue saqueada por los hombres de Pancho Villa, quienes acusaron e intentaron ejecutar a Juan Migliano en tres ocasiones; sin embargo, fue salvado gracias a sus conexiones con la masonería francesa.
Otro momento importante que ocurrió dentro de la peletería fue un intento de asesinato fallido en contra de León Trotski, un pensador político que buscó refugio en México después de que tuviera diferencias con Lenin y, de acuerdo con los relatos orales, el pintor David Alfaro Siqueiros fue identificado como uno de los autores intelectuales del ataque.
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A lo largo de los años, la Peletería Migliano ha contado con una clientela distinguida, incluyendo a la actriz María Félix, quien visitaba la tienda con frecuencia. Para garantizar su comodidad, se le atendía en el segundo piso del establecimiento, lejos de las multitudes que se congregaban para saludarla.
Actualmente, la tienda es administrada por los hermanos Juan Antonio, Eugenio y Alberto Migliano Maure, quienes representan la tercera generación al frente del negocio familiar. Algunos de los artículos que ofrece el establecimiento van desde diferentes tipos de piel, herrajes, hebillas y herramientas para la fabricación de productos de cuero. Además, comercializan marroquinería, es decir, artículos de piel que prometen una durabilidad superior a una década, como sombreros, maletines o cinturones.
Es crucial resaltar que la Peletería Migliano utiliza materias primas provenientes de animales sacrificados por la industria cárnica, y no realizan negocios con pieles exóticas, lo que demuestra un compromiso con prácticas responsables en la adquisición de sus materiales.
La Peletería Migliano no solo se destaca como un ícono en el sector del cuero en México, sino que también es un reflejo vivo de la historia de la Ciudad de México, habiendo presenciado sucesos importantes y ajustándose a las transformaciones durante más de cien años de vida.