XALAPA, VER. - Hace cuatro años una persona del entorno familiar de María del Rosario Contreras enfermó de cáncer. Ella se dedicó a conseguir ayuda y, como cientos de familias en Veracruz, se enfrentó a las complejas necesidades que atraviesan quienes luchan para que sus seres queridos tengan una oportunidad con la que logren superar la enfermedad.
Pagar traslados y medicamentos se vuelve incosteable para la mayoría y atravesar personalmente por esa experiencia le cambió la vida a María. Al constatar su liderazgo para gestionar ayuda, poco a poco otros familiares y conocidos comenzaron a buscarla para pedirle orientación y conseguir apoyos para pacientes con este mal que puede resultar devastador no sólo para el enfermo.
Pese a todo su esfuerzo su familiar no pudo librar el cáncer, pero fue ésa y otra experiencia las que servirían como una semilla para que María fundara la asociación civil “Mujeres Sembrando Esperanza”, legalmente constituida desde hace dos años. Ella comenta que en sus primeras gestiones conoció a un pequeño quien, por el vínculo que generaron, comenzó a llamarla mamá y le pidió que lo acompañara en todo momento, hasta cuando ya no había nada que hacer para recuperar su salud.
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“Su nombre era Yoxan Cruz, de Minatitlán. Pude estar de cerca de él y en todos los procesos que fue pasando pedía que estuviera con él, junto con su mami. Fue algo fuerte para mí, conmovedor”, relata María, apuntando que el joven de 15 años también terminó falleciendo a causa de un osteosarcoma detectado en su rodilla que finalmente invadió todo su cuerpo.
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Estas pérdidas y lo que vivió a nivel personal hicieron reflexionar a María y preguntarse qué hace la sociedad por los enfermos con cáncer. Opina que se critica o se culpa al gobierno por temas como el desabasto de medicinas o por la falta de programas enfocados a atender la enfermedad, aunque en su opinión cualquier persona puede ayudar.
“Hoy la mamá de Yoxan y yo nos vemos como hermanas (…); él llegó aquí a Xalapa por un osteosarcoma en su rodilla y es un proceso complicado (…); primero le cortaron su pierna, pero sabíamos que al hacer eso el cáncer se iba a expandir en su organismo. Así pasó y se fue a los pulmones, de ahí a todo su cuerpo. Estuvo un año en tratamiento, tenía 14 años cuando enfermó y tres meses después de cumplir 15 años falleció; con ese caso comenzó todo lo que hacemos ahora con la asociación”, menciona María.
ENFERMEDAD DEVASTADORA
La presidenta de “Mujeres Sembrando Esperanza” señala que el cáncer también puede desintegrar a familias. Ha conocido casos en los que padres o madres terminan por abandonar a niños enfermos o los dejan con sus abuelos. Explica que a Xalapa llegan personas provenientes de municipios ubicados a lo largo y ancho del territorio veracruzano buscando la atención médica y tratamientos que sólo pueden encontrar en el Centro Estatal de Cancerología (CECAN).
Sin embargo, es común que estas personas carezcan de un lugar para alojarse y alimentarse mientras los pacientes reciben sus tratamientos. Pagar traslados y su estancia en Xalapa termina llevando a los familiares a la desesperación y a sentirse solos.
“Por eso hay que dar algo como sociedad; no es dinero nada más, yo creo que todos podemos tener algo en casa para aportar, ayudando al tema de la salud de las personas que lo necesitan, es lo que buscamos hacer”, sostiene.
La organización que dirige actualmente cuenta con la Clave Única de Inscripción al Registro Federal de las Organizaciones de la Sociedad Civil (CLUNI), ofreciendo ayuda psicológica para enfermos y sus familiares, asesorías jurídicas y contando con el apoyo de cientos de ciudadanos en campañas enfocadas en donativos de cabello para gorros oncológicos y la recolección de tapas de plástico con las que obtienen fondos.
“Además, se han sumado universidades, pues algunos chicos van a hacer su servicio social con nosotros y vamos a poder servir más a la sociedad. También el Instituto de Belleza Hadas quiso apoyar; cuando vieron nuestro trabajo dijeron que se iban a sumar con nosotros con campañas para cortar cabello a ciudadanos y recibir donativos de pelo”.
Las dos hijas de María le ayudan con la asociación, a la que se sumó un maestro de telesecundaria, abogadas y psicólogas. De esta forma tratan de "abrazar" a enfermos y a sus familias, pues para María los pacientes deben de enfocar sus esfuerzos en superar al cáncer.
“Se necesita mucha ayuda; cada mes vamos al CECAN a dejar refrigerios, despensas, leche, complementos alimenticios, ropa; a veces los familiares llegan pensando en una consulta y se deben de quedar con su enfermo internado por la gravedad de su padecimiento (…); les toma por sorpresa cuando se enteran de que se van a tener que quedar porque se necesita que sean internados”.
Es en estos momentos que la asociación busca intervenir y prevenir que el problema se agrave. Se considera primordial el diagnóstico a tiempo, evitar la desintegración de las familias, que las familias caigan con estafadores o se endeuden y que los pacientes se enfoquen en su tratamiento y recuperación hasta poder tocar la campana.
“Ahorita que acaba de pasar el día internacional contra el cáncer infantil constatamos que las cifras no han disminuido, van en aumento; generalmente recae en familias de escasos recursos, en situación vulnerable, pensamos que por la falta de una buena alimentación. Por eso pedimos ayuda como insumos, leche deslactosada, sopas, frijoles. Si toda la sociedad dona una cosa se hace bastante para ellos”, insiste María.
Ahora, la asociación trabaja en respaldar mensualmente a dos niños enfermos de los 300 menores atendidos por CECAN. Con los apoyos económicos de este mes de febrero se busca que Josmar y Gustavo puedan costear su estancia en la capital para que no abandonen sus tratamientos.
CÁNCER EN VERACRUZ
Hasta el 2019, Veracruz se colocó en primer lugar en casos de cáncer infantil en todo el país, con incidencia principal en menores de 1 a 4 años. De acuerdo con datos del Registro Nacional de Cáncer en Niños y Adolescentes (RNCA), dependiente de la Secretaría de Salud Federal, en ese año fueron notificados mil 922 casos de cáncer infantil.
De todos los casos, 949 corresponden a leucemias, lo que equivale al 49.4 por ciento del total; mientras que 973, o sea el 50.6 por ciento se trata de Tumores Sólidos: “Según la Entidad de Residencia, Veracruz encabeza el mayor número de casos 158 (8.22 %) mientras que Coahuila registró 9 casos (0.46%)”, señala el reporte elaborado por la SSA.
Pero no todos los casos fueron atendidos en la entidad. El reporte indica que cerca de una veintena de personas decidieron tomar tratamiento en otros hospitales, principalmente de la Ciudad de México.
Así, se tiene el caso de dos hospitales que atendieron a pacientes oncológicos provenientes de Veracruz: el primero es el Instituto Nacional de Pediatría de la CDMX, el cual registró 124 casos de atenciones foráneas de las cuales ocho corresponden a la entidad; lo mismo ocurrió con el Hospital 20 de Noviembre de la CDMX el cual registró 98 casos de pacientes de otras entidades. En ese caso, fueron nueve los de Veracruz.
Igualmente, el Hospital Central Sur de Alta Especialidad en CDMX atendió un caso; el Hospital del Niño Poblano en Puebla también se ocupó de un caso proveniente de Veracruz, lo que hace un total de 19 pacientes veracruzanos que prefirieron la atención de otros centros médicos.
Por cuanto hace al tipo de cáncer, Veracruz y Puebla resultaron ambas con 89 casos de leucemia, los más altos en toda la República, con el 9.38 por ciento del total. En el caso de los tumores sólidos, Veracruz reportó 69 casos, la segunda cifra más alta respecto a Guanajuato, con 80 casos.
Sobre el cáncer en adultos, el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Información (INEGI) detalló, con base en información de 2020, que la Ciudad de México, Sonora, Chihuahua, Morelos, Veracruz y Colima fueron las entidades con las tasas de defunciones por tumores malignos más altas en el país.
En el caso de la entidad veracruzana, la tasa de muertes fue de 8.1 por ciento, la quinta más alta, destacando que a partir de los 50 años hay un incremento más dinámico en la tasa de defunción por tumores malignos, tanto en hombres como en mujeres, aunque a partir de los 60 años, los hombres registran tasas mayores a las de las mujeres.
Un reporte de la Universidad Veracruzana (UV) publicado en 2021, rescata estadísticas de 13 años de atención en el Centro Estatal de Cancerología de Veracruz. Se indica que durante el periodo 2006-2018, el CECAN brindó un total de 567 mil 420 consultas, lo que significa un promedio anual de 43 mil 579, y un rango de entre 34 mil 053 y 48 mil 860, con un crecimiento para el período de 30 por ciento.
De esos datos, la UV estima que para el 2025, las consultas por sospecha de cáncer crecerán en un 21 por ciento. El número de consultas de primera vez y subsecuentes fue de 104 mil 348 y 463 mil 072, respectivamente, lo que representa una relación de 4.4 consultas subsecuentes por cada consulta de primera vez. El grupo etario que acudió con mayor frecuencia a consulta fue el de 30 a 49, seguido por el de 60 o más y, por último, el de 50-59 (65.2 por ciento mujeres, y 34.8 por ciento hombres).
Las patologías más frecuentes consultadas en orden de frecuencia fueron: Cáncer de la glándula mamaria, cérvico-uterino, leucemia y linfoma, próstata, ovario, colon y recto, estómago, endometrio, y testículo. Las quimioterapias crecerán más del 40 por ciento de acuerdo con las mismas proyecciones, pues han tenido un aumento sostenido.
En la revisión de los 13 años, se reportaron 75 mil 261 aplicaciones, con un promedio anual de 5,789, un crecimiento global de 118 por ciento en el periodo, y un aumento esperado de 41 por ciento en 2025.
El estudio concluye destacando la insuficiencia de personal médico y paramédico especializado en oncología, además de no contar con las coberturas de las pólizas de mantenimiento correctivo y preventivo continuo para que los equipos trabajen a toda su capacidad sin retrasos y/o rezagos por su alto costo, con las consecuencias que eso conlleva a los indicadores hospitalarios y a la atención al usuario.
mb