*La Ley del IPAB y la eliminación de parte de la deducibilidad en las cuotas de los bancos, la controversia
La entrega del Presupuesto de Ingresos y Egresos de la Federación para 2026 no fue nada fácil. Los cambios de última hora en el paquete económico generaron suspicacias en dos temas: la Ley del IPAB por la posible eliminación en la deducibilidad de las cuotas que aportan los bancos y el aumento en el impuesto a los refrescos por el impacto que tendrá en la industria azucarera.
Pero los malos pensamientos respecto al Presupuesto tenían fundamentos. Hace una semana se anunció la entrega del paquete en Cámara de Diputados para el 8 de septiembre a las 6 de la tarde y a las 7 de la noche en el Senado, en este último se empezaron a enviar los citatorios respectivos para la ceremonia de entrega recepción del documento.
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Sin embargo, de manera inédita, las cosas cambiaron de un momento a otro, ya que poco después de la conferencia mañanera se avisó que el acto sería a las 5 de la tarde en Diputados, pero una hora antes se anunció para pasadas 10 de la noche librando apenas el plazo legal que concluye a la 12 de la noche.
Los que más saben del tema aseguran que uno de los puntos que se revisaron en las horas previas fue la ley del IPAB y es que hace unos días, la presidenta Claudia Sheinbaum anticipó que los bancos ya no podrán deducir la totalidad de las cuotas que pagan al Instituto para la Protección al Ahorro Bancario, recursos que se destinan para el fondo de protección y para el pago de la deuda.
La presidenta dijo que los recursos que se obtendrían por este concepto ascienden a cerca de 10 mil millones de pesos. No obstante en su cálculo, se les fue un pequeñísimo detalle: La ley del IPAB en su artículo 27 establece que “las cuotas a favor del Instituto no tendrán carácter fiscal, por lo que contra su cobro o cualquier otra resolución emitida conforme a la legislación, no procederá medio de defensa alguno ante el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa”.
Cada trimestre los bancos en su conjunto aportan por más de 9 mil millones de pesos al IPAB y al año la cifra llega a los 35 mil millones de pesos. Los intermediarios con las cuotas más altas son: BBVA, Banorte y Santander.
Por lo pronto los banqueros no están muy contentos con la propuesta a pesar de que la Jefa del Ejecutivo ya lo había comentado con algunos directivos de instituciones financieras; por lo pronto la propuesta se ve muy lejana por el candado que tiene la ley, por por lo que cualquier cambio requería una reforma a la legal.
En el caso del aumento en el impuesto a los refrescos y otras bebidas azucaradas, el 28 de agosto se publicó en el Diario Oficial de la Federación un decreto para limitar la importación del endulzante y de esta forma proteger a la industria nacional, sobre todo a los productores de Veracruz, pero 4 días después la Consejería Jurídica anunció un incremento en el impuesto para el sector refresquero, lo que generó preocupación, molestia e inquietud entre los empresarios, quienes se movilizaron con los legisladores para mitigar o frenar la medida.
Lo cierto es que se avecinan días difíciles en la discusión del presupuesto para el 2026.
Así las cosas…