Esta es la historia del bruto queriéndolo separar del neto, y no sean mal pensados, me refiero al salario. Ni uno ni otro pueden estar separados porque se les va la vida. El (salario) bruto existe solo si el (salario) neto también.
Sin embargo, no sabemos la razón por la cual los autores de la legislación de plataformas digitales asignaron como ingresos de los trabajadores de plataformas sólo los netos, dejando de lado los salarios brutos, al contrario del resto de los asalariados del país, para el cálculo de sus salarios y prestaciones.
Bruto, de acuerdo con el Diccionario de la Real Academia, señala que, refiriéndonos al salario, es una cantidad en dinero: “Que no ha experimentado retención o descuento alguno”. Es como un diamante extraído de la naturaleza o una roca protegida por muchos siglos, que no han sido dañados o sufrido deterioro.
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El salario es como un tesoro en bruto, y ese es el que sirve de base para calcular los derechos de los trabajadores, ya sea para determinar a cuánto asciende el pago de su aguinaldo, vacaciones, prima vacacional, horas extras, vales de despensas, y otro tipo de prestaciones. Sólo los descuentos permitidos por la ley pueden disminuir su pago, y es el que se considera neto.
Por eso llama la atención que a los trabajadores de plataformas digitales no se les otorgue el derecho de recibir un tesoro salarial en bruto. Sólo se les otorga de forma escalonada. Comienzan desde el salario más bajo y, para llegar al salario bruto, el escalón más alto, tienen que pagar mayores cargas fiscales y legales que el resto de los asalariados.
El artículo 291-C de la Ley Federal del Trabajo introduce un concepto extraño en la normativa laboral que, por cierto, ningún otro trabajador tiene en este país. Señala que, para ser reconocido como asalariado, debe generar: “ingresos netos mensuales equivalentes a por lo menos un salario mínimo mensual de la Ciudad de México por su trabajo, independientemente del tiempo efectivamente trabajado.”
Hay que considerar que la primera vez que las plataformas registran a sus trabajadores será con el salario mínimo general y, a partir de allí, se les aplican diversos descuentos, obteniendo el ingreso neto mensual.
Lo grave es que luego se divide el ingreso neto entre la totalidad de los días del mes, y no sobre los realmente trabajados, lo que continuará restando los ingresos netos y por ende, menos trabajadores de plataformas digitales estarán cubiertos por la seguridad social.
Además, las autoridades laborales han aplicado al ingreso bruto mensual un “factor de exclusión” por el uso intensivo y continuo de la plataforma digital y del medio de transporte que utilice para el cumplimiento de la tarea asignada que, en realidad, es un descuento que disminuye aún más el ingreso neto mensual: si el trabajador usa vehículos motorizados de cuatro o más ruedas de combustión interna, eléctricos o análogos, la exclusión es del 36% (Categoría A). Para vehículos motorizados de dos ruedas de combustión interna, eléctricos o análogos, la exclusión es del 30% (Categoría B), y para transportes no motorizados o sin medio de transporte, la exclusión es del 12% (Categoría C).
Si, por ejemplo, y simplificando en extremo, el trabajador laboró solamente 12 días (viernes, sábado y domingo, que son los de mayor pedido y viajes), de un mes determinado, y gana, por decir, $10 mil pesos, se le quita el 30% por manejar una motocicleta, y concluiría con un salario neto mensual de $7 mil pesos. Esto lo debería dividir entre los 12 días que trabajó durante el mes, es decir, estaría ganando $583.33 pesos diarios. Una cantidad superior al salario mínimo vigente y, así, estaría dado de alta en el IMSS y en el Infonavit.
Pero no es así, ya que su ganancia mensual de 7 mil pesos se divide entre los 30 días del mes, y tendría en realidad un salario neto diario de $233.33 pesos, muy por debajo del salario mínimo de la CDMX y, por ende, se le daría de baja del IMSS. Así se convertiría en socio independiente del empresario que lo contrata. Esto causa incertidumbre entre los trabajadores de plataformas.
También hay cobros ocultos al trabajador que impactan en la disminución de su salario neto, por ejemplo, el pago por el uso del algoritmo, descuentos por el seguro privado contra accidentes, el descuento del Infonavit en caso de que previamente haya estado registrado, entre otros más.
Hay que recalcar que como lo establece el artículo 291-H fracción V de la Ley Federal del Trabajo, es el dueño del algoritmo digital quien determina el porcentaje del monto que ganará el trabajador, no importando si son altos o depredatorios.
El gobierno no se mete con las ganancias de la empresa trasnacional digital, la cual, en un momento dado, puede ajustar su algoritmo para aumentar el precio de sus tarifas de servicio, disminuir el ingreso que le corresponda al trabajador y, con ello, compensar por los costos de cubrir la seguridad social de sus miles de empleados.
Incluso, en el próximo trimestre o hasta fin de este año, los ingresos netos de los trabajadores serían todavía más pequeños, dado que los factores de exclusión son altísimos. En el caso de la motocicleta, el factor de exclusión sube de 30% al 50%, para el uso del automóvil aumenta del 36% al 60%, y para las bicicletas del 12% al 15%, obligando laborar al trabajador mayor número de horas netas en la plataforma para alcanzar su registro en el IMSS.
En los primeros cinco días de cada mes, la empresa dará avisos al IMSS de las bajas y altas que vayan ocurriendo. Si un mes un trabajador gana menos del salario mínimo, entonces se le dará de baja.
Especial mención para las mujeres trabajadoras de plataformas digitales, quienes tienen a su cargo el cuidado de sus hijos, padres y abuelos, y que difícilmente podrán alcanzar el salario mínimo general requerido para tener seguridad social, para ellas y sus familias. Hay que recordar que el 32% de los hogares tienen a una mujer al frente de la familia.
En este periodo de prueba deberán priorizarse los derechos salariales de los y las trabajadoras de plataformas porque, la neta, con eso del (salario) neto, parece que se quiere obstaculizar el reconocimiento mismo de que sean trabajadores, además de su derecho a la seguridad social. Para que, así, sean sólo unos cuantos los que logren el objetivo. Estaremos atentos a esta evolución o involución que ya preocupa.