En días pasados tuvimos conocimiento del lamentable asesinato Bernardo Bravo líder limonero de Apatzingán, Michoacán, lo que hace más grave este hecho es que días previos a su muerte hizo una denuncia de extorsión. Algo que la delincuencia organizada que opera en la zona ha hecho por años a los productores. Además algunos inspectores que dan el aval para la exportación han sido asesinados. Estas situaciones también han ocurrido con los productores de aguacate en Uruapan, Michoacán.
La extorsión ha sido el delito que más ha crecido en los últimos 8 años. En el caso de los productores de limón o aguacate la delincuencia cobra por kilo o tonelada del producto una cantidad determinada, con la amenaza de que no pagar equivale a que les quemen las huertas o matar a los dueños. Los productores refieren que es como un doble impuesto: el legal al gobierno federal y el de la delincuencia. Tristemente y contra su voluntad se ven en la necesidad de cumplir con los requerimientos de la delincuencia. Esto fue lo que denunció Bernardo Bravo, quien resulta ser el segundo líder limonero que pierde la vida por alzar la voz por su gremio.
De forma y fondo, la extorsión es un fenómeno delictivo que se encuentra en revisión; pues el poder legislativo tiene en sus manos, por un lado, que el delito se persiga de oficio y por otro que se aumente la pena, lo que implicaría que en la mayoría de los casos las personas responsables no obtengan su libertad y accedan a algún beneficio penitenciario. Por estas razones es muy importante dar seguimiento a lo que definirán los diputados y senadores.
Te podría interesar
Por último, es lamentable que la policía de los tres niveles de gobierno sea eficaz para detener a los probables responsables de la extorsión denunciada por Bernardo Bravo; posterior a haber perdido la vida. Se ha difundido en redes que tienen a cinco detenidos, señalados como miembros de “los blancos de Troya y los viagras asociados del Cártel de Jalisco Nueva Generación”. Pero más que eficacia, hay un dejo de complicidad, pues pareciera que ya sabían quiénes eran desde antes y que no los habían detenido porque no quisieron hacerlo, con lo cual coinciden los circuitos de productores citrícolas y aguacateros.
Nota al pie de página
La Ciudad de México tiene una gran oferta cultural gratuita y de gran calidad, la muestra más clara es la experiencia de caminar sobre Avenida Paseo de la Reforma que luce espectacular de día, y más de noche en vísperas del día de muertos. El contraste es conocer qué pasó con Stephany Carmona Rojas, mujer soldado de 19 años que perdió la vida “en una práctica de tiro” en el 51º Batallón del Ejército mexicano en Acapulco, Guerrero.
