MARCHA POR LA DEMOCRACIA

¡Fuera López Obrador! el clamor nacional

El domingo 18 de febrero, en la "Marcha por la democracia", millones de mexicanos expresaron su rechazo a AMLO. | José Luis Castillejos

Escrito en OPINIÓN el

La movilización nacional contra la intromisión presidencial en las elecciones de 2024 y la inseguridad reveló que el jefe de Estado, Andrés Manuel López Obrador, es repudiado por amplios sectores de México.

El domingo 18 de febrero, en la "Marcha por la democracia", millones de mexicanos expresaron su rechazo a AMLO. Las calles de más de 60 ciudades se llenaron de voces que clamaban "¡Fuera López Obrador!".

La indignación no solo se centró en la intromisión presidencial en las próximas elecciones, sino también en las políticas económicas, la inseguridad y el desempleo que azotan al país.

La fuerte voz de Lorenzo Córdova, exconsejero presidente del INE, se hizo escuchar. Aclaró que la marcha era en defensa de la democracia y el derecho a elecciones libres y pacíficas. A pesar de las críticas, aseguró que su participación tenía como fin único la preservación de las instituciones democráticas.

El Zócalo de la Ciudad de México se remeció al grito de "¡Fuera López Obrador!", un clamor que creció en los últimos cinco años frente a un hombre que no supo gobernar el país y al que ahora se le responsabiliza por haber sido permisivo con el narcotráfico.

La reforma electoral impulsada por López Obrador fue el detonante y encendió las alarmas. Desde un inicio se denunció que esa propuesta buscaba recortar el presupuesto del INE, limitar sus facultades de sanción y eliminar el conteo rápido de votos. Ahora la integridad de las elecciones presidenciales de 2024 está en peligro por el manoseo presidencial.

Paralelamente, la situación de seguridad en el país continúa deteriorándose, con un incremento en los crímenes violentos.

A la par, la construcción del Tren Maya ha sido objeto de controversia debido a la intromisión de militares en el proyecto y la poca transparencia del mismo, lo que ha generado preocupación sobre la militarización de la obra y su impacto en las comunidades locales.

La jornada del 18 de febrero reflejó el creciente descontento de la población mexicana ante las acciones del gobierno actual.

La demanda de un cambio es clara, y los ciudadanos exigen respeto a la democracia, transparencia en las elecciones y soluciones efectivas a los problemas de seguridad y económicos que enfrenta el país.

La marcha fue para hacer oír la voz de millones de mexicanos que están cansados de un gobierno pusilánime.

El senador y activista de la protesta, Emilio Álvarez Icaza, resumió el sentir popular: "La ciudadanía es la vacuna contra el aspirante a dictador". Este es el momento de derrotar los planes del partido oficial, alertó.

La protesta no se limitó a la capital. En diversas partes del país, la gente expresó su rechazo no solo a la intromisión electoral, sino también a las políticas económicas, la inseguridad y el desempleo que afectan a millones.

México envió un mensaje claro: la lucha por la democracia y la justicia social está más viva que nunca, y ahora el clamor "¡Fuera López Obrador!" ya es imparable en un país que el propio presidente polarizó y dividió.

Afortunadamente, ya falta poco para que se vaya, pero mientras tanto, en cada rincón del país la gente se viene uniendo para cerrar la puerta a una eventual dictadura.

José Luis Castillejos

@JLCastillejos