DERECHOS HUMANOS EN GUANAJUATO

Un nuevo paradigma en los derechos humanos en Guanajuato

La nueva Secretaría de Derechos Humanos en Guanajuato marca un hito significativo en el estado, ya que representa una respuesta institucional frente a los retos en derechos humanos. | Jaime Rochín del Rincón

Escrito en OPINIÓN el

Durante años, Guanajuato ha enfrentado críticas y demandas relacionadas con temas de derechos humanos. Problemas como la falta de atención hacia la comunidad LGBTQ+ y la desatención a la procuración de los derechos humanos han sido señalados como áreas de mejora. En respuesta a estas necesidades, este nuevo gobierno encabezado por la primera mujer gobernadora, Libia Dennise García Muñoz Ledo, impulsó una reforma para crear una estructura sólida y eficiente para atender y proteger los derechos de estos grupos.

La creación de una secretaría especializada en derechos humanos responde a una sentida exigencia de una sector de la ciudadanía, pero también es una apuesta por una gobernanza más inclusiva y moderna.

La nueva Secretaría de Derechos Humanos en Guanajuato marca un hito significativo en el estado. Esta acción representa una respuesta institucional frente a los retos en derechos humanos y establece un compromiso palpable con sectores vulnerables de la sociedad guanajuatense. 

De esta manera, Guanajuato se convierte en pionero en el ámbito nacional al configurar una estructura orientada específicamente a proteger los derechos humanos mediante las Subsecretarías de Atención a la Población Indígena y Afrodescendiente; Atención a Personas Migrantes y su Familias; Atención de Personas con Discapacidad y; para la Atención a las Personas de la Diversidad Sexual y de Género. 

En un contexto nacional en el que la defensa de los derechos humanos sigue siendo un desafío, este cambio en la estructura gubernamental busca un impacto positivo en la vida de miles de guanajuatenses, especialmente de aquellos que han sido históricamente marginados o ignorados. La importancia de este nuevo enfoque radica en su innovación y en su pertinencia, considerando las realidades y necesidades actuales del estado.

Es en este sexenio cuando se puso por primera vez en marcha la subsecretaría para la Atención a las Personas de la Diversidad Sexual y de Género y la subsecretaría de Atención a la Población Indígena y Afrodescendiente. La primera de ellas es un paso importante para atender a la comunidad LGBTQ+ en Guanajuato, un sector que ha enfrentado discriminación y exclusión social durante décadas. Se enfocará en desarrollar políticas de inclusión, sensibilización y respeto, así como en la erradicación de la discriminación y violencia hacia las personas de la diversidad sexual

En el caso de la subsecretaría de Atención a la Población Indígena y Afrodescendiente se promoverá el respeto a su identidad cultural y se trabajará en la implementación de programas para garantizar su participación en el ámbito laboral, educativo y de salud, además de fomentar su acceso a la justicia

Este nuevo modelo también representa una oportunidad para que la sociedad civil participe activamente en la promoción de los derechos humanos. Organizaciones no gubernamentales, colectivos y activistas tendrán un espacio institucional en el que podrán colaborar y canalizar sus propuestas y necesidades, fortaleciendo la transparencia y el impacto de las políticas públicas.

A su vez, en este sexenio se ha señalado como un "nuevo comienzo" en la atención a las víctimas de violaciones a derechos humanos

Desde el inicio de su mandato, la gobernadora ha enfatizado la importancia de la atención integral y respetuosa para todas las víctimas, sin importar su situación o el contexto de sus vulneraciones. Este enfoque apunta a construir una cultura de respeto a los derechos humanos, donde las y los afectados no sean vistas únicamente como cifras o casos aislados, sino como personas con dignidad.

El éxito de este nuevo paradigma dependerá en gran medida de la implementación efectiva de sus políticas. La atención a los derechos humanos debe ser una acción constante y prioritaria en todos los niveles de gobierno.

Además, se requerirá de un trabajo constante en la implementación de una cultura de sensibilización en torno a los derechos humanos y de educación para el respeto de la diversidad y la inclusión

Guanajuato enfrenta el desafío de transformar una cultura social y política que en ocasiones ha sido indiferente a las demandas de estos grupos; este nuevo paradigma en derechos humanos solo se consolidará con el apoyo de la ciudadanía y el compromiso de las autoridades.

Bajo el liderazgo de la gobernadora Libia Dennise, estos cambios abren la puerta a una administración más sensible, inclusiva y comprometida con los derechos de todos los guanajuatenses. Aunque todavía quedan desafíos por superar, esta estructura es un paso en la dirección correcta para construir una sociedad en la que todas las personas, sin importar su origen, identidad o condición, puedan vivir con dignidad y respeto.

Este cambio es una apuesta por una sociedad que pone en el centro a los derechos humanos y a las personas. Con esta acción, Guanajuato se perfila no solo como un estado comprometido con su ciudadanía, sino como un referente nacional en la lucha por un país más justo e inclusivo.

Jaime Rochín del Rincón

@sjrochin