El lunes, la Corte, a través del ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá, propuso, tal como habíamos estimado desde septiembre, invalidar solo una parte de la Reforma Judicial: la relacionada con la elección por voto popular de jueces y magistrados. Este resultado era previsible, pero la novedad es que se avalaría la elección de los ministros de la Corte y del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
Además, trascendió en la prensa que el martes la mayoría de los ministros opositores al Gobierno firmarían su renuncia, dejando claro que el proyecto que se busca implementar no sería en su beneficio. Dentro del mismo proyecto, también se deja de lado la figura de los “jueces sin rostro” y los comités de evaluación, que estaban diseñados para analizar los perfiles y las inscripciones de los candidatos a diversos cargos, así como los métodos para la elección de estos.
Por su parte, Morena ha advertido que, debido a las reformas aprobadas la semana pasada, impedirán a la Corte analizar la constitucionalidad de leyes a través de amparos u otros medios de control jurisdiccional, incluyendo acciones de inconstitucionalidad y controversias constitucionales.
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En este contexto, la vía alterna que el ministro Alcántara propone al Ejecutivo Federal parece razonable y moderada. Le daría a la presidenta Claudia Sheinbaum la posibilidad de elegir prácticamente a la mayoría de los ministros. Si bien podría hacerlo vía reforma, en este escenario no existiría ningún conflicto, ya que, para el próximo año, con la renuncia tácita de sus integrantes, la presidenta elegiría al Pleno de la Corte.
Otro aspecto a considerar es que, durante la confrontación por la reforma, varios países rechazaron de manera contundente la idea de la elección por voto directo, argumentando que desmotivaría el comercio, la inversión, los derechos humanos y el Estado de derecho. El sacrificio de los ministros permitiría mantener un control —quizás no total, pero sí significativo— del órgano jurisdiccional sin caer en la vorágine electoral que pretendían llevar a cabo el próximo año.
¿Qué veremos en los próximos días? La presidenta de la República ha afirmado que la elección va porque va, y con el proyecto en cuestión, así sería, aunque solo de manera parcial. ¿Debería jugarse el todo por el todo? En este escenario, si la Corte resuelve en los términos del proyecto, el Poder Ejecutivo podría ignorar esta resolución, llevando las tensiones al extremo y, probablemente, hacia una crisis constitucional y un problema reputacional para el Ejecutivo, con otras consecuencias.
De aceptar este proyecto, el Ejecutivo suavizaría los puntos más controversiales de la reforma, reduciría la incertidumbre que ha prevalecido desde su aprobación y podría mostrar un enfoque menos pragmático. Sin embargo, también existe la posibilidad de que el Ejecutivo no acate la sentencia de la Suprema Corte, tal como advirtió el líder de la bancada morenista, Ricardo Monreal. ¿Será necesario, indispensable?
La evolución del proyecto será rápida. Recordemos que el grupo de ministros que se opone a la reforma ya cuenta con los ocho votos necesarios para aprobarla. Sin embargo, en noviembre, el ministro Aguilar se retirará, y entonces ya no contarán con los votos suficientes. Por su parte, las renuncias surtirán efecto el 31 de agosto de 2025, después de las elecciones de junio.
La otra cara de la moneda
Habría que recordarle a Morena que en estrategia reza un viejo adagio que "Cuando rodees al enemigo, deja una salida; no presiones a un enemigo desesperado", es fundamental evitar acorralar completamente al adversario, al no tener nada que perder, podría tener un golpe de suerte.
En nuestro país, con la diversidad de sucesos que acontecen, especialmente en materia de seguridad y delincuencia, es crucial contar con conceptos claros que doten de precisión a los discursos y debates en diversos espacios.
Para no confundir ni errar en los preceptos a los que nos enfrentamos, la SEDENA y la SEMAR desarrollaron y han actualizado, desde hace algunos años, un Glosario de Términos Unificados a través de su Centro de Estudios Navales y su Colegio de Defensa.
Asimismo, es importante destacar el valioso esfuerzo realizado por la Universidad de Guanajuato, en donde el Dr. Noé Cuervo de Cuervo Consultores y el Dr. Marcos Pablo Moloeznik de la Universidad de Guadalajara quienes se suman a ese esfuerzo, en su obra ”Hacia una reinterpretación de la seguridad del Estado mexicano”, recogen y desarrollan con gran precisión los conceptos de seguridad, que se vuelve necesario como un libro de consulta que permite darle más claridad al de por sí complicado universo que representa la seguridad. Esta obra resulta de gran importancia para el acervo y conocimiento de quienes abordan esta materia desde diversos ámbitos.