Uno de los aspectos más importantes en un sistema democrático es el reconocimiento constitucional, legal y funcional de la igualdad de derechos entre hombres y mujeres que permite la coexistencia equitativa en la sociedad, genera certeza y pertenencia en nuestro propio sistema político, lo que contribuye a su vez, a expandir el abanico de oportunidades para el óptimo desarrollo y bienestar de mujeres y hombres.
En México, larga ha sido la lucha por alcanzar la igualdad sustantiva que, desafortunadamente, no termina de concretarse. Apenas en 2014 se estableció tanto en la Constitución y posteriormente en la legislación electoral federal la obligación de los partidos políticos para la postulación paritaria de candidaturas al Congreso de la Unión y los congresos locales; con la reforma de 2019 que reformó diversas disposiciones de nuestra Carta Magna arribamos a la llamada “Paridad en Todo”; disposiciones normativas que le han permitido al Instituto Nacional Electoral (INE) emitir diversos Acuerdos para que la paridad de género sea una realidad casi en todos los cargos de elección popular, faltando la discusión sobre la candidatura a la Presidencia de la República misma que en septiembre del año pasado puse sobre la mesa del Consejo General del INE para que fuera discutido y analizado.
Este esquema de paridad de género en el ámbito político electoral, ha sido fortalecido con diversas resoluciones del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) que le han permitido al INE, avanzar en otros temas tales como la designación de las y los consejeros presidentes de los Organismos Públicos Locales Electorales (OPLE) dando como resultado que hoy contamos con 20 mujeres presidiendo Institutos electorales locales y 11 hombres presidentes y una vacante que está en proceso de designación.
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Respecto de las consejerías electorales en los OPLE tenemos que 106 son mujeres (54.69%) por 86 hombres (44.79%).
Bajo este contexto, el organismo certificador BAS INTERNATIONAL CERTIFICATION Co, S. C., reconocido ante la Entidad Mexicana de Acreditación (EMA) que evalúa conforme a la norma NMX-R-025-SCFI-2015 la igualdad laboral y la no discriminación, notificó al INE el pasado 21 de diciembre de 2023 la obtención de dicha certificación para 7 inmuebles de las oficinas centrales del INE ubicadas en el conjunto Tlalpan, Acoxpa, Zafiro, Insurgentes, Moneda, Quantum y el Centro de Cómputo y Resguardo Documental (CECyRD), en razón de que cuentan con una población de 4,627 personas servidoras públicas, de las cuales 2,159 pertenecen al género femenino (46.6%) y 2,468 son del género masculino (53.3%).
Además, gracias a los esfuerzos iniciados en 2020 desde la presidencia de la Comisión de Igualdad de Género y No Discriminación que en ese momento presidí, dicha certificación considera un distintivo ORO al INE por la aplicación de 5 medidas de nivelación: “Integración de la plantilla de personal con al menos 40% de un mismo género; Existencia de un 40% de mujeres en el total de la plantilla de puestos directivos; Contar con personal con discapacidad en una proporción del 5% cuando menos en la totalidad del personal; Contar con una figura mediadora u ombudsman dentro del mecanismo para prevenir, atender y sancionar las prácticas de discriminación y violencia laboral dentro del centro de trabajo y, Llevar a cabo actividades o eventos enfocados exclusivamente a fomentar la igualdad y no discriminación y que sean dirigidos al personal del centro de trabajo y sus familias”.
El INE ahora, procederá a la solicitud de inclusión al Padrón Nacional de centros de trabajo para su debida referencia en las comunicaciones, eventos y estadísticas relacionadas con la Norma Mexicana NMX-R-025-SCFI-2015 descrita.
Con estas medidas adoptadas por el INE se demuestra que la inclusión, la no discriminación y la paridad de género consagradas en nuestra Constitución deben tener un enfoque de 360 grados, en donde no solo corresponda a los actores políticos su cumplimiento, sino como lo dispone la Ley, en todos los ámbitos de la administración pública y, en el caso del INE, los órganos constitucionales autónomos, con lo que lograremos una mejor sociedad en beneficio de las generaciones de mujeres y hombres que vienen atrás de nosotras y nosotros.