El presidente Andrés Manuel López Obrador recurre a "cortinas de humo" psicosociales, como el Tren Maya, para desviar la atención de graves problemas que aquejan a México, como la creciente violencia, el incendio de una plataforma petrolera y los gastos elevados de sus "corcholatas" en la carrera hacia la presidencia de la República.
Su táctica parece funcionar en algunos, aunque otros critican su machismo soterrado que quedó al descubierto al criticar a la aspirante presidencial Xóchilt Gálvez, a quien quiso minimizar por haber vendido tamales en sus años mozos.
Siempre el gobernante desvía la atención hacia otros temas o situaciones menos relevantes como estrategia para manipular la opinión pública, y distraerla de cuestiones más importantes o controvertidas. Utiliza comúnmente en el ámbito político o mediático una serie de temas o descalificaciones para desviar la atención de escándalos o situaciones negativas, generando discusiones y debates en torno a asuntos secundarios, a fin de evitar confrontar los problemas centrales.
@neoliberalover indicó en un mensaje que el primer vagón del Tren Maya le cayó como anillo al dedo a AMLO para ocultar los cenotes que fueron rellenados con concreto y miles de árboles talados. También le sirvió para echar tierra a los periodistas muertos, desaparecidos y amenazados de muerte.
Con sus cortinas de humo, ahora con el tema de Xóchilt, intentó evitar sendas críticas por la plataforma petrolera quemada con pérdidas millonarias por día. Otro tema que ha eludido afrontar son los enfrentamientos por territorio entre cárteles de las drogas. En Apatzingán, Michoacán, se reportaron ataques con drones a la población, un ambiente muy de guerra del bienestar. Los servicios de emergencia se ven rebasados por la inseguridad, sin poder atender la emergencia, indicó en su crítica @neoliberalover.
El metro que se sigue incendiando y la línea 12 que aún no funciona es otro tema minimizado por AMLO, además de que la CONADE que preside Ana Guevara no dio presupuesto para asistir a los juegos mundiales universitarios.
Y por si lo anterior no era suficiente o por si aún no lo sabían, Adancito, además de regalar jirafas y prestar aviones mientras fue secretario de Gobernación, generó un subejercicio de alrededor de 2 mil 349 millones de pesos, indicó @neoliberalover.
Efectivamente, hay trenes que no son viables, pero que bien distraen, y eso lo sabe AMLO, que fue a inaugurar nadie sabe qué cosa porque la máquina no la han arrancado y tuvo que ser empujada por un carrito.
Mejor se hubiera esperado el presidente a que llegaran todos los vagones para que de un tandazo inaugurara todo, pero como necesita reflectores, ahí lo tienen haciendo un poco el ridículo.