Embarazada y con 20 años, Violeta fue acusada de privación ilegal de la libertad. Solo hablaba náhuatl, no tuvo acceso a un traductor, pero eso no impidió que fuera sentenciada a 15 años de prisión, pese a ser inocente.
En la cárcel comenzó a estudiar: aprendió español, a leer y a escribir, a trabajar la rafia, tarjetería española y una decena de manualidades más.
Cumplió todos los requisitos para ser preliberada a los siete años de reclusión.
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Lejos de guardar rencor, Violeta decidió estudiar derecho, se convirtió en traductora del Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (INALI) y coadyuvó en la creación de una escuela, donde integrantes de su comunidad aprenden y se empoderan.
La historia completa de Violeta pueden escucharla en EspecialízaTE, el podcast de la Sala Especializada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Este podcast formó parte de las actividades de concientización que realizamos como motivo de los 16 días de activismo contra la violencia de género.
En otra de nuestras entregas (que pueden descargar en Spotify), voces feministas nos ayudaron a reflexionar sobre qué es más urgente para combatir la violencia política de género: reformas o un cambio cultural. ¿Ustedes qué opinan?
Nuestras actividades también incluyeron la divulgación de sentencias sobre violencia política de género, recomendaciones de libros sobre feminismo y paridad de género, así como la exposición “La violencia contra las mujeres a través de la historia”, cuya exhibición fue posible gracias a la colaboración del Instituto de Estudios Históricos de las Revoluciones de México en coordinación con la Dirección General Adjunta de Igualdad de Género de la Secretaría de Educación Pública.
Al recorrerla, recordamos que el primer regalo que un cacique americano entregó a Hernán Cortés fueron 20 esclavas, entre ellas (Mallilnaltitzin o Malinche) y que la heroína de la Independencia de México, Josefa Ortiz de Domínguez, estuvo encarcelada, sin juicio de por medio, solo porque José Mariano Beristáin de Sousa comunicó al virrey Félix María Calleja (sin pruebas) que ella había intentado seducirlo.
En estos 16 días, el funcionariado de la Sala Especializada nos compartió su visión personal sobre el significado de estas jornadas.
“Para mí, estos días de activismo significan una oportunidad para reflexionar y concientizarnos acerca de la realidad que viven mujeres y niñas de nuestro país, más allá de los privilegios que nosotros podemos tener”, indicó en su reflexión Leticia Ortiz Ramírez, jefa del departamento médico de la Sala Especializada.
Las jornadas concluyeron este 10 de diciembre, pero en la Sala Especializada continúa el proceso reflexivo sobre la necesidad de modificar conductas que no son correctas, pese a estar normalizadas.
Hasta nuestra próxima entrega.