El Banco de México (Banxico) apagará las velas de cumpleaños por sus 100 años de historia, en una celebración sin muchos reflectores. Prácticamente desdeñado.
Este lunes 25 de agosto en el Museo Interactivo de Economía (MIDE) se realizará un acto protocolario encabezado por la gobernadora del Banco Central, Victoria Rodríguez Ceja. El mismo lunes y martes 26 de agosto se llevará a cabo un seminario, restringido, con representantes del sector financiero, pero en donde no habrá una sola ponencia de la trascendencia sobre la relevancia para México del Banxico.
Es una incógnita si los exgobernadores en la historia del Banco Central estarán presentes o participarán: Miguel Mancera Aguayo, primer gobernador de Banco de México; Guillermo Ortiz Martínez, Agustín Carstens y Alejandro Díaz de León.
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Durante el gobierno Plutarco Elías Calles, en 1925 nació el Banco de México.
¿Cuál es la reflexión de 100 años?
Sergio Kurczyn, director de Estudios Económicos de Banamex, expuso a La Silla Rota que, ante una celebración de 100 años, era el momento de reflexionar sobre la historia, los desafíos y retos del Banco de México.
“Yo creo que cuando hablas de una institución tan importante como el Banco Central en México y en el mundo, sí, un aniversario tan importante con dos ceros te debe llevar a una reflexión….tiene que reflexionar en qué ha pasado en este país, cuáles eran sus etapas complejas, cómo se resolvieron, cuáles son las lecciones aprendidas de la problemática que ha vivido el Banco Central, en el contexto nacional e internacional, en los últimos 100 años. A veces también hasta las anécdotas, porque se trata de una celebración”, expuso en la plática.
Destacó que era el momento de que, al menos, una tercera parte del seminario que se realizará debería estar dedicado a la historia y los desafíos de Banxico.
“El Banco de México creo que dejó que desear. Es un seminario con muchas ponencias de grandes economistas de bancos centrales, investigadores internacionales, que la verdad me resulta muy atractivo a mí, pero tiene algo que me llamó la atención. Hay 10 o 15 ponencias, pero no hay ninguna sobre México. No hay ninguna sobre el Banco Central de México, no hay ninguna sobre Banxico, ninguna. Entonces, más allá de que sea en grande, que sea austera o que no sea austera, es el contenido”, enfatizó.
Pilar de la economía mexicana
Para Gabriela Siller Pagaza, directora de Análisis Económico de Grupo Financiero Banco Base, el Banco de México es uno de los principales pilares de la economía mexicana.
“El Banco de México es uno de los pilares en los que se sustenta la economía y por los cuales se tiene confianza para invertir en México”, aseguró la especialista.
Janneth Quiroz, directora de Análisis Económico, Cambiario y Bursátil de Grupo Financiero Monex, enfatizó que el Banco Central es uno de los pocos institutos que todavía tiene autonomía, ha apoyado la estabilidad económica y a lo largo de los años y su evolución, ha acompañado el propio desarrollo del país.
“Es de las organizaciones en las que se tiene mayor confianza, una de las que tiene más prestigio en el país y yo creo que es fundamental para el sano desarrollo y para también la economía del país", expresó.
Autonomía
El 1 de abril de 1994, entró en vigor la reforma al artículo 28 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, por medio del cual se otorgó autonomía al Banco de México y el mandato prioritario de procurar la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda nacional.
El director de Estudios Económicos de Banamex destacó la autonomía del Banco de México y el INEGI, los cuales deben seguir en ese rango.
“Yo creo que el gobierno sabe que uno de los contrapoderes, por así decirlo, de los contrapesos en México hoy, que ya no hay muchos, son los mercados financieros, las inversiones extranjeras y nacionales, creo que hay que mantener la autonomía del Banco y tenemos muchas lecciones en el pasado de cuando no es autónomo, cómo nos puede ir muy mal en términos de inflación, de sistema de sistema financiero, de crisis cambiarias”, expuso.
Agregó que “la autonomía es un gran punto y yo estoy tranquilo hasta ahora con la autonomía del Banco de México y cómo se está comportando hasta ahora la Junta de Gobierno, sí considero que es autónomo el Banco de México y ha habido ejemplos que muestran esa autonomía en los últimos 7 años”.
Para Gabriel Pérez del Peral, académico de la Escuela de Gobierno y Economía de la Universidad Panamericana, el principal reto para el segundo centenario de Banxico es mantener la autonomía.
"Hoy por hoy, el Banco de México es una de las instituciones más sólidas que ha mantenido el embate, en los último años, en un entorno donde la política monetaria está adquiriendo matices de una dominancia fiscal... el Banco Central tiene el reto de no permitir la dominancia fiscal. No verse presionado por la Secretaría de Hacienda", destacó.
Expuso que entre más lejos se ubique el Banxico del gobierno, va poder evitar la dominancia fiscal, para cumplir con el único mandato que tiene que es mantener el poder de compra del dinero, de mantener controlada la inflación.
Quiroz, directora del Grupo Financiero Monex, expresó: confiamos en que, hacia adelante, la autonomía de la que goza el Banco Central se respete, se mantenga por el bien mayor del país”
8 meses después… una crisis
El directivo de Banamex destacó que, tras la autonomía del Banco Central, ocho meses después enfrentó una prueba de fuego.
“Ocho meses después de que se establecía la autonomía, en diciembre, hubo una gran crisis cambiaria, una gran crisis bancaria, una gran crisis financiera, una gran crisis de la deuda externa. A tal grado de que, en 1995, durante algunos meses, había la idea, el debate interno y externo de que había que quitarle la posibilidad de emitir libremente al Banco de México y hacer lo que se llamaba, en ese momento estaba de moda en América Latina, hablar de consejos monetarios”, afirmó.
Añadió que era el paso previo a la dolarización, era fijar un tipo de cambio fijo igual que antes del 94 en el país y lo que significaba era que el Banco Central solo pudiera emitir exactamente pesos en función de cuánto tenía de dólares en su reserva internacional.
Etapas tormentosas
Kurczyn expresó que hay dos etapas tormentosas en los 100 años del Banco de México. La primera, consideró, como “la más difícil”, la cual fue el inicio, entre 1925 y 1931.
“Entre 1920 y 1929, yo creo que emitió prácticamente nada de moneda el Banco de México. No le era aceptada por la sociedad y ya se resignó el Banco de México a no emitir moneda. Entonces, había algunas monedas que quedaban, pero sobre todo la circulación con la que la gente compraba y vendía cosas era el oro y la plata, con la acuñación de moneda. Entonces, ese fue como el inicio de fuego del Banco Central. Luego llega la gran recesión en el mundo y en México también. Hay una crisis tremenda”, enfatizó.
Añadió que el Banco de México se encontró con un periodo de hacer labores de banca comercial, con lo cual su cartera vencida creció tremendamente, en parte por la situación económica, pero en gran parte también porque los políticos pedían préstamos y el Banco Central no se los podía negar, a pesar de que tenía en un momento dado un límite a lo que le podía prestar al sector público.
Enfatizó que la segunda etapa difícil fue en 1982 y el resto de la década, donde colapsó el sistema financiero a través de la nacionalización, colapsaron las cuentas externas.
“Se llegó a una inflación que no se había llegado, por ahí de 1987, se llegó a 150% en algunos meses en términos anuales, con los bancos completamente nacionalizados, con excepción de uno y pues sin que hubiera ya anclaje al sistema de precios que era como decir y no solo no se lograba la estabilidad del poder real de la moneda, sino que la moneda empezó cuando hay hiperinflación en México y en China, como se dice, en cualquier país, si hay hiperinflación la moneda deja de servir como depósito de valor y a veces también la otra función esencial también como medio de cambio”, expuso.
En su “Semblanza histórica”, Banxico reconoció que ha tenido presiones, como en los años setenta y ochenta, donde la economía experimentó una etapa turbulenta, por la aplicación de políticas excesivamente expansivas y la obligación para que el Banco Central extendiera crédito para financiar los déficits fiscales en los que incurrían los gobiernos.
Esa situación, expuso, condujo al “deterioro de la estabilidad de los precios, inflaciones agudas y prolongadas”, las cuales alcanzaron niveles que rebasaron el 100% entre 1982 y 1988 y la erosión del poder adquisitivo del dinero y pérdida de bienestar social.
El académico de la Panamericana, Gabriel Pérez del Peral, enfatizó que cuando un banco central inyecta dinero para financiar al gobierno, en el corto plazo puede tener efectos positivos, pero en el mediano y largo plazo, lo que genera es aumento de precios.
Presiones presidenciales
En distintos periodos de la vida nacional ha habido presiones o intentos para que el Banco Central apoye el crecimiento económico o la generación de empleo, especialmente en contextos de crisis o bajo crecimiento.
Desde la mañanera, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, manifestó, recientemente, que el Banco Central debería “ampliar su misión en términos del desarrollo económico, manteniendo su autonomía”, por lo que sería importante abrir el debate.
Un sexenio atrás, el expresidente Andrés Manuel López Obrador expresaba abiertamente que Banxico necesitaba apoyar el crecimiento.
“Banxico también debería pensar en el crecimiento económico, no solo en la inflación”, exponía el mandatario; además agregaba que el Banco Central “solo ve la economía desde la óptica monetarista”.
En la crisis financiera de 2008-2009, el exmandatario Felipe Calderón presionó al Banco de México, en forma indirecta, para que relajara la política monetaria y ayudara a la recuperación de la economía.
En la Constitución Política Mexicana, en su artículo 28, párrafo 6, se expone que nadie puede obligar al Banco de México a otorgar financiamiento.
Mantener estabilidad
Los especialistas consideraron que el objetivo central de Banco de México es mantener la estabilidad de la moneda mexicana, para que el poder adquisitivo de las familias mexicanas no se deteriore.
“El objetivo central del Banco es mantener estables el nivel de precios y controlada la inflación, en el caso de la Ley del Banco de México, algo que podríamos decir que ya está en la idea de controlar la emisión de moneda y que la unidad de la de la moneda no pierda valor real… mantener la estabilidad de precios, mantener la estabilidad del sistema financiero y mantener y apoyar al sistema de pagos”, dijo Kurczyn.
Tres retos
Para Kurczyn, Banco de México debe tener tres retos, en donde la primera es mantener la autonomía del Banco de México.
En segundo término, es que la inflación se ubique alrededor de 3%, por lo cual debe explicar por qué no ha llegado a esa meta desde 2003, es decir, hace 22 años. En el mundo, más de 115 bancos centrales lograron estar en 3%.
La tercera tiene que ver con monedas estables.
“Vamos a empezar a hablar en México, ya hablamos a nivel global y en Estados Unidos empieza a haber una revolución no muy silenciosa, las monedas estables, monedas estables privadas y también hablamos obviamente del bitcoin que ya todos estamos familiarizados con ello”, manifestó.
Además de las monedas digitales de los bancos centrales, más los pagos instantáneos, donde ya tenemos el reto desde hace un tiempo porque CODI y DIMO han dejado todavía que desear en términos de su expansión.
Sin bajar la guardia
Agustín Carstens, gobernador del Banco de México entre el 1 de enero de 2010 y el 30 de noviembre de 2017, expuso en el documental "Banco de México, el camino de la autonomía": “no se puede bajar la guardia. Hay que mantener siempre fundamentos económicos sanos. La transparencia es muy importante para un órgano autónomo. Antes de que el Banco fuera autónomo, la cifra de las Reservas Internacionales se daba tres veces al año, ahora se da a conocer cada semana”.