Con la venta de Intercam y la liquidación de CIBanco, el caso FinCEN está concluido, una vez que esas instituciones financieras dejaron de operar y ese capítulo se cerró, aseguró Jorge Arce, vicepresidente de la Asociación de Bancos de México (ABM).
“Las infracciones son contra las instituciones que estaban sancionadas, las instituciones funcionan, ya no operan, sus activos fueron transferidos a otras instituciones se cuidaron a los clientes y es lo que se tenía que hacer”, expuso al finalizar la inauguración de la Semana Nacional de Educación Financiera 2025.
Para el también Director General de HSBC México, tras la resolución del caso, las instituciones financieras y la banca en México deben proteger los estándares de operación y entender el riesgo en que operan.
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Estar muy alerta, seguir las reglas lo mejor que se pueda y entender que tienes que pensar más allá. Tienes que ver tu ambiente de riesgo, tienes que entender tus riesgos, invertir, crear una cultura de riesgos en la institución y en el gremio, indicó Arce.
Contexto: en junio pasado, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos señaló que los bancos CI Banco e Intercam y Vector Casa de Bolsa facilitaron durante años transferencias multimillonarias a nombre de cárteles mexicanos y colaboraron indirectamente en la compra de precursores químicos utilizados para la producción de opioides sintéticos. Como resultado, se prohibieron ciertas transferencias de fondos que involucren a dichas instituciones.
Diálogo constante con autoridades
El vicepresidente de la ABM aseguró que mantienen un diálogo constante con las autoridades financieras encabezadas por el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP)
“Y todos estamos trabajando para que el gremio y cada una de nuestras instituciones, estén en la mejor base posible para prevenir este tipo de preocupaciones que tienen nuestros socios comerciales y las autoridades locales”, puntualizó.
Con normalidad
El directivo consideró que, a pesar de que el caso CIBanco, Intercam y Vector han concluido, el sistema financiero mexicano se mantiene bien regulado y opera con normalidad.
“Este capítulo se quedó ahí, acabó. Pero eso no quiere decir que no tengamos que seguir trabajando como gremio y como bancos en mejorar nuestros estándares continuamente, porque las tipologías y este tipo de preocupaciones continúan y cambian”.
