El Gobierno de México proyecta una reducción en los montos destinados a las pensiones de los trabajadores del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
De acuerdo con el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), este sería el primer recorte desde 2018, en un contexto en el que cada año cerca del 3% más de personas se suman al padrón de jubilados.
El CIEP detalló que las pensiones contributivas del IMSS tendrán una disminución de 2.5% y las del ISSSTE, de 2.3%, lo que podría impactar la capacidad adquisitiva futura de millones de jubilados.
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¿Qué monto total se destinará a pensiones en 2025?
El gasto total en pensiones —considerando tanto esquemas contributivos como no contributivos— alcanzará 2.3 billones de pesos. Aunque la cifra representa un aumento de 3.7%, está muy por debajo del crecimiento promedio de 8.5% registrado en los últimos años.
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El informe advierte que este menor ritmo de incremento rompe con la tendencia previa, pese a que hasta julio de 2025 el gasto real en pensiones contributivas había crecido 6.6% anual, según datos de la Secretaría de Hacienda.
¿Qué programas del Bienestar recibirán más recursos?
Mientras los fondos del IMSS e ISSSTE se ajustan, los programas sociales de la Secretaría del Bienestar experimentarán aumentos significativos. La Pensión para Adultos Mayores tendrá un alza de 5.2% y la destinada a personas con discapacidad crecerá 20.8%.
Uno de los incrementos más notables será para la Pensión Mujer Bienestar, que recibirá un aumento presupuestal de 266%, lo que permitirá ampliar la cobertura a tres millones de beneficiarias de entre 60 y 64 años. En total, las pensiones no contributivas gestionadas por Bienestar crecerán 13.5%, alcanzando 619 mil 703 millones de pesos.
¿Qué riesgos ven los especialistas?
De acuerdo con el CIEP, la diferencia en el crecimiento de los presupuestos podría generar un desequilibrio financiero y desigualdades entre quienes cotizaron en el IMSS e ISSSTE y los beneficiarios de programas sociales.
El debate sobre la sostenibilidad del sistema de pensiones en México enfrenta un doble desafío: el envejecimiento de la población y la necesidad de actualizar periódicamente los montos para garantizar un ingreso digno a los adultos mayores.
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El futuro del sistema requerirá ajustes estratégicos que aseguren la viabilidad financiera y la protección social de millones de personas en el país.
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