Como en cada elección, uno de los medios de propaganda más empleados por los candidatos a nivel federal, estatal y municipal, suele ser la colocación y entrega de panfletos, espectaculares y lonas, que posteriormente se convierten en basura electoral, lo que preocupa particularmente a la población.
ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP. EL PODER DE LA INFORMACIÓN EN LA PALMA DE TU MANO
Para este año, organizaciones como la Fundación para el Rescate y Recuperación del Paisaje Urbano (FRRPU) en la Ciudad de México y Greenpeace han alertado que la situación podría ser peor en comparación con periodos electorales anteriores.
Te podría interesar
De acuerdo con sus previsiones, la basura electoral generada por los comicios del 2 de junio, únicamente en la Ciudad de México, podría alcanzar las 30 toneladas, 10 toneladas más que las registradas en los comicios anteriores, a estas, hay que sumar la generada en el resto de entidades del país.
La propaganda electoral empleada por los candidatos, sin importar el cargo para el que estén aspirando, está hecha en su mayor parte de componentes como papel y plástico, y aunque por normativa estos son reciclables, solo es así si al final se hace un adecuado manejo de estos, pero lo más probable es que terminen en la calle.
Te podría interesar
Este periodo electoral, las calles de las ciudades más grades y pobladas de México están repletas de lonas de plástico, vinilos adhesivos y panfletos de papel, los cuales se encuentran por todos lados y en ocasiones, en forma reiterativa como si se tratara de spam.
SÍGUENOS EN EL SHOWCASE DE LA SILLA ROTA DE GOOGLE NEWS
¿Quién debe encargarse de la basura electoral?
Se supone que al finalizar el periodo electoral, las distintas dependencias de Obras y Servicios en las diferentes entidades del país se encargarán de retirar de las calles la basura electoral, no obstante, este trabajo se complica debido a que la propaganda no siempre dura hasta el final de las elecciones.
Una vez retirada la propaganda electoral de las calles esta debería ser enviada a una planta de reciclaje para ser procesada y convertida en otro tipo de productos como combustible, entre algunos otros.
Sin embargo, como se mencionó antes, la basura electoral no siempre llega a este proceso, pues ya sea por el desgaste de los materiales expuestos a condiciones de sol, lluvia y viento, así como a la acción humana, esta suele terminar en calles y alcantarillas, entre otros lugares, imposibilitando que personal de limpieza la recoja en el momento asignado.
Por ello es que los ciudadanos deben abstenerse de arrancar la propaganda de los políticos que no les agradan, ya que esa propaganda posiblemente termine en la calle sin que sea tratada de la forma adecuada. En promedio, se estima que una lona, cartel o panfleto político dura 24 horas en un poste, muro o puente donde fue colocado, antes de ser arrancado por una persona.
Aunque la responsabilidad de recoger la basura electoral cae en manos del personal de limpia de las ciudades, cabe destacar que los candidatos, como generadores de está también deberían responsabilizarse de que está termine en un lugar adecuado.
Al respecto, Greenpeace, ha pedido a los candidatos que desarrollen un plan para el reciclaje adecuado de su propaganda electoral y les ha recomendado sustituir el papel y el plástico por campañas en las redes digitales.
Contaminación de la propaganda electoral
La basura electoral, entendida como posters, folletos, flyers, carteles, folletos, vinil adhesivo, lonas, pendones, banderines y tarjetas, entre muchos otros, hechos de papel y plástico, principalmente, genera contaminación al terminar en calles y alcantarillas. Esto aumenta el riesgo de inundaciones.
Dependiendo del material, esta tarda en degradarse entre 2 y 6 semanas en el caso de papel, mientras que en el caso de lonas de plástico, su degradación se extiende entre 100 y 1,000 años, lo que puede contaminar el agua en caso de terminar en ríos, lagos y pozos. Además, el plástico disperso en el ambiente puede dañar la flora y fauna local, afectando la biodiversidad y los ecosistemas urbanos.
Candidatos y el manejo de la basura electoral
Entre los candidatos pocos se han pronunciado por reducir la basura electoral, siendo uno de ellos el candidato a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México por Movimiento Ciudadano, Salomón Chertorivski, quien ha recriminado a sus adversarios por la enorme cantidad de pendones con que han cubierto las calles de la capital.
El candidato recriminó que estos plásticos solamente generan contaminación, por lo que pidió a la ciudadanía a recolectarlos y tirarlos en grandes contenedores que su equipo colocará en distintas zonas de la capital.
La basura electoral recolectada será donada a de animales y a otros sitios donde se pueda reutilizar de manera correcta.
“No podemos creer que alguien pretenda que, haciendo una campaña sucia, se les pueda creer que tengan un gobierno limpio”, declaró.
Además, anunció que presentará una iniciativa ante el Congreso de la CDMX para prohibir la colocación de propaganda electoral en:
- Puentes peatonales y vehiculares
- Postes y cables de suministro de energía eléctrica o cualquier servicio de telecomunicaciones
- Señalamientos de tránsito, protección civil, educación cívica, nomenclatura de calles y avenidas
- En el exterior e interior de edificios públicos
VGB