La iniciativa de reforma al poder judicial que presentó el presidente Andrés Manuel López Obrador al Congreso de la Unión es una “propuesta simplista” porque lo único que lograría con la elección por voto ciudadano de los jueces y magistrados sería politizar la justicia, lo que empeoraría la corrupción que ya hay entre jueces, considera el periodista y escritor Jesús Lemús.
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En entrevista exclusiva con La Silla Rota a propósito de su más reciente libro El Cártel Judicial, Lemus dice coincidir con López Obrador en el sentido de que es necesaria una reforma al poder judicial, pero explica que desde su punto de vista esta reforma tiene que partir de una iniciativa más profunda en donde lo que se valore sea la competencia del juzgador sin politizar las postulaciones.
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“Aunque estoy de acuerdo en la necesidad de una reforma, discrepo con la simplicidad de la propuesta del presidente. No deberíamos politizar la justicia ni permitir que el Ejecutivo designe directamente a los jueces desde los partidos políticos.
“Propongo una reforma más profunda, basada en el semillero del Poder Judicial, donde los jueces sean elegidos de manera competente y despolitizada. Mi libro no respalda ciegamente la iniciativa de López Obrador, sino que busca arrojar luz sobre las profundidades del problema” explica.
¿Cártel judicial?, me quedé corto, asegura Jesús Lemus
Jesús Lemus, quien dedicó meses en la investigación de ese entramado llamado poder judicial para la elaboración de su libro El cártel judicial, detalla que el poder judicial no se circunscribe a la Suprema Corte de Justicia, que es a donde el presidente López Obrador apunta sus baterías con el tema de los salarios y las altas prestaciones que tienen los ministros de la Corte. El escritor detalla a La Silla Rota lo que encontró en su investigación del poder judicial.
“Hay redes de corrupción internas, muy internas, que son difíciles de desarraigar. Y hay tráfico, hay lavado de dinero, hay delitos sexuales, hay delitos de tipo delincuencia organizada. Hay asociación con el narcotráfico, hay nepotismo. Hay una serie de cosas que, si nos metemos, encontramos”.
“La situación es grave. El Poder Judicial se ha convertido en un foco de corrupción y delitos de diversa índole. No es solo lo que menciona el presidente, hay una red profunda de corrupción que involucra a muchos jueces, magistrados y trabajadores del Poder Judicial”, advierte.
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¿Tan mal está el sistema de justicia para llamarle El Cártel Judicial?, se le pregunta.
“Fíjate que pienso que hasta me quedo corto en la clasificación. Porque si bien la ley establece que cuando tres o más personas se asocian para cometer un delito se llama delincuencia organizada, y creo que en el Poder Judicial hay más asociaciones, más de tres personas que se asocian para cometer esos delitos.
Lemus, autor también de los libros Jaque a Peña Nieto y El Fiscal imperial, asegura que hay cientos de juzgadores que están relacionados de alguna u otra forma y que tienen una participación directa en eventos y se asocian para cometer delitos.
“¿Crees que me quedo corto en la definición de cartel judicial? Creo que no. De hecho, los cárteles solían atribuirse a gente ignorante, gente sin conocimiento, iletrados. Pero en este caso, hablamos de gente totalmente con conocimientos muy por encima del promedio, conocen la ley, tienen una holgura intelectual como muy pocos en México. Y que se amparan en ello para cometer delitos, eso lo hace más perverso”.
De acuerdo con el escritor, en su investigación logró detectar una red de más de 600 jueces directamente involucrados en actividades delictivas, y que estarían respaldados por la Suprema Corte de Justicia y protegidos por la impunidad del Consejo de la Judicatura Federal.
Los delitos, asegura y así lo asienta en su libro publicado bajo el sello Grijalbo, abarcan desde asociación con el narcotráfico hasta lavado de dinero, nepotismo y casos extremos de violencia sexual contra mujeres dentro de la estructura del Poder Judicial.
Aunque reconoce que al menos dos de cada diez jueces podrían considerarse "sin mancha", la abrumadora mayoría contribuye significativamente a la descomposición del sistema.
En la entrevista, realizada en el lobby de un hotel de la Avenida Álvaro Obregón en la ciudad de México, Jesús Lemus explica el tema de acoso y violación sexual perpetrados por jueces dentro de la estructura del Poder Judicial. Aunque en su libro expone nombres, expedientes y acusaciones directas, explica que sorprendentemente no hay investigaciones en curso, y estos casos quedan confinados al Consejo de la Judicatura sin participación de un Ministerio Público para integrar una carpeta de investigación.
Se debe evitar llegar a la figura de jueces encubiertos
Para Jesús Lemus, reformar el sistema judicial en su totalidad implicará muchos retos incluida la resistencia del crimen organizado que ha logrado permear a una parte de los jueces y magistrado, de ahí la necesidad, insiste de que el gobierno debe considerar una estrategia que proteja a sus jueces y evitar baños de sangre.
¿Cómo se podría evitar que la reforma al Poder Judicial se convierta en un escenario peligroso?, se le cuestiona.
“Es cierto que el crimen organizado no aceptará fácilmente un cambio en el Poder Judicial. La protección a jueces debe ser una prioridad, similar a periodistas y defensores de derechos humanos. La reforma también implica revisar el mecanismo de protección para incluir a los jueces” “En México, ya tenemos jueces ‘sin rostro’, pero debemos evitar llegar a la figura de jueces encubiertos. Esto implica una estrategia cuidadosa del gobierno para proteger a sus jueces y evitar represalias violentas.