CRISIS DE AGUA

UNAM comparte acciones y recomendaciones para el cuidado del agua

Entre la medidas los expertos recomiendan tomar duchas breves, preferentemente de menos de 5 minutos y cerrar las llaves mientras se enjabona

Ante la escasez de agua desde hace varias décadas la UNAM ha contribuido mediante diversos grupos de investigación e iniciativas como la Red del Agua UNAM
Ante la escasez de agua desde hace varias décadas la UNAM ha contribuido mediante diversos grupos de investigación e iniciativas como la Red del Agua UNAMCréditos: Cuartoscuro
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Ante la grave crisis de agua que vive la Ciudad de México y con la finalidad de contribuir al cuidado de ella a través de acciones individuales y colectivas, el Comité Asesor de Salud, Protección Civil y Manejo Ambiental de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) emitió una serie de sugerencias generales, para espacios universitarios al igual que para entidades y dependencias.

Estas son algunas de la recomendaciones generales que brinda la UNAM para la población:

  1. Tomar duchas breves, preferentemente de menos de 5 minutos y cerrar las llaves mientras se enjabona; recolectar en cubetas el líquido de la regadera para reutilizarlo en inodoros, o bien, para la limpieza de pisos, vehículos u otras áreas.
  2. Instalar dispositivos ahorradores o aireadores en regaderas y grifos; asegurarse de cerrar bien las llaves después de cada uso y, si es necesario, cambiar sus empaques a fin de prevenir goteos.
  3. Al cepillarse los dientes, ocupar solamente un vaso con agua; identificar y reparar cualquier fuga en el sistema hidráulico, incluidos grifos, regaderas e inodoros.
  4. Regar las plantas o áreas verdes sólo cuando sea necesario, preferentemente temprano o por la noche. De ser posible con agua reutilizada o tratada.
  5. Evitar tirar desechos químicos, papel o plásticos en la red de drenaje, así como la aplicación de agua corriente para descongelar alimentos. 
  6. Procurar usar la lavadora con carga completa.

Ante la escasez de agua desde hace varias décadas la UNAM ha contribuido mediante diversos grupos de investigación e iniciativas como la “Red del Agua UNAM”, el “Observatorio del agua UNAM” y el programa “PUMAGUA”, en el entendimiento del fenómeno, sus causas y las posibles soluciones a esta problemática.

A la par, se han emprendido acciones institucionales enfocadas en el ahorro y consumo responsable en las instalaciones universitarias, entre ellas:

  • Para el lavado de manos, en el caso de los espacios universitarios, se sugiere asegurarse de usar la cantidad indispensable, sin dejarla correr mientras se enjabona, y cerrar correctamente las llaves.
  • Al utilizar bebederos, procurar emplear la necesaria y no desperdiciarla; mantener limpios los sanitarios para disminuir el consumo en la limpieza; evitar activar manualmente los muebles sanitarios automatizados; tampoco tirar desechos químicos, papel o plásticos en la red de drenaje.

Recomendaciones en laboratorios

En los laboratorios, verificar que los equipos de enfriamiento cuenten con un sistema de recirculación del agua; de ser procedente, sustituir las bombas de vacío que utilizan el fluido por bombas de vacío secas; emplear la cantidad mínima de destilada.

Mantener la llave cerrada mientras se enjabona el material, enjuagarlo todo de una vez; y no arrojar por el drenaje materia orgánica, soluciones hechas con sales sintéticas o residuos peligrosos, neutralizados o no.

Recomendaciones para entidades y dependencias

En cuanto a las entidades y dependencias, el Comité Asesor establece reducir y optimizar el consumo de agua para la limpieza de los espacios universitarios.

Con base en las características de la infraestructura y edificaciones, revisar el adecuado funcionamiento y suficiencia de los sistemas de medición, válvulas de seccionamiento y control para identificar y reparar fugas con rapidez. En caso de detectarse en tuberías principales, recurrir a la Dirección General de Obras y Conservación.

También recomienda instalar inodoros de bajo consumo por descarga y mingitorios secos; verificar la adecuada y periódica implementación de los programas de mantenimiento de la entidad o dependencia, con énfasis en la identificación y reparación de fugas, cambio de válvulas, empaques u otros elementos.

Otras medidas son: reducir la frecuencia y cantidad del líquido de riego al mínimo indispensable, evitando hacerlo en áreas verdes con agua potable y realizar ajustes en los sistemas de aspersión para optimizarlo. De ser posible, cancelar la irrigación de áreas no recreativas durante la temporada de estiaje.

Asimismo, realizar campañas de sensibilización y difusión de las recomendaciones en las comunidades, a fin de contribuir a la reducción del uso de ese recurso natural.

El fin del agua potable en la CDMX

Si el problema del agua persiste, el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACMEX) estima que para el 2030, el 8 por ciento de la capital mantendrá un buen servicio de abastecimiento de agua potable.

Para entonces, el tandeo diario se incrementará en un 35 por ciento, el semanal un 20 por ciento y un 17 por ciento más de la población recibirá el servicio de forma deficiente.

Ante estos datos, el cálculo del llamado día 0 para la capital, se estima para el próximo mes de junio en el caso de que las reservas del Sistema Cutzamala no logren recuperarse a niveles aceptables. La Red Agua de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) proyecta que para 2028 el Día Cero llegue a la CDMX.