El incremento del 12% al salario mínimo en 2025 “servirá de poco, si los precios siguen subiendo”, reclaman clientes de tiendas de autoservicios, quienes acusan que el costo de la canasta básica sigue subiendo, a pesar de los programas del Gobierno Federal para mantener el costo de la misma en los 900 pesos.
Durante recorridos realizados por La Silla Rota en varias tiendas de autoservicio, se pudo constatar que el costo promedio de la canasta básica ronda los mil 200 pesos, 33% más de lo que presume la Procuraduría Federal del Consumidor, un porcentaje muy superior al 12% que aumentará el salario mínimo el próximo año.
“La verdad que prefiero que ya no suban los precios a que aumente el salario”, dice Efraín Jiménez, quien realizaba su despensa en una tienda de autoservicio de Ciudad de México. “Suben los sueldos, pero también suben los precios”, afirma.
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Efraín dice que actualmente gasta en comida y despensa 2 mil pesos mensuales, pero que una “canasta básica”, es insuficiente para darle de comer y mantener a su familia.
Y es que de acuerdo a la Profeco, la canasta básica semanal consta, por ejemplo, de 1 jabón en barra, pero no considera shampoo, jabón para trastes o ropa. Tampoco considera medicamentos, pañales o comida para bebé. “Tendría que ganar como 12 mil pesos para salir bien al final del mes”, dice Efraín mientras carga a su bebé de 2 años.
Este cálculo coincide con la propuesta de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, una iniciativa de más de 60 organizaciones de la sociedad civil mexicana, que impulsa un salario digno de 12 mil 500 pesos mensuales.
De acuerdo con Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, el incremento al salario mínimo para 2025 es “un paso adecuado para la recuperación gradual de los salarios”, pero debe quedar claro que aún no alcanza para cubrir el umbral de pobreza, equivalente al costo de dos canastas básicas.
¿Qué incluye una canasta básica y cuánto cuesta?
La canasta básica de la Profeco consta de 24 productos e incluye: aceite vegetal, arroz, atún, azúcar, carne de cerdo, carne de pollo, carne de res, 1 kilo de cebolla, chile jalapeño, frijol negro, huevo, 1 jabón de tocador, 1 kilo de jitomate, 5 litros de leche, 1 kilo de limón, 1 kilo de manzana, 1 paquete de pan, 1 kilo de papa, 4 piezas de papel, 1 paquete de sopa, 1 kilo de piña, 1 lata de sardina, 4 kilos de tortillas y 1 kilo de zanahoria.
Sin embargo, para el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), la canasta básica está conformada por la canasta alimentaria más la canasta “no alimentaria”; es decir, transporte, educación, acceso a la salud, etc.
La estimación del costo de esta canasta básica para enero de 2025 es de 4 mil 600 pesos mensuales. Por lo que el mínimo necesario para no vivir en pobreza, actualmente, es de 9 mil 200 pesos al mes, lo equivalente al costo de dos canastas básicas, para mantener a una familia de 4 integrantes.
“Al salario mínimo le faltan más de 800 pesos al mes para superar el umbral de pobreza”, señala la organización civil.
Aumento al salario mínimo será de 30 pesos más al día
La presidenta Claudia Sheinbaum anunció que el salario mínimo para el 2025 tendrá un incremento de 12% en todo el país, ya que pasará de 248.93 a 278.80 pesos diarios en la Zona del Salario Mínimo General. Es decir, 30 pesos más al día para alrededor de 8 millones de trabajadores
No obstante, para algunos trabajadores mexicanos el aumento es “muy poco” y no representa siquiera el gasto que realizan en transporte de su hogar a su centro de trabajo.
Tal es el caso de Miguel, quien vive en el Estado de México y trabaja como vigilante en la CDMX. Miguel gana el salario mínimo y, aunque será unos de los beneficiados con el aumento, lo toma con cautela, pues afirma que con esos 30 pesos solo puede comprar un taco.
“Con 30 pesos al día solo me alcanza para un taco de guisado nada más y sin refresco. Es más, con eso ni siquiera pago mi pasaje de mi casa a mi trabajo”, afirma en entrevista, mientras compra parte de su despensa en su hora de descanso.
Como Miguel, miles de personas han padecido de aumentos “sorpresivos” en el costo de productos de consumo básico. Algo que les “duele” más a que no les aumenten el sueldo, afirman.
“Hace unos meses el chayote estaba en más de 100 pesos, la leche ya está en 30 y el huevo sube y baja. Este sube y baja duele más que no me suban el sueldo”, dice Areli, quien gana, desde hace 3 años, 10 mil pesos.