¿Se imagina usted que compra su departamento y que, al año, tiene que desalojarlo? Eso fue lo que les pasó a los habitantes de los 641 departamentos de los 177 edificios del conjunto Pedregal de Cantaluna, en Acapulco. Una unidad habitacional financiada por Infonavit y Fovissste, inaugurada en 2020 y que, luego del sismo del 7 de septiembre de 2021, debió ser desalojada.
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Los edificios del Pedregal de Cantaluna –ubicado al noroeste de Acapulco, Guerrero–, de entre 3 y 4 niveles, fueron considerados inhabitables y de alto riesgo, de acuerdo con un Dictamen de riesgo elaborado por la Secretaría de Protección Civil de la entidad. El documento dice, además, que las edificaciones están construidas sobre una zona sísmica de riesgo severo.
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Los 177 edificios sufrieron daños, catalogados como bajo, medio y alto. A los que mejor les fue, se les agrietó la pared o las juntas del techo se separaron; los azulejos del baño se cayeron y las puertas quedaron descuadradas, como se ve en fotos del dictamen.
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A los de daño medio les quedaron agrietamientos moderados en losas y fallas en los anclajes de las escaleras de acceso al departamento e incluso estas quedaron desoldadas.
Los de daño severo tuvieron daños estructurales en los muros, esquinas que dejaban al descubierto la tubería. También se halló que había inconsistencia en la ubicación del acero del refuerzo vertical y horizontal, así como grietas en muros donde van empotradas las escaleras.
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Pero lo más escalofriante es ver un pedazo de construcción sin sostén, como voladero, escaleras sin apoyo medio o el mortero deshaciéndose como galleta al primer martillazo.
Además, de acuerdo con el Dictamen de Riesgo elaborado por la Secretaría de Protección Civil guerrerense, en la mayoría de los muros afectados el agrietamiento diagonal va de ligero a medio y en los más severos es doble y forma patrones en forma de X. Los mayores daños se registraron en la planta baja.
En el documento se refiere que los habitantes cuando fueron desalojados contaron además que la instalación hidráulica era deficiente y se debe revisar para que sea funcional.
Inhabitables y de alto riesgo; serán demolidas
La Silla Rota envió una solicitud de información a la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de Guerrero, para saber la situación de la unidad habitacional, luego del 7 de septiembre de 2021 que sacudió a Guerrero.
La respuesta de la dependencia es que los 177 edificios de Pedregal de Cantaluna están en pie, pero quedaron afectados, inhabitables y son de muy alto riesgo.
Por el momento, no se ha llevado a cabo la demolición de los edificios. La secretaría aseguró que no es la dependencia correspondiente para realizar esos trabajos. Sin embargo, dijo, "se están realizando las gestiones y trámites correspondientes con las instancias competentes, se lee en la respuesta".
Respecto a la situación de los dueños de las casas demolidas, el trámite lo gestionan las aseguradoras y las instancias competentes directamente con el propietario afectado, añadió la dependencia.
No se ha realizado ningún tipo de mitigación o rehabilitación, debido a que derivado de los dictámenes realizados se declaró inhabitable y de muy alto riesgo, por lo que se procederá a la demolición de dichas estructuras por las instancias correspondientes.
Respecto a las demandas, la secretaria proporcionó copias a Acciones Colectivas de la Profeco para que realicen demandas y el seguimiento con los propietarios afectados, en virtud de ser la instancia competente.
Posteriormente, La Silla Rota envió otra solicitud sobre los daños que dejó el huracán Otis. La misma secretaría respondió que desde el dictamen del DRO se declaró inhabitable y de alto riesgo.
“Estos inmuebles no deberán encontrarse habitados por el alto riesgo que presentan los edificios estructuralmente”.
Riesgo geológico y estructural
La unidad habitacional Cantaluna en Acapulco, Guerrero, construida parcialmente por el Fondo de Vivienda del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores al Servicio del Estado (Fovissste), y que debido al temblor del 7 de septiembre de 2021 fue parcialmente desalojada. El dictamen -cuya copia tiene La Silla Rota- dice que se hizo de manera deficiente y con vicios ocultos. No se tienen antecedentes de inspecciones previas a este inmueble, según el dictamen de riesgo, con fecha 29 de septiembre de 2021.
Los tipos de riesgo son geológico y estructural. El dictamen de la Secretaría de Protección civil al hablar de la localización, en el municipio de la Acapulco, informa que es una zona sísmica de peligro severo donde con frecuencia han ocurrido grandes temblores y las aceleraciones del terreno que se esperan pueden ser superiores al 70 por ciento de la aceleración de la gravedad, según el Manual de Obras Civiles de la Comisión Federal de Electricidad.
Los edificios son de 3 y 4 niveles, con un área de construcción por nivel de 56.35 metros cuadrados. Se comenzaron a construir desde 2014 y se concluyeron en 2020.
Son 177 edificios de entre 3 y 4 entrepisos y cada uno tiene dos departamentos. En total son 641.
El sismo ocasionó daños estructurales en mayor o menor grado en la mayoría de los edificios. Los daños dejaron expuestos su reforzamientos, estos presentaron procesos constructivos deficientes y vicios ocultos, tales como acero sin mortero o muy pobre, falta de elementos de refuerzo donde según el plano estructural debería llevarlo.
Entre los que tuvieron daño ligero están los que se les desprendió el recubrimiento de los muros, agrietamientos de ligeros a moderados en el aplanado d ellos muros, agrietamientos ligeros en las losas, separaciones e intersecciones de juntas muro-losa, muro-muro, desprendimiento de piezas de azulejos en baños, caída de falso plafón en algunas zonas de los departamentos y puertas descuadradas que no se pueden abrir o cerrar.
Los que sufrieron daño medio les quedaron agrietamientos moderados en losas y fallas en los anclajes de las escaleras de acceso al departamento e incluso quedaron desoldadas.
Los de daño severo tuvieron daños estructurales en muros y esquinas que dejaban al descubierto la tubería. También se halló que había inconsistencia en la ubicación del acero de refuerzo vertical y horizontal y grietas en muros donde van empotradas las escaleras.
"Excentricidad"
No solo eso, sino que se detectaron factores que incrementan la vulnerabilidad de los edificios y existe en algunos edificios “excentricidad en la ubicación de los muros de los niveles superiores con respecto a la planta baja”. Lo que significa y así se ve en una foto, una construcción en un muro del segundo nivel, pero sin sostén, al aire, voladizo, casi flotante.
Otros factores de vulnerabilidad son las escaleras para el acceso a los edificios que se encuentran ancladas a los muros de los edificios, lo que ocasionó daños por golpeteo a los muros y a las escaleras metálicas.
En algunos casos las escaleras tienen una longitud de 5 metros y están elaboradas con los mismos calibres y dimensiones de las que tienen una longitud de 2 metros. Además, las de 5 carecen de un apoyo intermedio.
Patios de servicio voladizos
Otra deficiencia es que las plataformas ancladas a los edificios y que funcionan como patio de servicio ocasionan golpeteo y vibración a los muros a los cuales están ancladas ya que no cuentan con apoyo vertical, se encuentra voladizo.
En los muros de mampostería se detectó que los refuerzos verticales no estaban rellenos de mortero, lo que fue determinante para que el muro fallara ante los esfuerzos sísmicos. Estos huecos son una clara deficiencia en el proceso constructivo y que se repitió en varios muros de los edificios más afectados.
También se detectaron muros fallados donde el mortero casi se deshace al primer martillazo. “Se infiere que el mortero no cumple con la norma técnica complementaria”, se lee en el dictamen.
El dictamen concluye que ante los daños registrados y la posibilidad de una réplica sísmica igual o de mayor magnitud y cuyo epicentro es cercano, las 177 edificaciones están en peligro estructural debido a la baja seguridad estructural actual. Aunque hay varios que tuvieron solo daños leves, poseen una tipología similar a los que presentaron daños severos, por lo que en tanto no se realicen trabajos de reforzamiento en la totalidad de edificios, estos no deben ser habitados, pues por el momento no se garantiza la seguridad e integridad de sus habitantes.
Dan apoyos Fovissste e Infonavit
El 8 de mayo de 2023, el Fovissste puso en marcha el Programa de Apoyo Cantaluna en beneficio de 206 personas afectadas por el sismo ocurrido en septiembre de 2021, mediante el cual se aplicará la cancelación inmediata de la hipoteca, la devolución de recursos descontados por el mismo concepto y, en los casos que lo requieran, la entrega de un nuevo crédito.
También se les ofrecerá la alternativa de un nuevo crédito hipotecario para vivienda nueva o usada, para lo cual deberán solicitar el formato al centro de contacto Fovissste.
Para estas acciones se destinaron 179.5 millones de pesos.
Por su parte, Infonavit canceló deudas de los 244 beneficiarios suyos y el 29 de agosto informó que presentó una demanda en contra del municipio de Guerrero, la empresa desarrolladora Opción Paquimé y el director responsable de la obra.
La razón es que fue inadmisible la construcción del conjunto habitacional Pedregal de Cantaluna con edificios de más de dos niveles, en una zona de riesgo sísmico alto.