A cinco meses de que México lleve a cabo la jornada electoral más importante en su historia, donde habrá de elegirse nuevo presidente o presidenta, 9 gubernaturas, 128 senadurías, 500 diputaciones y renovación de 16 alcaldías en la Ciudad de México, InSight Crime una fundación dedicada al estudio y a la investigación de amenazas para la seguridad nacional y la ciudadana en América Latina y el Caribe, señala que las elecciones de 2024 podrían detonar violentos reacomodos criminales.
De acuerdo con un análisis de la fundación, el panorama criminal por el que atraviesa el país de cara el próximo 2 de junio podría entrar en un periodo de agitación violenta a raíz de los resultados de las elecciones. Los cambios en el poder político suelen ir acompañados de violencia a medida que los grupos criminales y los funcionarios electos negocian nuevos acuerdos de trabajo.
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“La nueva estructura del crimen organizado en México y la multiplicidad de actividades en las que participan hace que sea más probable que exista una grave violencia política con un alto grado de impunidad”, señaló a InSight Crime Tony Payan, director del Centro para Estados Unidos y México del Instituto Baker.
Este espiral de violencia podría aumentar con el asesinato de políticos y las amenazas contra candidatos a manos de las dos principales organizaciones criminales que operan en México: el cártel Jalisco Nuevo Generación y el de Sinaloa, quienes han recurrido a menudo a la violencia selectiva para garantizar su capital político y proteger sus operaciones como sucedió en las elecciones de 2018.
Entre 2018 y 2022, un estudio del Proyecto de Datos sobre Localización y Eventos de Conflictos Armados (Armed Conflict Location and Event Data Project, ACLED) registró más de mil incidentes violentos contra funcionarios de gobiernos locales.
2024, año electoral y violento para candidatos
Al arranque de este año, la violencia política en el país ya ha dejado el asesinato de varios candidatos y funcionarios.
El 5 de enero, David Rey González Moreno, quien buscaba la candidatura a la Presidencia Municipal de Suchiate, en Chiapas por el Frente Amplio por México, fue asesinado cuando viajaba a bordo de una motocicleta en un camino conocido como Los Cuaches.
González Moreno era militante del PRI y presidente de la Unión de Ejidos de Suchiate.
El mismo día, pero en el estado de Colima fue asesinado Sergio Hueso, aspirante a la Presidencia Municipal de Armería, por Movimiento Ciudadano (MC). Un grupo de hombres armados lo interceptó en la Colonia El Pelillo.
Mientras que el 4 de enero fue asesinado a tiros Alfredo Giovanni Lezama, secretario General del PAN y regidor de Cuautla, Morelos, cuando estaba haciendo ejercicio en el gimnasio "Body Fusion”.
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Asesinato de políticos en 2023
Previo al año electoral, también se registraron diversos asesinatos de políticos y de quienes aspiraban a contender por un cargo de elección popular, o bien que han ocupado algún cargo en los gobiernos estatales o municipales.
El 21 de diciembre fue asesinado el empresario Ricardo Taja Ramírez, quien aspiraba a la candidatura de Morena para la alcaldía de Acapulco, fue asesinado mientras estaba en una pozolería "Las Vecinas". Anteriormente fue alcaldía del puerto por la alianza PRI-PRD.
El exalcalde del municipio de Ixtlahuacán de los Membrillos, Jalisco, Eduardo Cervantes, fue asesinado a tiros el 18 de octubre, cuando viajaba a bordo de su automóvil gris sobre la carretera a Chapala, a la altura de la colonia Bajos Hornos.
El 11 de octubre fue asesinado a balazos Wilman Monje, exalcalde de Gutiérrez Zamora, Veracruz, frente al Colegio México, luego de haber dejado en las instalaciones a su hijo.
Gutiérrez Zamora era militante de Movimiento Ciudadano y buscaba un cargo político en los próximos comicios.
Ismael Cástulo Guzmán, exalcalde priista de Chichihualco, Guerrero fue asesinado a balazos el 6 de octubre cuando viajaba en una camioneta, junto a otras cinco personas, que resultaron heridas.
El ataque se registró a plena luz del día en la cabecera municipal de Leonardo Bravo. El exalcalde murió cuando era trasladado al hospital.
El 5 de octubre fue asesinado Conrado Mendoza Almeda, alcalde del PRD en el municipio de San Miguel Totolapan, Guerrero, cuando un grupo de hombres armados atacó su domicilio. El crimen se atribuyó al grupo de Los Tequileros. En el ataque también murió su papá.