La relación entre el presidente Andrés Manuel López Obrador y el actual presidente de la Cámara de Diputados, Santiago Creel, inició en 1995, cuando dieron a conocer que la campaña del priista Roberto Madrazo a la gubernatura de Tabasco costó 237 millones de pesos.
La cifra fue mayor a lo que gastó en 1994 el entonces candidato a la presidencia de la República, el priista Ernesto Zedillo. Fueron 137 millones de pesos y Madrazo gastó 100 millones más. Los diarios de aquellos días muestran tanto al presidente Andrés Manuel López Obrador como a Santiago Creel, juntos, cuando presentaron 12 cajas con pruebas documentales del fraude durante una conferencia de prensa.
En aquel tiempo Creel era consejero electoral ciudadano de otrora Instituto Federal Electoral (IFE), que presidió José Woldenberg. Y junto a López Obrador declaró en aquella conferencia "no se vale lo que están haciendo a los mexicanos... No se vale que sigamos siendo agraviados en la política".
Te podría interesar
López Obrador, entonces candidato a la gubernatura de Tabasco por el PRD, acusó que el dinero de la campaña de Madrazo se repartió entre periodistas, políticos, iglesias, pastores evangélicos, empresarios y transportistas. Y adelantó que presentaría una denuncia penal en la entonces Procuraduría General de la República (PGR).
Madrazo se convirtió en gobernador de Tabasco a pesar de dichas irregularidades y aunque desde la presidencia de la República Ernesto Zedillo intentó que dejase el cargo para repetir la elección, eso no ocurrió.
En la entrevista que La Silla Rota realizó a Creel, en junio de 2021, afirmó "el presidente López Obrador también se va a acordar de la custodia de los paquetes de Tabasco en la elección en que participó, yo los custodié y sabe las condiciones en que lo hice; sabe el dictamen que di sobre esa elección y la defensa que hice de la democracia en Tabasco. Me conoce perfectamente, sabe que yo no juego con la democracia ni con otros temas".
Recordó que, en 1997, se reencontró con López Obrador en el Zócalo como integrantes del G4. "Hay una historia entre nosotros, sabe que tengo palabra y lo que pasó por hacer esa defensa en Tabasco 94... En resumen, yo los conozco a ellos y ellos me conocen a mí; y saben que para mí México va primero y que cuando compito, compito fuerte; y que cuando estoy en una posición distinta, argumento y doy debate".
Tres años después
En 1999, López Obrador y Creel se convirtieron en opositores en la elección de Jefe de Gobierno en el Distrito Federal. El panista quedó a tres puntos del perredista y luego, por eso, se convirtió en secretario de Gobernación, con el presidente Vicente Fox.
Esta mañana el presidente Andrés Manuel López Obrador informó en su conferencia mañaneras que, durante ese cargo, Creel autorizó un importante número de casinos.
Pero este desencuentro ocurre también porque en los últimos días el mandatario rechazó mantener cualquier diálogo con Creel. "Que siga su camino" dijo, y lo acusó de manipulador.
Sin embargo el panista respondió el jueves que no aceptará desaparecer los fideicomisos del Poder Judicial como solicitó el titular del Ejecutivo previo a la elaboración del presupuesto 2024. Y aunque aceptó un reto con él para hablar de cómo rescatar la educación en México, el mandatario no respondió.
El tema es también relevante porque el primero de marzo el presidente de la Cámara calificó al titular del Ejecutivo de malagradecido y difamador. Acusó al mandatario de mentiroso y digo que, aunque respeta su investidura, mintió al tacharlo de corrupto.
"Lamento que el presidente siga en una actitud bélica, de difamador, de confrontación y división del país".
Y le recordó que cuando se conocieron en 1995 en su despacho en el edificio Omega, López Obrador también visitó su casa.
"Cuántas veces no fue a mi casa, esto fue hace caso 30 años presidente, usted vio mi patrimonio y modo de vida", reclamó. "No es justo que por diferencias políticas me dífame a mi o mi familia".