El Plan B de reforma electoral contempla el despido de cerca de 6 mil trabajadores del Instituto Nacional Electoral (INE) en el mes de agosto próximo, lo que representaría un gasto para el árbitro electoral de 3 mil 500 millones de pesos, sin embargo, la institución no alcanza a cubrir este monto, dio a conocer el diario Reforma.
El INE cuenta con al menos dos fideicomisos, los cuales han sido criticados por el presidente Andrés Manuel López Obrador, que ascienden a los mil millones de pesos, pero se queda lejos de la cifra que requieren para despedir a gran parte de su personal.
“Para cubrir el pago de posibles indemnizaciones, se destinarán los recursos que integran los fideicomisos de pasivo laboral y de infraestructura inmobiliaria del Instituto”, prevé el Plan B electoral de López Obrador.
El Plan B de la reforma electoral prevé la reestructuración del INE mediante la modificación de sus órganos desconcentrados, lo que traerá una ola de despidos en las filas del árbitro electoral.
La primera víctima de esta reforma electoral fue Edmundo Jacobo, secretario ejecutivo del INE, quien informó que ya fue notificado el pasado 2 de marzo de su despido, aunque oficialmente su cargo acababa hasta el año 2026.
Los despidos que vienen en el INE
El Plan B de reforma electoral también prevé el despido del personal que laboraba en las 300 Juntas Ejecutivas Distritales del INE, ya que estás serán eliminadas de acuerdo con la nueva Legislación. Estos organismos se encargaban de preparar, organizar y celebrar las elecciones en todo el país.
Las 300 juntas distritales será sustituidas por una Oficina Auxiliar que estará a cargo de una persona, quien será el responsable de los aspectos legales y operativos en los procesos electorales.
El consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, expuso que el Plan B electoral de AMLO los obliga al despido de cerca del 85 por ciento de la plantilla laboral de esa institución, lo cual costará cerca de 3,500 millones de pesos al erario.
“El Servicio Profesional Electoral del Instituto cuenta con 2,571 funcionarios, todos ellos evaluados permanentemente. Bueno, la reforma desaparece el 84.6 por ciento de las plazas del Servicio Profesional Electoral, más de 2,100 plazas así, ¡pum! desaparece. El total de plazas que la reforma electoral esfuma son casi 6,000. ¿Saben, en un primer cálculo, cuánto va a tener que pagar el Instituto por la liquidación de esas de esas casi 6,000 plazas? 3,500 millones de pesos”, comentó Córdova en días pasados.