Washington- La Casa Blanca se pronunció este lunes sobre el secuestro de cuatro ciudadanos estadounidenses ocurrido el pasado viernes en la ciudad de Matamoros, México. La portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, describió el ataque como "inaceptable" y aseguró que las fuerzas de seguridad estadounidenses están en contacto con sus homólogas mexicanas para llevar a los responsables ante la justicia.
El presidente Joe Biden ha sido informado del secuestro de los cuatro ciudadanos estadounidenses en Matamoros, ubicada en el estado de Tamaulipas, uno de los más peligrosos del país. El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos está trabajando con el Gobierno mexicano para garantizar que los responsables sean llevados ante la justicia. Además, el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, se reunió en el Palacio Nacional con el presidente, Andrés Manuel López Obrador, para discutir la situación.
"Estamos pendientes del ataque y secuestro de cuatro ciudadanos estadounidenses en Matamoros, México. Este tipo de ataques son inaceptables", manifestó en una rueda de prensa la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre.
Jean-Pierre dijo que Estados Unidos considera a México un aliado cercano con el que mantiene una relación importante que desea fortalecer. La portavoz también destacó la cumbre de "los tres amigos" que tuvo lugar en enero en México, donde Biden se reunió con López Obrador y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau.
El portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, recordó que se recomienda no viajar a Tamaulipas bajo ninguna circunstancia debido a la inseguridad en la región. Además, los estados mexicanos de Guerrero, Michoacán y Sinaloa están clasificados como nivel 4 de alerta por el Departamento de Estado, lo que significa que son los más peligrosos para los ciudadanos estadounidenses.
"Pedimos a los estadounidenses que sigan este consejo", agregó Price.
El FBI está investigando la desaparición de los cuatro estadounidenses y ha ofrecido una recompensa de 50,000 dólares por información que lleve a su liberación y al arresto de los involucrados. Según el FBI, las cuatro personas secuestradas cruzaron la frontera a Matamoros en un vehículo con matrícula de Carolina del Norte y poco después fueron asaltadas por hombres armados y forzadas a subir a una camioneta tipo pick-up.
A pesar de la situación, Estados Unidos ve a México como un aliado importante y desea trabajar con el Gobierno mexicano para abordar los problemas de seguridad en la región. La presencia de los cárteles de la droga en Tamaulipas ha sido una fuente constante de violencia y preocupación para las autoridades mexicanas y estadounidenses, y se espera que se tomen medidas para garantizar la seguridad de los ciudadanos de ambos países en la región.
Con información de EFE.
DJC