Pese a la oposición, critica y revuelo que ha levantado el “plan B” de la reforma electoral, el cual ha sido tachado por políticos, académicos y consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE), como el intento del gobierno de Adres Manuel López Obrador por desestabilizar la democracia y consolidar su régimen autoritario, el “plan B” será impulsado en el Senado.
Este 1 de febrero de 2023 ha dado inicio el segundo periodo ordinario del segundo año de la LXV Legislatura. Y durante la primera sesión, el Senado recibió el documento del “plan B” de la reforma electoral, confirmando su turno directo dado por la mesa directiva el pasado 30 de enero, cuando se remitió a las Comisiones Unidas de Gobernación y Estudios Legislativos, además de la de Justicia para opinión.
La minuta sobre el “plan B” de la reforma electoral proveniente de la Cámara de Diputados, será analizada y discutida la próxima semana, cuando las Comisiones Unidas de Gobernación y Estudios Legislativos se presenten a sesionar.
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La presidenta de la Comisión de Gobernación, la senadora Mónica Fernández Balboa, convocará a las comisiones que analizarán la minuta hasta la próxima semana, pero no se analizarán los más de 400 artículos de las cuatro leyes reformadas que comprende el “plan B”, si no únicamente el artículo 12 de la Ley General de Instituciones y procedimientos Electorales (Legipe).
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Los Senadores únicamente ratificaran o rechazarán la decisión de los Diputados, quienes eliminaron la “cláusula de vida eterna” contenida en el artículo 12 de la Ley General de Instituciones y procedimientos Electorales.
De aprobarse la minuta con proyecto de decreto, se estarán reformando diversas disposiciones de la Legipe, de la Ley General de Partidos Políticos, de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación y se expedirá la Ley General de Medios de Impugnación en Materia Electoral.
Fue Alejandro Armenta, senador de Morena y presidente de la Cámara de Senadores, quien confirmó que la próxima semana será cuando las comisiones se presenten a sesionar sobre la minuta del “plan B” de reforma electoral.
Para algunos analistas, con el “plan B” se busca darles una ventaja indebida a los precandidatos de Morena y acabar con la certeza democrática, además de facilitar la consecución de cientos de tipos de trampas que en el pasado eran comunes, como la manipulación de la lista nominal, la falta de cuidado en la cadena de custodia y la eliminación de los conteos rápidos.
El “plan B” afectará la estructura de los órganos desconcentrados y oficinas centrales, las estructuras de los OPLES, la integración y capacitación de funcionarios de casilla, los periodos de precampaña y campaña, el flujo de la información institucional, las obligaciones de los partidos políticos, el registro de las candidaturas y la propaganda gubernamental, entre muchas otras cosas.
VGB