El Instituto Nacional de Pediatría (INP) es una de las instituciones que brinda atención especializada a niñas y niños de todo el país; sin embargo, actualmente opera con equipo y mobiliario quirúrgico obsoleto que tiene más de 30 años de vida lo que hace que el servicio que otorga sea “limitado y no con la calidad necesaria”. Es por esta razón que busca sustituirlo comprando más de 3 mil insumos en los que desembolsará más de 83 millones de pesos.
La Silla Rota tuvo acceso a un documento interno de Pediatría para el proyecto de “Adquisición de equipo, instrumental y mobiliario quirúrgico”, el cual fue emitido en agosto de este año con el fin de lograr las adquisiciones hacia diciembre. De acuerdo con el informe, el Instituto tiene equipo que en promedio lleva 16 años de vida útil y que califica como “obsoleto”. A esto se suma que la gratuidad del sistema de salud para la población sin seguridad social aumentó la demanda y está ahorcando a la institución con los recursos.
El Instituto Nacional de Pediatría destaca que es una de las dos instituciones -la otra es el Hospital Infantil de México “Federico Gómez”- que brinda atención de tercer nivel a niñas y niños dentro del esquema de gratuidad que implementó el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador para la población sin seguridad social, lo que ha agravado la situación que enfrenta.
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“El Instituto Nacional de Pediatría enfrenta importantes desafíos, derivado de la gratuidad que otorga a la población infantil sin seguridad social. Esta situación en paralelo de la situación de pobreza en los estados, y al ser un nosocomio de tercer nivel, el cual atiende casos complejos y costosos en niños de la población abierta, tiene el compromiso de mantener la infraestructura, los servicios de consultas de especialidad, cirugías, abasto de medicamentos y su plantilla, en condiciones óptimas para seguir siendo un referente a nivel nacional e internacional y así apoyar a la población más vulnerable”, señala.
El equipo obsoleto que frena la atención en el INP
El INP alerta también que “con relación a la infraestructura mobiliaria, se identifica como problemática la existencia de equipo médico e instrumental quirúrgico estropeado, o muy antiguo pues han rebasado su vida útil y aún siguen en funcionamiento, lo que genera en ocasiones ver truncado cierto diagnóstico y tratamiento, así como complicaciones en la enfermedad, trayendo como consecuencia deterioro de la salud, y representa para el Instituto enfrentar la imposibilidad de ofrecer un mejor tratamiento por etapa clínica de enfermedad, situación que se refleja en el rechazo y retrasos en la atención médica, lo que a su vez ve mermada su salud y calidad de vida, aunado a los retrasos en la programación de cirugías de hasta seis meses, lo que implica que el riesgo de complicaciones o deterioro en el paciente se incrementa de manera exponencial”.
Algunos de los equipos incluso rebasan los 30 años de uso, como los generadores de electrocirugía, que fueron adquiridos en 1990, por lo que se han utilizado por 33 años, cuando se recomienda que su vida útil sea de 8 años. Otro caso similar es el de la Unidad de electrocirugía y el electrocauterio, que compró en 1998, por lo que tiene 25 años de uso cuando su vida útil es de 8 años.
Fotografías muestran las deficiencias del equipo instrumental y mobiliario con el que tienen que trabajar a diario los médicos y enfermeras del Instituto Nacional de Pediatría. En algunas de las imágenes se puede ver instrumental roto, maltratado y hasta con abolladuras, lo que a decir del Instituto dificulta que se brinde el servicio adecuado a los niños que a diario recibe para que les hagan una operación.
De acuerdo con Pediatría, la obsolescencia de los equipos para cirugía para realizar intervenciones especializadas ha derivado en la necesidad de arrendar los equipos y que los propios médicos cuenten con su instrumental o se lo presten entre servicios, lo que repercute en los tiempos de cirugía.
“Actualmente el INP tiene registrados en Activo Fijo 740 elementos, de los cuales 1 es equipo médico y 639 es instrumental, los cuales presentan un promedio de uso de 16 años; por lo que muchos de ellos están en condiciones de obsolescencia tecnológica o bien presentan un deterioro físico importante lo que hace que el servicio que se puede otorgar esta limitado y no con la calidad necesaria que requieren las cirugías de especialidad o trasplantes que se requieren para tratar a al a población abierta infantil que es referida al INP”, señala en el informe.
El gasto de 83 millones para sustituir equipo en Pediatría
Ante esta situación, el INP lanzó un llamado de auxilio y solicitó recursos para la compra de 36 equipos médicos y 3 mil 187 instrumentales médicos, para fortalecer la realización de cirugías. Para esta adquisición planea desembolsar 34 millones 155 mil 286 pesos, sin IVA, pero esto es solo la primera etapa del proyecto.
En la propuesta se detalla un horizonte de 5 años para los más de 3 mil equipos e instrumentales, que implica una inversión de 49 millones 599 mil 281 para dar mantenimiento a las piezas hasta 2028. Esto implica que en total Pediatría gastará 83 millones 754 mil 568 pesos para sustituir su equipo de cirugía que ya está obsoleto.
La otra opción que había previsto Pediatría era subrogar el servicio para las cirugías, al enviar a los pacientes a otros hospitales de tercer nivel, con la desventaja de que en su mayoría atienden a adultos, por lo que no están especializados en población infantil. Esta alternativa también era más costosa, pues por el mismo periodo hasta 2028 tendría que pagar 109 millones 760 mil 460 pesos.
Las cirugías en Pediatría
Datos del Instituto Nacional de Pediatría muestran que anualmente realiza poco más de 5 mil cirugías. Hasta el mes de octubre de 2023, por ejemplo, se hicieron 5 mil 293 entre ambulatorias, para las que se requiere hospitalización y trasplantes, cifra menor que las que hubo en todo 2022, que fueron 5 mil 372, como se muestra en la siguiente tabla.
Sin embargo, Pediatría estima que la demanda de cirugías para 2023 es de 5 mil 501 y que continuará elevándose hasta 5 mil 742 intervenciones quirúrgicas en 2028, de la siguiente manera:
Desde 2019 La Silla Rota relató como la falta de recursos ya afectaba la operación del INP y que las cirugías tanto ambulatorias como con hospitalización habían disminuido, por ejemplo, en el caso de las ambulatorias, en 2006 se realizaron mil 950, mientras que en 2018 fueron mil 651, es decir, 299 menos. En tanto, las cirugías con hospitalización también habían disminuido, pues en 2016 se realizaron 3 mil 737 intervenciones y en 2018 llegaron a su menor cifra porque solamente se hicieron 3 mil 276.