Una persona de género no binario es aquelle que no se siente identificade con las categorías: femenino y masculino, sino que se considera a sí misme en un punto medio, en ambas categorías a la vez o bien, en una u otra según la etapa de su vida.
Es importante entender que el género no binario no tiene nada que ver con la orientación sexual de las personas, sino con la identidad social, es decir, la manera en que alguien se identifica y pide ser reconocide en la sociedad.
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Lucía Ciccia, investigadora del Centro de Investigaciones y Estudios de Género (CIEG) de la UNAM, explica que la identidad de género es el género con el que las personas se sienten identificadas y que así como hay quienes se identifican como varones o mujeres, hay quienes tienen identidades de género que no son binarias.
Las personas no binaries usan pronombres neutros y piden ser nombradas como ‘elle’, por lo que al hacer referencia a elles también deben usarse pronombres con la letra “e”, por ejemplo: abogade, licenciade, compañere o investigadore.
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El paraguas de las identidades no binarias
El género no binario es también un término paraguas para nombrar a otras identidades. Algunas de las más populares son:
- Agénero: personas que se identifican de manera neutral en cuanto al género, es decir que pueden no tener género o tener un género indefinible.
- Bigénero: quienes de manera simultánea o alternada se identifican con dos identidades de género.
- Género fluido: personas que fluyen entre los géneros, de manera que su identidad se asocia con la manera en que se sienten, por lo que esta fluye (es cambiante) o incluso, pueden sentirse sin un género en específico.
La importancia de reconocer a personas no binaries
La visibilidad de las personas no binaries implica que sean reconocides de acuerdo con su identidad de género en documentos oficiales como el INE, títulos académicos, licencia de conducir, etc. hasta ser nombrades en los medios de comunicación como piden ser llamedes: con el pronombre elle y el uso de la “e”.
El lenguaje inclusivo y no sexista ofrece varias opciones para evitar excluir o discriminar de manera escrita, oral o visual al abanico de las diversidades de género. Así mismo, ofrece recursos para no caer en estereotipos asociados género y en el eso del masculino universal. En esta nota se comparten algunas estrategias para comenzar a utilizarlo: Lenguaje incluyente y no sexista, ¿por qué hay que usarlo?