El Senado de la República logró destrabar la reforma que plantea la permanencia de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública hasta 2028, luego de que los partidos de oposición la frenaran en el pleno el pasado 22 de septiembre.
La propuesta consiste en reformar un artículo transitorio de la reforma constitucional que creó la Guardia Nacional en 2019, donde se pretendía que el cuerpo de seguridad –originalmente con mando civil– tuviera apoyo de elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) hasta 2024.
Pero la entonces diputada del PRI Yolanda de la Torre, hoy presidenta del Poder Judicial de Durango, presentó una iniciativa para ampliar ese acompañamiento militar en la Guardia Nacional. En la Cámara de Diputados la reforma se votó por mayoría con los votos de la alianza Morena-PT-PVEM y el PRI.
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Ya en el Senado los partidos de oposición, incluida la fracción parlamentaria del PRI, adelantaron que votarían la reforma en contra si no la debatían primero. Como no hubo un debate preciso, en la sesión del 22 de septiembre el coordinador de Morena, Ricardo Monreal, propuso mejor regresarla a comisiones.
¿Por qué? Porque tendrían que esperar más de un año para presentar una reforma igual o parecida, pues se desecharía de plano, según el proceso legislativo que implica cambios a la Constitución. Al final, Morena logró devolver la reforma a comisiones y encontró una fórmula para que todos estén en favor de dejar al Ejército en las calles.
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Las claves del avance
A continuación, te presentamos las 4 diferencias entre la propuesta hecha por el PRI en la Cámara de Diputados y lo que consiguió unificar al Senado, bajo la negociación de Ricardo Monreal. Estos cambios los detalló el mismo en su cuenta de Twitter.
1. Una comisión especial
Según lo detalló Monreal, en el dictamen que actualmente se discute en el Senado, lograron incluir la creación de una Comisión Bicameral –es decir, que estará integrada por diputados y senadores– para que analice y dictamine los informes que rinda el Poder Ejecutivo al Congreso, en materia de seguridad.
2. Informes semestrales
Además, los senadores estuvieron de acuerdo en que los informes que la Guardia Nacional y la Sedena entreguen sobre el estado de la seguridad pública en el país deberán ser semestrales y no anuales, como se ha hecho siempre.
Sin detallar la razón por la que se acordó esa temporalidad para los informes de seguridad, se puede inferir que la oposición solicitó esto porque en la creación de la Guardia Nacional se solicitaron únicamente informes anuales.
3. Citarán a secretarios
Otro añadido a la reforma que originalmente presentó el PRI es que la Comisión Bicameral podrá citar a comparecer a cualquier integrante del gabinete de seguridad del Poder Ejecutivo, es decir, al titular de la Guardia Nacional, de la Sedena o de la Marina.
Estos personajes solo acuden al Senado cuando se presenta la glosa del informe de gobierno o cuando los cita el pleno de la Cámara, pero ahora podrían comparecer ante esta comisión.
4. Partida especial
Un reclamo que la oposición hizo desde el inicio de la discusión es que se etiquetara, en el Presupuesto de Egresos de la Federación, una partida especial para el fortalecimiento de policías locales, que son todas de integrantes civiles, y lograron esa modificación.
De acuerdo con la nueva redacción de la reforma, el dinero destinado al fortalecimiento a las policías locales "no podrá ser inferior en términos porcentuales al incremento que reciba la Fuerza Armada permanente y la Guardia Nacional para tareas de seguridad pública cada año".