El presidente ruso, Vladímir Putin, reclamó el control de la región de Donbás, en el este de Ucrania, como condición para aceptar la congelación de la línea del frente en el conflicto. Esta demanda fue presentada durante la reunión con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en Alaska.
Putin ya había expresado esta posición a través del enviado estadounidense Steve Witkoff, según adelantó el diario estadounidense Financial Times y posteriormente fue confirmada por el periódico español El País. La región de Donbás comprende las provincias ucranianas de Donetsk y Lugansk, que Rusia considera esenciales en cualquier acuerdo.
Según declaraciones de Trump, sus aliados europeos coincidieron en que la forma más directa para terminar la guerra consiste en alcanzar un acuerdo de paz. Sin embargo, tanto Kiev como Bruselas mantienen la postura de que se requiere un alto el fuego previo para abrir negociaciones sin enfrentamientos activos.
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Trump compartió la propuesta con los líderes europeos y con el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, quien se prepara para viajar a Washington y reunirse con él. Trump declaró que el logro de un acuerdo depende ahora de Zelenski y subrayó que los países europeos también deben asumir un papel activo.
Rechazo europeo y exigencias de seguridad para Ucrania
Ucrania y los líderes europeos expresaron su rechazo a la propuesta de Putin. Señalan que cualquier proceso de paz debe comenzar con un alto el fuego sin condiciones, y consideran que la línea actual del frente debe servir solo como punto de partida para las conversaciones.
Los gobiernos europeos también reiteraron la necesidad de proporcionar a Ucrania garantías de seguridad que permitan preservar su soberanía e integridad territorial. Celebraron que Trump se mostrara dispuesto a respaldar esas garantías si se establece un alto el fuego o se firma un acuerdo de paz definitivo.
Desde Moscú, Putin calificó su visita a Alaska como "oportuna y extremadamente útil" durante una reunión televisada con funcionarios de alto nivel en el Kremlin. También expresó que Rusia respeta la posición de Estados Unidos en relación con el conflicto y declaró que su gobierno mantiene la intención de buscar una resolución pacífica.
Tras el encuentro con Putin, Trump tiene previsto reunirse con Zelenski el lunes en Washington. En caso de avances, se considera una posible reunión trilateral con participación de los tres mandatarios.
Los territorios de Ucrania que Rusia exige y que Trump pone en la mesa
El encuentro en Alaska entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el presidente de Rusia, Vladimir Putin, llegó con un tema central: el futuro de los territorios ucranianos ocupados por Moscú.
Desde 2014, cuando Rusia se anexionó la península de Crimea, la geografía política de Ucrania ha cambiado de forma drástica. La guerra en el Donbás, que involucró a separatistas apoyados por Rusia en Donetsk y Lugansk, dejó miles de muertos y un conflicto congelado hasta 2022, cuando Putin lanzó una invasión a gran escala.
Avances y retrocesos en el mapa de la guerra
En los primeros meses de la ofensiva de 2022, las tropas rusas llegaron a las afueras de Kiev y capturaron amplias zonas de Zaporiyia y Jersón. Sin embargo, la resistencia ucraniana y el apoyo militar occidental revirtieron parte de esas ganancias.
Hoy, Moscú controla aproximadamente el 20% del territorio ucraniano, según estimaciones del Institute for the Study of War (ISW). Este porcentaje incluye Crimea, gran parte de Lugansk y Donetsk, y zonas estratégicas en el sur.
El Donbás como punto crítico
Para Putin, completar el control de Lugansk y Donetsk es una prioridad. Según reportes, el Kremlin presiona para que Ucrania entregue las áreas que aún mantiene en esas regiones, lo que implicaría ceder ciudades clave como Kramatorsk y Slávyansk.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, ha reiterado que "no se puede abandonar el Donbás", advirtiendo que sería usado como plataforma para futuras ofensivas rusas.
El dilema de Zaporiyia y Jersón
Otra parte de las conversaciones podría centrarse en Zaporiyia y Jersón, capturadas parcialmente en 2022. Rusia ofrece congelar el frente si se mantienen las fronteras actuales, pero no hay señales de que esté dispuesta a devolver zonas costeras estratégicas, que forman parte del corredor terrestre hacia Crimea.
Trump mencionó vagamente "propiedades frente al mar", lo que se interpreta como una referencia a la costa del mar de Azov o del mar Negro, pero sin detalles concretos.
Europa y Kiev rechazan concesiones
Los aliados europeos de Ucrania se oponen a negociaciones que impliquen reconocer la ocupación rusa. Para ellos, cualquier intercambio territorial en esta etapa significaría legitimar anexiones consideradas ilegales por la ONU y la mayoría de la comunidad internacional.
El desenlace de la cumbre podría definir el rumbo de la guerra y de las fronteras ucranianas, pero las posiciones siguen profundamente enfrentadas.
¿Cómo llegamos aquí?
- Febrero 2014 – Rusia ocupa y anexa Crimea.
- Abril 2014 – Comienza la guerra en Donbás con apoyo ruso a separatistas.
- Febrero 2022 – Putin lanza una invasión a gran escala de Ucrania.
- Marzo 2022 – Rusia ocupa amplias zonas del sur, incluidas partes de Zaporiyia y Jersón.
- Septiembre 2022 – Moscú anexiona ilegalmente cuatro regiones ucranianas (Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón).
- 2023-2024 – Ucrania recupera parte del territorio; Rusia retrocede al 20% de control.
- Agosto 2025 – Trump y Putin preparan cumbre en Alaska con territorios ucranianos en agenda.
AJ, VGB
