Rusia y Ucrania se han enfrascado en una nueva controversia en torno al canje de prisioneros de guerra menores de 25 años y gravemente enfermos, así como también, por la entrega de cuerpos de soldados caídos en combate, que fue acordado en la segunda ronda de negociaciones en Estambul.
Este canje, que el presidente ucraniano Volodímir Zelenski había anunciado que involucraría una primera tanda de 500 prisioneros de cada bando y se esperaba para este fin de semana, no se llevó a cabo, con ambas partes culpándose mutuamente de obstaculizar el intercambio.
Ucrania acusa a Rusia de manipulación y de hacer declaraciones falsas respecto al canje. Según el Ministerio de Defensa de Ucrania, Rusia está intentando crear obstáculos artificiales para evitar la devolución de prisioneros ucranianos y llevarse a los suyos.
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El organismo ucraniano encargado de los prisioneros de guerra explicó que Ucrania entregó sus listas para el intercambio basándose estrictamente en las categorías definidas en Estambul: heridos graves, enfermos graves, bajo la fórmula de "todos por todos" y soldados jóvenes.
Sin embargo, afirman que la parte rusa entregó listas que no se corresponden con el enfoque acordado. Ucrania realizó comentarios sobre esto y considera que el próximo paso le corresponde ahora a Rusia.
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El Ministerio de Defensa de Ucrania denuncia que esto es otro intento de "revertir" lo acordado en Estambul, lo que pone en duda el nivel y la capacidad del equipo negociador ruso.
Respecto al intercambio de cuerpos de caídos, las autoridades ucranianas aseguraron que todavía no se había concertado una fecha y que la parte rusa ha recurrido a "acciones unilaterales". Ucrania ve estas acciones rusas como un intento de manipular e instrumentalizar cuestiones humanitarias delicadas para propósitos mediáticos.
El Ministerio de Defensa ucraniano instó a Moscú a "poner fin a los juegos sucios" y regresar al trabajo constructivo para implementar lo acordado "en los próximos días". Ucrania subraya que está interesada en un resultado real: el retorno de sus prisioneros y de los cuerpos de los caídos.
Rusia responde y acusa a Ucrania
Por su parte, el jefe del equipo negociador ruso, Vladímir Medinski, afirmó que Rusia estaba lista para comenzar el canje y la entrega de cuerpos. Medinski acusó a la parte ucraniana de haber pospuesto de modo indefinido tanto la recepción de cadáveres como el canje de prisioneros.
Aseguró que el grupo de negociadores ucranianos "por alguna razón ni siquiera acudió al lugar del canje", dando "diversas razones, y todas bastante extrañas".
Rusia sostiene que, en estricta correspondencia con lo acordado en Estambul, comenzó a cumplir el acuerdo humanitario el 6 de junio, iniciando la entrega de 6,000 cuerpos de militares ucranianos caídos y el canje de militares heridos, enfermos graves y menores de 25 años.
Medinski afirmó que la primera partida de cadáveres congelados de soldados ucranianos, 1,212 cuerpos, ya llegó en camiones refrigerados al lugar del canje, y que los restantes estaban en camino.
Llamó a Kiev a "cumplir estrictamente el cronograma y todos los acuerdos alcanzados, y efectuar el canje inmediatamente". Medinski declaró que Rusia está en el lugar acordado, lista para trabajar, e invitó a los medios a comprobarlo personalmente, afirmando que "Rusia siempre cumple su palabra".
Rusia ataca empresas de armas en Ucrania
En un contexto de continuas hostilidades, Rusia informó haber lanzado un ataque masivo de misiles y drones durante la noche previa a las acusaciones sobre el canje.
El Ministerio de Defensa ruso aseguró que los ataques iban dirigidos contra empresas militares ucranianas, talleres de ensamblaje de drones, talleres de mantenimiento y reparación de equipamiento militar, y almacenes de municiones del Ejército ucraniano.
Rusia afirmó que estos ataques lograron su propósito y que "todos los objetivos designados fueron destruidos".
La Fuerza Aérea de Ucrania, por su parte, reportó haber neutralizado 87 de 206 drones rusos y 7 de 9 misiles esa misma noche.
La dependencia militar ucraniana reconoció impactos en diez emplazamientos en todo el país, además de la caída de fragmentos de drones derribados en siete puntos. Los ataques contra la ciudad de Járkov causaron al menos tres civiles muertos.
VGB