El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS, por sus siglas en inglés) encabezado por Kristi Noem han intensificado su estrategia migratoria al lanzar una nueva campaña en redes sociales en la que exhorta a la ciudadanía a reportar a migrantes indocumentados.
A través de su cuenta en X, el DHS difundió una imagen del icónico Tío Sam acompañada del mensaje: “Reporta a todos los invasores extranjeros ilegales. Llama al 866-347-2423”, el número corresponde al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
El cartel con la frase "Ayuda a su país a localizar y arrestar a inmigrantes ilegales", como parte del llamado directo a la población para colaborar con las autoridades migratorias.
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La publicación ha generado reacciones diversas, desde apoyos por parte de sectores que promueven una política migratoria hasta duras críticas por parte de organizaciones de derechos civiles y grupos proinmigrantes, quienes acusan al gobierno de incitar al miedo, la discriminación y la xenofobia.
La aparición de esta campaña se enmarca en una serie de medidas impulsadas por la administración del presidente Donald Trump, para localizar y arrestar a inmigrantes en situación irregular en Estados Unidos.
Hasta el momento, ni la Casa Blanca ni portavoces del ICE han emitido declaraciones adicionales sobre la campaña, mientras diversas organizaciones se preparan para impugnar estas acciones ante tribunales y organismos internacionales.
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Contexto: el estallido del malestar que se vive en Los Ángeles tuvo su origen el 6 de junio, cuando el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) realizó varias redadas en distintos puntos de la ciudad que llevaron al arresto de al menos 44 personas en el distrito de Westlake, el centro y el sur de la metrópoli.
En respuesta, una multitud salió a manifestarse en contra de estas detenciones, lo que llevó a Trump a ordenar el despliegue de elementos de la Guardia Nacional para repeler las protestas y resguardar el edificio federal de inmigración, ubicado en pleno corazón de Los Ángeles.
Se suicida mexicano capturado en redadas en Atlanta
Un inmigrante mexicano que se encontraba detenido en un centro de Georgia murió aparentemente tras quitarse la vida, confirmó este jueves a EFE el ICE.
Jesús Molina Veya, de 45 años, fue hallado inconsciente a principios de junio, "con una ligadura alrededor del cuello" y es el segundo migrante que muere bajo custodia de ICE en Georgia y el octavo en el país, según cifras oficiales.
Molina fue declarado muerto el pasado 7 de junio en el Hospital Phoebe Sumter de Americus, en el sur de Georgia, donde fue trasladado luego de que el personal médico del Centro de Detención de Stewart, en Lumpkin, intentara infructuosamente de reanimarlo, de acuerdo con la agencia de inmigración, que añadió que está investigando la causa de su muerte.
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A principios del mes pasado, el mexicano Abelardo Avelleneda Delgado, de 68 años, murió cuando era trasladado de la cárcel de condado de Lowndes, en Valdosta, al Centro de Detención de Stewart, un reclusorio operado por la empresa privada CoreCivic que ha estado en la mira de los defensores de derechos humanos por supuestos abusos y negligencia médica.
kach