La denuncia del presidente colombiano, Gustavo Petro, reactivó el debate sobre la participación de exmilitares del país en la guerra entre Rusia y Ucrania.
El mandatario aseguró que varios colombianos reclutados como combatientes privados en territorio ucraniano estarían siendo forzados a permanecer en el conflicto, calificando su situación como una forma de “esclavitud”. Petro afirmó que existen videos de los propios soldados intentando salir sin éxito, lo que generó preocupación nacional e internacional.
PUEDES LEER: Demócrata impulsa juicio político contra Pete Hegseth
Te podría interesar
Petro pide a Zelenski intervenir y liberar a los combatientes
Durante una ceremonia militar en Bogotá, Petro reiteró que ya solicitó a la Cancillería contactar directamente al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, para gestionar la salida de los colombianos que trabajan como mercenarios. Según el mandatario, Colombia “no tiene por qué involucrarse” en una guerra ajena y recordó que ni Rusia ni Ucrania han causado daño directo al país.
La petición se suma a otro pronunciamiento hecho días antes en X, donde aseguró que esos combatientes se encuentran “secuestrados” en territorio ucraniano.
PUEDES LEER: Votantes de Trump lo responsabilizan por alza en la inflación: Politico
Un debate jurídico: Congreso aprueba norma contra el mercenarismo
El pronunciamiento ocurre justo cuando la Cámara de Representantes aprobó en último debate la adhesión a la Convención Internacional contra el Reclutamiento, la Utilización, la Financiación y el Entrenamiento de Mercenarios, firmada en 1989 ante Naciones Unidas.
El gobierno busca así tipificar delitos asociados a esta actividad, reforzar la cooperación judicial y dejar clara su postura contra la “comercialización de la violencia”.
Casos judiciales y presencia en otros conflictos
El tema tomó mayor relevancia después de que un tribunal ruso condenara a 13 años de prisión a José Aarón Medina y Alexander Ante, dos colombianos acusados de combatir como mercenarios en las filas ucranianas y extraditados desde Venezuela.
La presencia colombiana no se limita a Europa del Este: decenas participan también en conflictos como el de Sudán, donde integran grupos paramilitares, y se recuerda el caso del comando de 26 mercenarios implicado en el asesinato del presidente haitiano Jovenel Moïse en 2021.
LSHV
