Tras difundirse que la jefa de gabinete de Donald Trump, Susie Wiles, habría declarado que el presidente tiene una “personalidad de alcohólico”, la misma funcionaria salió a retractarse de dicha declaración y culpó a los medios de malinterpretarla.
Wiles afirmó que diversas publicaciones omitieron contexto de una entrevista concedida a la revista Vanity Fair. Señaló que el reportaje presentó una narrativa distinta a lo expresado durante la conversación.
En un mensaje público, la funcionaria declaró que el texto “ignoró un contexto significativo” y “omitió gran parte de lo que yo y otros dijimos”. También calificó el artículo como “una pieza engañosamente elaborada”.
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Wiles sostuvo que la cobertura generó una lectura errónea de sus palabras. En su pronunciamiento no negó las frases atribuidas a la entrevista.
Las declaraciones originales en Vanity Fair
En la entrevista citada por Vanity Fair, Wiles afirmó que Trump “tiene personalidad de un alcohólico”. En ese mismo diálogo señaló que el presidente gobierna con la “que no hay nada que no pueda hacer. Nada, cero, nada.”.
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La jefa de gabinete explicó el sentido de la analogía. Dijo: “Algún psicólogo clínico que sepa muchísimo más que yo rebatiría lo que voy a decir. Pero los alcohólicos funcionales, o los alcohólicos en general, exageran su personalidad cuando beben”.
Wiles aclaró que la comparación no alude al consumo de alcohol. Recordó que Trump no bebe y que su referencia se basó en patrones de comportamiento.
La funcionaria añadió: “Así que soy un poco experto en grandes personalidades.”, al vincular su explicación con experiencias personales.
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Contexto del estilo de gobierno
Durante la entrevista, Wiles describió el estilo de conducción del presidente. Indicó que Trump actúa con la idea de que no existen límites para su capacidad de acción.
También señaló que ese enfoque se refleja en espacios públicos y privados. Explicó que su labor consiste en canalizar prioridades y coordinar procesos internos.
Sobre la retribución política, afirmó: “Tenemos un acuerdo vago de que el ajuste de cuentas terminará antes de que transcurran los primeros 90 días”.
En referencia al caso contra la fiscal general de Nueva York, dijo: “Bueno, esa podría ser la única retribución”.
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Otras declaraciones atribuidas a Wiles
Wiles se refirió al vicepresidente JD Vance como “un teórico de la conspiración durante una década”. Agregó que su cambio de postura frente a Trump fue “un poquito más, algo político”.
Sobre Pam Bondi, declaró que está “completamente olfateada” en el manejo de los archivos de Jeffrey Epstein. Señaló que las carpetas entregadas estaban “llenas de nada”.
Respecto al expediente Epstein, afirmó que Trump aparece en el archivo y añadió: “él no está en el archivo haciendo nada terrible”. También dijo que “no hay evidencia” sobre visitas de Bill Clinton a la isla.
En relación con Elon Musk, comentó que es “un [usuario] declarado de ketamina” y señaló que algunos mensajes ocurren “cuando está tomando microdosis”.
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Política exterior y reacción pública
Wiles habló sobre Venezuela y afirmó que Trump “quiere seguir haciendo estallar barcos hasta que Maduro se rinda.”. También indicó que la estrategia se enmarca en una guerra contra las drogas.
Tras la publicación del reportaje, Wiles reiteró su crítica al tratamiento editorial. Declaró que el artículo “omitió contexto relevante”.
Alcance de la retractación
Las declaraciones públicas de Wiles se enfocaron en la interpretación mediática del contenido. En sus mensajes no negó la frase “has an alcoholic’s personality”.
Las citas textuales de Vanity Fair muestran que Wiles formuló la analogía y explicó su significado dentro de la entrevista.
De acuerdo con la sintaxis y el contexto de sus propias palabras, la retractación se dirige al encuadre del reportaje y no a la existencia ni al sentido original de la declaración.
VGB